Al escuchar la voz de Luna ambos nos dejamos de acercar, solo nos quedamos viendo, hasta que Luna volvió a hablar.
—Matteo, te estoy hablando— dijo Luna un poco molesta cuando Matteo palacio no haberle puesto atención a lo que había dicho. Mientras Luna se acercaba más hacia donde estábamos.
—Luna, por favor, estoy ocupado— dijo Matteo muy serio, parecía querer estar a solas conmigo, pero Luna arruinaba los planes.
—No, Matteo, necesito hablar contigo ya, urgente— dijo viéndome muy mal, pero no podía esperar que fuera súper buena onda cuando su novio la termino después de conocerme.
—¿No puede esperar?— dijo Matteo rodando los ojos, yo también comenzaba a desesperarme, Luna no nos dejaba hablar.
—No, no puede esperar— dijo Luna cortante, así que para evitar peleas decidí irme.
—Hablen ustedes, total, un día más un día menos que siga así, ya no me interesa— dije molesta, Luna solo causaba que me enojara.
Dije mientras patinaba hacia la salida de la pista, para irme a los lockers y encontrarme con Ámbar pues íbamos a salir después del entrenamiento.Narra Matteo
Quería hablar con Emilia, era el momento perfecto, ella estaba sola dando vueltas en la pista y cuando grite su nombre, ella lo escuchó, dijo el mío, pero a los pocos segundos volví a escuchar mi nombre, esta vez no era proveniente de los labios de Emilia. Era Luna, que por lo terca que es, no me dejó ni hablar un poco con Emilia.
Cuando Emilia se fue, Luna ya cuando estaba segura de que Emilia no estaba ahí, comenzó a hablar.—Matteo— volvió a decir Luna cuando ya no se alcanzaba a ver a Emilia.
—¿Qué pasa? ¿Por qué tanta urgencia?— dije ya molesto, pues literal Luna había arruinado tal vez la mejor parte de mi día.
—¿Te enojaste?— preguntó Luna por como le hice las preguntas, pero si, estaba enojado.
—Luna, habla ya por favor— dije para ya no perder más tiempo del que ya me había quitado.
—Mira, Matteo, es que yo...— dijo Luna agachando la cabeza, pero solo estaba retrasando las cosas.
—Luna, si no puedes decirlo, mejor me lo dices después ¿No?— dije muestras me abría paso para irme en busca de Emilia.
—¡No! No te vayas, espérate— dijo Luna deteniéndome, yo solamente me estaba comenzando a desesperar.
—Rápido Luna ¿Qué pasa?— dije desesperado, Luna no me estaba diciendo nada.
—Bueno, es que estuve pensando, mucho, sobre...— dijo Luna con una larga pausa que no pude soportar.
—¿Sobre que?— dije al no encauchar a Luna completar su oración.
—Nosotros— dijo Luna rápido, agachando aún más la cabeza.
¿Pero que estaba diciendo? ¿Cómo que nosotros? ¿Era una broma esto?—¿Cómo que nosotros?— pregunté totalmente extrañado por lo que había dicho Luna.
—Si, tú y yo— dijo Luna con la voz temblorosa, parecía apenada por decirlo.
—Luna, no te estoy entendiendo nada, explícate por favor— dije cuando ya me había perdido totalmente en esta conversación, literalmente ya no tenía nada de sentido para mi.
—Mira, no sé por qué, pero siento que ahora quiero seguir junto a ti— dijo Luna, ¿Estaba escuchando bien? ¿Luna quería volver conmigo? O simplemente estaba soñando, si antes estaba perdido en la conversación, ahora más que nunca.
—Luna, ¿Estás diciendo que quieres volver conmigo?— dije sorprendido pues literalmente no podía creer lo que estaba pasando.
—Si, Matteo, entendiste bien, quiero que volvamos a ser la pareja perfecta que éramos antes— dijo Luna sacando una sonrisa, pero yo solo me confundía más.
¿Qué no era ella la que me había terminado? La que dijo dónde estaba Emilia, la misma persona que no quería regresar conmigo y se alegró de que le dijera que ya no le iba a insistir más.
—Luna ¿Te sientes bien? ¿Si eres tú?— dije riéndome pues ya no sabía cómo reaccionar ante esta situación, todo era demasiado extraño.
—Si soy yo Matteo, soy la misma Luna que te quiso desde el primer momento en que te vi, la misma que ha estado a tu lado, disfrutando cada momento y ahora soy la misma que está viendo sus errores y lo que dejo ir— dijo Luna, pues realmente yo no le estaba creyendo nada, hasta que dijo eso.
—Luna yo, no sé qué decirte— dije cuando literalmente ya no tenía ni una palabra que decir, estaba sorprendido con Luna, pues ella no es así.
—Solo dime lo que quiero escuchar, por qué sé que tú también lo quieres decir— dijo Luna, haciendo referencia a una sola cosa, que le dijera que volviéramos a ser novios.
—¿Matteo?— dijo Luna cuando no respondí a lo que me estaba diciendo.
—Luna, ya te dije que no sé qué decirte, estoy sin palabras— dije, pues seguía sin palabras, tenía tantos pensamientos pasando uno detrás de otro por mi mente.
Recuerdos, momentos, sentimientos que llegaban como disparos, demasiado rápido para poder procesarlos.Pero después de todos esos recuerdos y momentos que llegaban a mi mente llegaba el nombre de Emilia, a recordarme por qué no podía decirle nada a Luna, pero luego llegaba Luna con todo el tiempo que estuvimos juntos con esos momentos inolvidables.
—Matteo— dijo Luna, al parecer esperando obtener una respuesta.
—¿Qué pasa?— pregunté cuando ninguna respuesta coherente que pudiera darle a Luna llegaba a mi mente.
—Ya no puedo más, por favor volvamos a estar juntos— dijo Luna dando algunos pasos para acercarse a mi.
—Es que yo— dije sin poder terminar, Luna me había interrumpido.
Narra Emilia
Salí de la pista y me quedé un momento cerca de ahí pensando en lo que pude hablar con Matteo pero Luna no nos dejó.
Así que decidida volví a entrar a la pista para hablar con Matteo y quitar a Luna de ahí, pues yo no me iba a dejar manipular por una chiquita.Pero cuando entré y busqué dónde estaba Matteo y al verlo, solo pude sentir como las lágrimas salían de mis ojos, como se me aceleraba el corazón y como sentía que esa imagen nunca se iba a borrar de mi mente.
Luna y Matteo besándose.
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¿Cuándo pasó esto? |Emitteo| •Terminada•
FanfictionHola, soy Emilia. Esta es una historia de... ¿Amor? ¿Puede ser esto amor? Claro, pero... amor prohibido, o solamente miedo a amar a alguien incorrecto, ¿incorrecto alguien? ¿O lo que los demás puedan decir de ti? Por el simple hecho de querer estar...