Stone Cold

Capítulo 11

Antes de que empiecen a leer recuerden seguirme en mi Instagram como "Stefanycastrodilone" así podrían hablarme si tienen alguna duda y podrían conocerme mejor si así desean.

Sin más los dejo con el siguiente capítulo.

Era momento para mi conversación con Sebastian, el cual me estuvo evitando esta semana. A él le tocaba quedarse conmigo este día mientras Caspian trabajaba, y para mi era el momento de hablar. Le pasé una taza con café y Leche, me senté con las piernas cruzadas en la silla y lo miré.

-¿Cómo te sientes?-le pregunto para darle un sorbo a mi café.

Se encoje de hombros.

-Quiero que estés relajado, Seb.

-Lo estoy tratando.-dice y me mira con sus ojos marrones. Traga saliva.

-¿Quieres hablar de esto?-él asiente.

-Quiero desahogarme.-susurra.

Lo miré con compasión, tomé una de sus manos que estaban tibias. Él sonrió.

-Cuéntame cuando te diste cuenta.-le digo.

-Yo...siempre lo supe. Desde pequeño. Me di cuenta que me atraían otros niños. La primera vez cuando jugué con un niño en casa de unos amigos de mis padres. Luego a medida que iba creciendo me di cuenta que no me atraían las niñas, porque siempre me había gustado un chico...y ese chico era Mateo.-dice y le sonreí. Sus ojos se llenaron de lágrimas.-Y nunca he dicho nada porque tengo miedo.-lo abracé.-Sé que Caspian se va a enojar si se entera. Y tengo miedo de que me rechacen todos.

Mis ojos se llenaron de lágrimas. Lo besé en la frente.

-Oh, Sebastian. Sabes que no es cierto. Yo te acepto tal y como eres.-lo miré.-Ya no llores, ¿okay? Todo estará bien. Más bien, me alegra el que confíes en mi para decirme. Caspian es un idiota que algún día lo comprenderá, tu madre y tu padre también.

-Si, pero...aún no estoy listo para decirles.-me dice y asiento.

-Entonces será nuestro pequeño secreto.-le digo y él sonríe.-Así me gusta, sonriente como siempre.

-Eres la mejor, Alis.

-Ouuu, lo sé.-ambos reímos y terminamos nuestros cafés. Charlamos sobre todo, sobre Mateo, sobre lo que sentíamos y algún que otro chisme de famosos, etcétera.
Cuando apenas eran las 5 de la tarde me llegó una llamada para empezar con un trabajo, en la mejor floristería de la ciudad. El sueldo era aceptable, pero no sabia si los chicos me permitirían ir a trabajar después de lo que pasó.  Ni siquiera quieren dejarme sola o salir sola, aún así acepte la gran oportunidad que me estaban dando y en dos días empezaría a trabajar.
Sebastian estaba muy ocupado hablando con Mateo por el teléfono y yo estaba aburrida, así que decidí ir a visitar a Dalton. ¿Sería una buena idea?

Aunque aveces Dalton actuaba como un idiota, no sentía miedo estando con él. Incluso sabiendo lo que es, y quiero que me aclare como demonios todos saben lo que es y porque razón no querían  que yo lo supiera. No quería preguntarles a Caspian o a Sebastian para no meter a Dalton en ningún problema y así ellos eviten que él me ayude con el asesino de mis padres.
Fui al cuarto y me recogí el cabello en un moño desordenado, me puse una sudadera y unos zapatos bajos. Fui a la cocina, tomé un paquete de galletas y helado de la nevera.
Salí sin que Sebas se diera cuenta y fui directamente al departamento de Dalton.