CAP.4 Hola de nuevo

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—Lo sabía— dijo cuando me vio, con una sonrisa en su rostro, era Matteo, era la hora de comenzar mi plan.

—¿Qué cosa?— respondí a lo que me dijo después de chocar.

—Soy irresistible para todas las chicas, incluyendo a las Sliders—, estaba claro que todavía no sabía qué ya no soy Slider y ahora vienen los Red Sharks a destruirlos.

—A ver ¿Te pegaste o algo en la competencia? Por qué si estás muy mal Matteito— dije con un tono de enojo y una sonrisa pícara al final.

—¿Me vas a decir que no te mueres por mí?— Dijo Matteo, soñando totalmente egocéntrico.

—No eres el último hombre en el mundo eh Matteo, a parte ¿Qué va a pensar tu noviecita de esto?— le dije a Matteo, en seguida puso una cara de sorprendido, sorprendido... ¿Por qué se que tiene novia? ¿Por qué no babeo por él? O... ¿una combinación de amabas?

—¿Cómo sabes que tengo novia?— dijo Matteo, respondiendo a todas mis preguntas, creía que yo pensaba que era un soltero disponible para mí.

—¿Te olvidas de que existe internet y Jazmín?— Le dije poniendo una excusa de cómo supe que tenía novia.

—Bueno si, Luna en mi novia— No lo dijo tan contento, como si no le hiciera feliz ser novio de Luna, así que me acerqué a él con una sonrisa en el rostro diciendo.

—Pero eso Matteo, a mí no me importa— Me hice a un lado y salí de los lockers, sin poder ver la cara que hizo al escuchar lo que le dije...

Salí rápidamente de ahí y me encontré con alguien más... Luna Valente, la chiquita que pronto se quedará soltera

—¿Tú qué haces aquí?— Me dijo Luna en cuanto me vio, con una cara de confundida ¿Tendrá siempre esa cara? Por que eso parece.

—Vine a entrenar a mi nueva pista— y en cuanto lo dije eso hizo una cara todavía más insoportable a la anterior.

—¿Entonces que hacer en el Roller?— Preguntó Luna, dándome a entender lo inocente y tonta que es.

—¿En serio pueden haber gente tan tonta?, esta es mi pista ahora— En cuanto le dije eso se puso tan pálida como un fantasma al escuchar mis palabras como si le hubiera dado la peor noticia del mundo, empezó la Tercera Guerra Mundial, murió tu perro, se va a morir toda la humanidad, el mundo se va a acabar, pero solo dije que el Roller ahora sería de mi equipo y se puso taaan mal, wow, insoportable esta chica.

—Emilia, ¿Qué estás diciendo?— wow Luna Valente sabía mi nombre, así que le respondí.

—Lo que intento decirte Lunita, es que el Roller se acabó, ahora es de los Red Sharks— y después de eso me fui por qué ya no soportaba seguir hablando con ella.

Narra Matteo
Emilia tiene algo que me hace querer ir a hablar con ella, es como si yo fuera metal y ella un imán que me atrae, la primera vez que la vi fue probando la pista en Cancún, se veía totalmente decidida a ganar y cuando me vió antes de poder reaccionar a cualquier cosa Luna llegó, así que le hablé después y empecé a dudar sobre mi relación con Luna, ¿Es ella a quien quiero realmente?...
Y al encontrarme a Emilia en los lockers sentí algo pequeño, muy pequeño dentro de mí, muy parecido a cuando choqué con Luna, pero la frase que me dijo al final, me dejó pensando muchas cosas

En cuanto Emilia salió, al poco tiempo llegó Luna, con una cara de que le habían dado la peor noticia del mundo, le pregunté qué pasaba y me contó todo, en seguida fui en busca de Emilia, por lo des equipo y tal vez por algo más...

Narra Emilia
Sentía una gran satisfacción al ver la cara de Lunita cuando le dije lo de la pista y el equipo y ver lo fácil que será todo esto, por qué Matteo va a ser mío y por lo menos ya no va a estar con alguien que sea tan insoportable, le estaría haciendo un gran favor a Matteo de hecho, y ahí estaba yo tan inmersa en mis pensamientos en las mesas cuando decidí irme de la pista, por qué ya no tenía mucho que hacer ahí y mientras caminaba regresé a mi antiguos pensamientos, a mi plan y cómo iba a comenzarlo, pensando en Matteo su hermoso cabello o sus ojos cuando de pronto por sorpresa llegó justo en quien pensaba...Matteo, antes de dejarlo hablar empecé la conversación.

—Ya hasta parece que me estás siguiendo Matteito— dije con una gran sonrisa en la cara.

—Uh, creo que alguien ha descubierto mi plan— No lo reconocí, sonó totalmente diferente a las veces anteriores en las que habíamos hablado, ¿Será por qué no hay nadie que pueda escucharnos?.

—Para mi que aquí no soy yo la que se muere por ti, ¿No serás tú el que se muere por mí?— Dije con un tono de seguridad y arqueando un poco la ceja, de inmediato sonrío al terminar mi frase, su sonrisa que mata...

—No sé, tal vez, quizá pudiera ser por qué hay algo en ti que no me deja estar en paz— dijo Matteo con una sonrisa que parecía tan sincera

—Que estás diciendo Matteo, tienes novia, digo si es que se te estaba olvidando— Dije aún que no quería hacerlo, por qué arruinaría todo mi plan enamorarme de él, me cambiaría totalmente estar enamorada de él, de inmediato quito la sonrisa, pero a los pocos segundos le volvió diciendo

—Creí que eso no te importaba—sorprendentemente lo recordó.

—Tienes razón, no me importa en lo más mínimo que termines con ella, pero es muy diferente ser la otra, por qué eso no va a ocurrir— Dije con un tono de enojo, para después irme de su lado y seguir su camino.

¿Cuándo pasó esto? |Emitteo| •Terminada•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora