Te encontré

«Capítulo 36»

Continuación...

—Mamá... papá, que gran sorpresa— aún estaba asombrada, no me esperaba que vinieran.

—Queríamos venir de sorpresa, pero parece que tienes visita— respondió mamá mirando hacia adentro, tragué saliva.

—Amm...— iba a hablar, pero la voz de Edward me interrumpió.

—Bella, ¿quién es?— preguntó, después apareció a mi lado, sus ojos se abrieron como platos al igual que los de mis padres.

—Mis padre vinieron de sorpresa— respondí con una sonrisa fingida, él volteó a verme y sonrió también.

—Oh, me alegro mucho— los miro otra vez, ellos seguían asombrados pero el rostro de mi padre se desfiguró, mostrando enojo.

—Sería bueno que entrarán— me hice a un lado para que pasaran, mis padres entraron al departamento y caminaron hacia la sala. Dejándonos a Edward y a mí solos.

—No sabía que iban a venir— susurró, miré hacia la sala en donde ya estaban mis padres con Lizzie.

—Menos yo, ahora tenemos un problema...— dije mirándolo, él levantó ambas cejas y esperó a que continuara—Mis padres te odian...

— ¿Qué? Creí que les agradaba— musitó mirando a mis padres, suspiré.

—Sí les agradabas... pero desde que tuvimos esos problemas y me fui, mis padres te tomaron un poco de coraje... así que ese es el problema.

—Veré que hago— dijo volviendo la vista hacia mí, torcí la boca, sería difícil esto... pero tenía un poco de esperanza de que mis padres entenderían. Caminamos devuelta a la sala, Lizzie le enseñaba los nuevos juguetes a mis padres; al vernos de pie, nos miraron.

Lizzie caminó hacia nosotros y nos mostró su nuevo juguete.

— ¿Te gustó?— me puse a su altura y la miré con una sonrisa, mi pequeña comenzó a balbucear. Besé su frente antes de tomarla entre mis brazos.

—Está más grande ahora, me la imaginaba aún pequeñita— respondió mamá viendo a Lizzie, quien sonreía y jugueteaba con Edward a mi lado.

—Cada vez crece más— dije besando la mejilla de mi hija. Ya no quería que creciera.

—Edward— mamá lo llamó, él la miró serio, tragué en seco. Esperaba que no empezara a discutir, no quería discusiones—Me alegra verte por aquí, hacía tiempo que no los veíamos juntos.

—Me alegra verlos también, y tienes razón Renée hacía tiempo que no nos veíamos, pero creo que ustedes ya saben la razón— habló, mis padres lo miraron serio. Comenzaba a sentirse un ambiente pesado, cosa la cual no me gustaba para nada.

— ¿Y ya está arreglado?, ¿están juntos otra vez?, ¿o al fin has querido ver a tu hija?— preguntó papá, lo miré asombrada.

—Arreglamos el asunto y nos dimos una nueva oportunidad, pero yo nunca quise que Bella se fuera, la estuve buscando pero no la encontré y cuando me enteré que estaba embarazada fue lo peor, Alice era quien sabía acerca de ella y nunca me quiso decir donde estaba, yo deseaba estar con ella durante su embarazo, pero no fue posible— respondió molesto, miré hacia abajo, me arrepentía mucho de haberme ido... pero no soportaba más.

—Te rendiste muy fácil— musitó mamá.

—No fue así, la pase mal y se que Bella también o peor, pero yo no le dije que se fuera, ella quiso hacerlo, me dolió... claro que sí, y después me arrepentí, me odiaba por haberla dejado ir— me miró fijamente, me perdí en el brillo de sus ojos verdes.