Capitulo 31

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Taylor iba de vuelta a casa cuando vio a Camila caminando por la acera, le extraño demasiado, ya que ella jamás estaba lejos de Lauren, pero cuando vio la maleta, creyó saber que era lo que pasaba, osea que, seguramente su hermana se había dado cuenta de la clase de mujer que era, así que siguió sin darme mayor importancia. Al llegar a la casa se dirigió al despacho de Lauren y entro sin tocar, su sorpresa fue muy grande al ver a su hermana sentada frente al escritorio con un vaso de coñac en la mano y con los ojos totalmente hinchados.

- ¿Qué te paso? -preguntó rápidamente.

-Tenias razón de Camila. -sollozó - ella solo buscaba mi dinero. -Dijo y tomó un trago del vaso que sostenía. -Me pidió el divorcio.

- Se que te dolerá, hermana, pero es lo mejor.

- No le daré el divorcio, no permitiré que se case con otra persona -le pegó un golpe a la mesa con la palma abierta. - Ella es mía, y prefiero verla muerta antes de verla con otra persona.

Taylor se sorprendió de la reacción de su hermana, jamás la había visto de ese modo.

-Pero ahora lo único que me interesa es mi hija. -dijo para terminar Lauren.

- A eso venia,hermana. La persona que le ayudara a Emma esta lista, y Emma también, así que en 20 minutos comienzan a operar.

Lauren estaba algo borracha, pero o podía permanecer en pie y mantener la cabeza fría, pero sus movimientos eran algo torpes, aunque eso no le importo y así se fueron al hospital.

—— Camila——
Me encontraba caminando sin saber exactamente en donde estaba, me había perdido, y estaba asustada. Mi celular no tenia crédito, así me senté en un pequeño parque que encontré y ¡oh! genial, para colmo comenzó a llover, pero ¿qué  mas podía a hacer? Lleve mi cara hasta mi piernas y comencé a llorar mientras la lluvia caía sobre mi cabello sin parar, y para este momento, mi maleta estaba ya por completo empapada.

-¿Que te sucede hija? - escuché que preguntó un anciano cubriéndome con su paraguas.

-Estoy pérdida. -respondí casi sin voz.

-¿Puedo ayudarte en algo?

- ¿Podría prestarme su celular?

-Es penoso, hija, pero no tengo, no se usarlo. -dijo con una pequeña risa contagiosa. -Pero cuento con transporte, tal vez podría llevarte a algún lado en mi taxi.

-Se lo agradezco, pero en este no tengo dinero para pagarle.

-¿Quien dijo que voy a cobrarte? -levante mi mirada para ver la cara de aquel amable señor, y me dió mucha más confianza.

-Se lo agradecería mucho. - le sonreí -Se la dirección, pero no tengo ni idea de en donde estoy.

-Hay que apurarnos, porque ya esta empezando a oscurecer. -el hombre me condujo hasta su taxi, y me ayudo con mi pequeña maleta, apenas terminó se subió al coche. -Esto es malo para tu bebe.

-¿Disculpe? -pregunte confundida, ya que según yo, el embarazo no se me notaba, y era verdad. ¿cómo se había dado cuenta?

-Tu mirada tiene ese brillo especial que todas las madres tienen. - me sonrió- Entonces, ¿cuál es nuestro destino? -le di la dirección, y el sin objetar me llevo, el único comentario que hizo fue -pero muchacha, si no he llegado yo ¿en dónde has de pasar la noche?- en la calle, pensé, pero no dije nada.

Llegamos a casa de Dinah, y le agradecí al hombre por haberme traído.

-Si algún día necesita algo, y yo puedo ayudarlo, por favor, no dude en decirme. -le di mi número de celular y el numero de apartamento de Dinah. Era lo mínimo que podía hacer.

-Espero que se solucionen tus problemas, hija. -se subió al auto y arranco. Yo me apresure a entrar en el edificio, subí el elevador hasta llegar en el piso en el que estaba el departamento de mi amiga, toque el timbre, y de inmediato respondió.

-¿Quién es?

-Soy Camila. -y ella abrió sin dudar.

- Pero, ¿qué te ha pasado? -no pude responder, así que solo me abrasé de ella, rompiendo en llanto. Me hizo pasar, me dio una frazada para cubrirme y un cambio de ropa, ya que yo estaba temblando de frio. Cuando termine de cambiarme me senté con ella en el sillón de su sala. -por favor, Camila, dime que te paso.

-Le pedí el divorcio a Lauren. -dije volviendo a sollozar.

-¿Qué? Pero si tu la amas, amiga.

-Por eso lo hice Dinah, para que ella sea feliz. -le conté mis motivos y todo lo que había pasado, me regaño y me dijo que era una tonta, pero lo hizo con cariño, pero aun así me sentí horrible.

-Tú sabes que te apoyo en cualquier cosa, pero debiste decirle la verdad a Lauren.

-No, claro que no debe saberlo.

-¡Taylor esta por venir! ¿hay algún problema si te ve aquí?

-Claro que si, Dinah, si me ve por aquí no dudará en decirle a Lauren.

-Mira, haremos esto. Tú te escondes en mi habitación, y yo lo mantengo aquí en la sala, ¿está bien?

-Muchísimas gracias Dinah. -fue lo único que pude decir.

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Nuevo capítulo a los 150 votos.

Casada con una extraña -Camren G!P-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora