Tentar a la inocencia. [EUNHAE]

25."Opresión"

Sintiendo una gran opresión en el pecho fue bajando las escaleras.
Tenía ganas de regresar al apartamento e insultar al mayor, pero sabía que eso sólo dañaría más a si mismo que al otro. No podía regresar, no en ese momento y era algo innegociable.

Pasó a paso sentía como se quedaba sin energía, como sus piernas empezaban a temblar. Empezó a sentir que todo daba vueltas. Se apoyó contra la fría baranda de metal, su único apoyo y empezó a bajar con más lentitud. Lo único que le faltaba para arruinar por completo su día era caerse de las escaleras.

Siwon quien aún se encontraba al lado del auto esperando algún rastro de su amigo, decidió subir a buscarlo. Temiendo que algo le hubiera sucedido o que alguien le privara de reunirse con él.

Estaba por tomarse el ascensor cuando percibió una falla técnica haciéndola inútil. Regresando hacia atrás, para ir por las escaleras lo vió. El corazón se le oprimió.

Mecánicamente se frotó los ojos como si fuera que con eso iba a cambiar lo que veía.

Rápidamente se acercó hacia él y lo cargó en sus brazos haciendo caso omiso a las protestas y los "Siwi yo puedo" Siwon al verlo apenas poder sostenerse de las barandas junto con la palidez que reflejaba en su rostro, no dudó en cargarlo y llevarlo al auto.

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Estaba recostado sobre una cama cuando escuchó el sonido de voces hablando. Eran dos personas.

-Está débil debido a que no ha comido apropiadamente en bastante tiempo. Le dejaré una receta con algunas vitaminas para su mejora, pero ahora mismo lo fundamental es que se alimente bien. Así que adjuntaré un teléfono de una conocida nutricionista.

Con esfuerzo logró abrir los ojos e identificar a las personas que hablaban prácticamente delante de él.

Uno era Siwon, Donghae lo reconoció rápidamente... Y el otro -Se quedó observándolo pero nada le llamó la atención. Era una persona de más de cuarenta años con un guardapolvo blanco y que tenía un estetoscopio rodeando el cuello. Un doctor.

Quiso decir algo, pero se sentía tan cansado que sólo volvió a cerrar los ojos.

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Nuevamente empezó a escuchar unos susurros, era una mujer.
Con facilidad pudo abrir los ojos y pudo observar a una mujer mayor con traje de sirvienta sosteniéndo una bandeja.

-Hola -dijo aún acostado -¿Quién eres?

-Soy Rosé, la nueva empleada hasta que mi prima Jisoo se recupere.

El nombre de Jisoo se le hizo familiar. -Hola Rosé, yo soy Donghae -. Sentándose la observó mejor y aprovechó para ver dónde se encontraba ya que esa no era la habitación en la que estuvo meses atrás.

-Joven Donghae está usted en la habitación del señor Siwon -Dijo como si pudiera leer la mente.

Donghae iba a decir algo al respecto cuando vio entrar a Siwon.

-Veo que ya estás despierto Hae.

-Siwii

-Te puedes retirar Rosé, yo me encargo de hacerlo comer -dijo quitándole la bandeja.

Rosé asintió y dándole una sonrisa al menor se fue. Era increíble pero con tan sólo haberlo conocido hace unos minutos le agradó mucho. Le hacía recordar al joven de otra casa en la que ella trabajaba. La sonrisa que tenía se le cayó al recordar que el jovencito discutió con la madre y se fue de casa. Esa era la razón por la cual ahora tenía más tiempo disponible para trabajar. En esa casa sólo vivían dos personas, pero ahora que no estaba el joven sumado a que la madre se la pasaba más tiempo en el trabajo, no había nada que hacer.