capíтυlo cυarenтa y ѕeιѕ

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- Es una larga historia - dijo sentándose en el asiento del conductor. Me senté en el del copiloto y Zoe en uno de los asientos de atrás.

- Bueno, tenemos tiempo para oírla - contesté. De veras que tenía mucha curiosidad por saber cómo lo había conseguido y qué había hecho.

- Eso, eso - alentó Zoe desde atrás.

- No tengo ganas de hablar ahora, ya os lo contaré, ¿vale? - murmuró un poco borde. Decidí no hablar más del tema, pues se veía un poco tenso y cansado.

•••

Finalmente llegamos de nuevo a casa y me despedí de Zoe. Me dijo que no podría quedar al día siguiente porque tendría que ir a comprar los materiales para empezar el nuevo curso la semana que viene y eso me hizo recordar a que yo también necesitaba ir de compras, así que quedamos para ir juntas a comprar material escolar.

Me fui con Gazzy a su casa y nada más entrar, me vino un fuerte olor a lejía.

- Vaya, ¿habéis estado limpiando a fondo la casa? - me miró asustado.

- Eh... sí, bueno no. Es que... - se rascó la cabeza como intentando responder algo a lo que no tenía respuesta.

- ¿Vamos mejor a mi casa? Allí no huele a lejía - le cogí del brazo y caminamos hacia la puerta. Solo intentaba que se sintiera más cómodo.

- No, espera Ari - me hizo parar antes de llegar afuera.

- Mereces una explicación - le miré a los ojos y noté cómo tragaba saliva.

Me dijo que estaría mejor sentada para explicarme todo, así que ambos nos sentamos en el sofá.

- Esa mujer, Leire, está loca - comenzó y yo lo miré confundida.

•••

Cuando terminó de contarme toda la historia, me quedé helada y sin palabras.

- ¿Estás bien? - acarició mi brazo al ver mi cara de shock.

- Sí, bueno, todo lo bien que se pueda estar al escuchar toda esa historia. No me esperaba eso de Leire - suspiré.

- Oye pero... ¿no se dará cuenta alguien de la desaparición de Matt? - pregunté al darme cuenta. Él me miró con miedo y negó con la cabeza.

- No, eso es problema de ella, era su marido - dijo con seguridad y yo sonreí débilmente.

- Bueno, dejemos de hablar de esto y vayamos a ver una peli en tu cuarto - me levanté del sofá y agarré su brazo para ayudarle a levantarse.

•••

Estábamos viendo "Election: La noche de las bestias" cuando me vibró el teléfono, dejándome saber que me había llegado un nuevo mensaje.

"No me ignores, Ari. Sé que sabes bien quién soy. Me besaste con mucha pasión aquel día 😏"

Era del mismo número desconocido que no tenía aún agregado.

- Voy al baño un momento - me levanté de la cama.

- Vale, aquí te espero - contestó con voz de niño pequeño, lo que me pareció súper tierno.

Una vez en el baño, le dí al mensaje para abrir la conversación. No sabía qué iba a contestar, pero ya se me ocurrirá algo.

"Seas quién seas, déjame en paz, gilipollas 😠"

Envié aquello y me puse a pensar en quién podía ser mientras esperaba una respuesta.

"No te hagas la tonta, Ari. Solo te diré que sé que te gustó ese beso y que ansías más, no te mientas a ti misma 😉"

¿Pero qué...? ¿Quién se cree para decirme lo que cree que quiero o ansío? Pedazo de subnormal...

En ese momento se me vino a la cabeza la única persona que podría ser.

"No me dejes en visto 😍"

Lo bloqueé y borré la conversación para después salir del baño y volver con mi querido novio Gazzy.

La película terminó y como ya era bastante tarde, nos quedamos dormidos en su cama, hasta que mi móvil volvió a vibrar, despertándome. Era una llamada de un número oculto, y aprovechando que Gazzy seguía durmiendo y no se había dado cuenta, salí sigilosamente de la cama y me fui de nuevo al baño.

- Déjame en paz - no oí más que una risa maquiavélica a través del teléfono.

- En serio, te voy a denunciar - amenacé y de nuevo aquella risa volvió a sonar exactamente como lo hizo antes. Parecía una grabación, pues ni parecía una risa de una persona normal.

- ¿Es una broma? Porque son las putas 5 de la mañana y no tengo ganas de estas tonterías - me dí cuenta que soné un poco como una madre enfadada e instintivamente acaricié mi vientre.

- Dí mi nombre - escuché una voz editada con un cambiador de voz, a lo que rodé los ojos.

- Sé perfectamente quién eres, gilipollas - contesté sin estar al 100% segura de quién era.

- Dí mi nombre - volvió a insistir y solté un gran suspiro.

No entendía para qué mierda quería que dijera su nombre. No sé qué pasaría después ni para qué serviría pero tras unos segundos, decidí contestar para avanzar en la conversación.

- Justin.

Lil Pump, mi vecino(?) [TERMINADA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora