Llegó mi planchita para el pelo. No me la compré por ti ¿o sí?
*** –Me gusta que el cabello sea bien definido. Liso o muy ondulado.
–El mío es bipolar.
–No me gusta. ***
Siempre quise una plancha para el cabello, lo cierto es que me decidí a comprarla luego de esa conversación. Odio eso de mí, siempre quiero hacer todo para encajar, para agradar y por fuera doy el mensaje de que hago lo que quiero. Soy una contradicción, doy mensajes equivocados todo el tiempo, pero eso nadie lo sabe, nadie a parte de ti.
Nunca entendí porque no estabas loco por mí, tengo todo para hacerte perder la cordura y sin embargo, pasé por ti sin relevancia alguna. Me repito todo el tiempo que no es culpa mía, pero mantener en alto mi autoestima contigo era una constante lucha.
En cambio yo... rayos, cuanto odio esto. Yo, ya una mujer adulta, madura, independiente... perder la cabeza por un niño como tú. Siempre he sido así, poco convencional, extrema, trágica, pero tú has sido lo más inesperado de mi vida, no estaba preparada y caí directo en la trampa.
ESTÁS LEYENDO
Día 100
RandomEsto no es una novela, tampoco es ficción. Esto son solo palabras de una chica que ama locamente a un chico y no sabe cómo vivir sin él... Corrección, no quiere vivir sin él. Sí, esa chica soy yo.
