-¿Qué haces aquí? – Preguntó ella enojada al ver que su ex novio había llegado al mismo lugar que ella.
-Es un lugar público. – Inoo se mostraba indiferente.
-¿Y?
-Si no te gusta verme... vete tú.
Dos semanas atrás esa pareja habían terminado, ambos chicos no soportaron la presión que tenían al estar juntos y a pesar de que muy en el fondo se arrepentían un poco por haberse dejado, ninguno estaba dispuesto a dar su brazo a torcer y buscar al otro, muchos lo llamaban orgullo, ellos... miedo a ser rechazados.
-Eso no es de caballeros... - Gritó Nayumi al ver que Inoo se iba de largo.
-¿Y quién dijo que yo era uno? – Inoo se regresó y la encaró.
-Lo eras...- Nayumi se puso nerviosa.
-¿Si? ¿Cuándo? Yo no me acuerdo... - Ese Inoo no era el que ella había conocido.
-Tú no eres quien yo conocía...
-Ni tu eres la mujer de la que yo me enamoré ¿Y? no te estoy reclamando ¿o sí?
-Idiota...
-No más que tú. – Inoo parecía dolido.
-Veo que nunca me quisiste como tanto decías.
-Ni tú me querías a mí.
-Yo te quiero...
-Mentirosa.
-¡No es mentira!
-¡Lo es!
-¡Que no!
-Si me hubieses querido, no habrías dejado que nuestra relación terminara.
-Pero yo no fui...
-¿No?
-Hemos sido los dos...
-¿Quién dice?
-Yo lo digo... te he querido siempre, aún te quiero, como sé que tú me querías y aún me quieres...
Inoo dejó a un lado su miedo, tomó a Nayumi en sus brazos y le planto un beso, un largo y apasionado beso.