Capítulo 16

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Sebastian narra:

Cuando estamos juntos es como si el mundo se detuviera. Solo somos él y yo. Sin reglas, sin tener que hacer lo correcto, sin tener que ser alguien que no soy y ser yo mismo. Cuando sonríe siento mi corazón latir fuerte, tanto que creo que podría romper mis costillas. Cuando sus ojos color oliva me miran, es como si brillaran y me llamaran a probar lo desconocido.
Lo amaba, eso era más que cierto. Solo su manera de ver el mundo y de pensar hacían que sintiera una fascinación insaciable de él, como un ciego al ver la luz por primera vez, o un sordo al escuchar la voz dulce y cantarina de su madre.

Estamos juntos en su cuarto, mirando el techo sobre la cama. De vez en cuando haciendo un comentario sobre cualquier cosa, cualquier pensamiento que nos pase por la cabeza. Lo miré y él a mi.

Sonreímos.

-¿Tu hermana está enojada?-pregunta con voz ronca y yo tomo su mano.

-Más bien, muerta de vergüenza por verte casi desnudo.-digo y empiezo a reír al ver sus mejillas rojas.

-Me dijiste que no iría temprano a la casa.-dice apartando la mirada.

-Me equivoqué.-le digo como si nada y su cabeza se pone en mi hombro, le doy un beso en la coronilla.
Siento unas gotas caer sobre mi jersey y hago que me mire, puedo ver las lágrimas salir de sus ojos.

-Debería hablar con mi padre sobre esto.-dice y yo le doy un beso lento en los labios.

-Pronto llegará el día en el que le hablemos de esto a nuestras familias.-le digo y él me mira con sus ojos llenos de esperanza.-Te prometo, que voy a planificar la cena para decirles, ¿si?

Él sonríe formándose dos hoyuelos en sus mejillas.

-Eso me hace sentir mejor.-susurra y yo le abrazo.

-Lo sé...

Pero no sabia si era lo suficientemente fuerte y valiente para confesar a mi familia que estoy enamorado...y más de un chico.










Alisa narra

Estaba algo nerviosa por la cita que tendría con Saylas, tanto que le pedí ayuda a Hollie para arreglarme y buscar la ropa indicada para esta noche. Necesitaba distraerme, el pensar en qué en una semana iniciaría la universidad me ponía aun más estresada y debía prepararme mentalmente para hablar con Dakota sobre el contenido de la carta que mis padres dejaron, ella tiene mucho que explicarme.

-Te vez hermosa.-mi amiga dice sonriendo y yo me miro en el espejo.

-Gracias,hiciste un buen trabajo.-digo y luego la miro.-Estoy nerviosa.

-Alisa Becker, nerviosa.-dice y empieza a reír. -Jamás creí poder escuchar esas dos palabras en una oración, nunca te había visto tan nerviosa, es solo una cita.

Tenía razón era solo una cita, una cita la cual no le agradaba mucho a Dalton. Siento que él no confía en Saylas y debo encontrar la manera en que ellos me hagan contactar a su reina. Esto se trata de algo que he esperado hace mucho tiempo y que no puedo desaprovechar esta oportunidad.  Salimos a la sala y nos tomamos unas fotos, a los 5 minutos escuchamos la puerta delantera y supe que era Saylas. Cuando abrí su olor llegó a mis fosas nasales y sonreí, estaba bastante guapo. Aunque siempre lo está.

-Alisa, bellísima como siempre.-dice sonriendo y me toma de la mano con gentileza.

-Muchas gracias.-digo mientras voy saliendo del departamento, bajamos al estacionamiento y  cuando subimos a su auto me miró.

-No quiero incomodarte, pero creo que a Dalton no le agrado mucho el hecho de que salieras conmigo.-dijo mientras ponía el auto en marcha.

-El a veces se comporta de una manera muy rara.

-Debe tener sus razones, ¿no?

Me encojo de hombros y lo miro.

-Dalton, es diferente...y no por el hecho de ser lo que es, más bien porque a pesar de no conocerme bien decidió ayudarme para vengar a mis padres.-digo y Saylas sonríe.

-Me gustaría ayudarte. Pero tener una reunión con la reina es muy difícil, nunca recibimos las órdenes de ella personalmente. Siempre es a través de alguien.

Lo miro.

-O sea que no hablan con ella personalmente.-afirmó y Saylas asiente.-¿Sabes quien tiene contacto con ella personalmente?

-Son muy pocas las personas que tienen contacto con ella. Pero según sé, Draco si tuvo contacto con ella recientemente.

Maldita sea.

-Eso significa que es muy poco probable que salgamos con vida si intervenimos en una orden que fue a través de ella personalmente.-Saylas vuelve asentir y pongo dos dedos en mi barbilla.-Si tan solo supiéramos que está cazando para ella.

-Olvidemos el tema por esta noche. Quiero que cenemos y hablemos de otra cosa.-dice y yo le miro con las mejillas encendidas.

-De acuerdo.

Llegamos a un restaurante bastante elegante, el cual Saylas tenía una reservación. Cuando nos sentamos en la mesa no dude en preguntarle sobre su vida, el era algo reservado pero al menos logré sacarle algo de información.  En donde nació, quienes fueron sus padre y donde pasó su infancia. Aunque casi no se acuerda de nada.

-Se que iniciarás la universidad.-me dice.

-Así es, estudiaré derecho.

-Buena elección.

-Gracias.

En ese momento suena una llamada en mi teléfono y me disculpo con Saylas, iba a apagarlo pero al ver el nombre de Dalton decidí contestar.

-¿Hola?

-Mañana necesito que vayas a mi departamento, te presentaré a un par de personas. Y te hablaré de un baile en el cual podríamos contactar a la reina.-al escuchar lo que dijo abrí grande mis ojos.

-¿Un baile? ¿A quienes me presentarás?-pregunto asombrada y a la vez emocionada.

-Ya sabrás mañana, y por favor trae a tu nuevo noviecito. Te espero máximo a las 9:30 a.m-dice con voz dura.

-De acuerdo, gracias Dalton.-digo y él corta la llamada. Miro a Saylas.-Oíste eso, ¿no es así?

-Perfectamente, Alisa.-responde sin expresión en su rostro y yo sonreí.

Ahora se como contactaré a la reina.





Perdón por desaparecer mis lectores!!!

¡Feliz navidad atrasado! Ajjajajaja

Los quiero mucho, voten, compartan y comenten.

Viene algo grande.

~Thenmy~❤️

Stone ColdDonde viven las historias. Descúbrelo ahora