Belleza inmortal: Rey De Los Asesinos

Nos encontraremos... mi querida esposa

Dentro de la casa de subastas el "Pabellón del bambú" Wang Hua, quien se había disfrazado de hombre, terminaba de hacer los negocios necesario con el tendero...

Honestamente Wang Hua estaba muy agradecida con el tendero de la casa de subastas...

¿Se preguntan por qué?

¡Fácil!

Cuando Wang Hua estuvo entrenando dentro del bosque de los espejos, por recomendación del señor libro tuvo que entrar en un lugar llamado "El valle de las bestias" en el cual, literalmente, casi muere.

Pero ahí no se encontraba el problema...

¡Todo fue culpa del libro estafador!

El señor libro no le dijo que... ¡Las bestias espirituales que se convirtieron en el guiso de Wang Hua eran realmente bestias demoníacas!

¿Cuál es la diferencia entre una bestia demoniaca y una bestia espiritual?

¡Muy simple!

Si una bestia espiritual te mata, lógicamente morirás dentro de su estómago...

Pero si eres asesinado por una bestia demoniaca... ¡Puedes olvidarte no solo de tu cuerpo sino también de tu alma!

¡Nunca más volverías a renacer!

Eso sin mencionar que una bestia demoniaca, incluso si es de bajo nivel ¡Tiene un muy alto precio! Mayormente sería difícil encontrarse con una, incluso dentro del valle de las bestias, ya que las bestias demoníacas solo atacarían a humanos con una fuerte energía dentro de sus almas... Y como Wang Hua tiene dos almas dentro de su cuerpo, supongo que ya se harán una idea.

... Incluso parece mentira que Wang Hua se las haya comido...

Si no fuese por el comentario del tendero, ella nunca se hubiese enterado.

En fin...

Después de una ajetreada tarde, Wang Hua paseó por toda la capital, dentro de algunos días volvería a la casa de subastas para recoger el dinero de sus objetos. Pero parece que no le fue muy bien al señor libro, ya que Wang Hua lo ignoró casi todo el tiempo. Se pasaron el día entrando a herrerías y disfrutando la vida en los restaurantes...

Ah, olvidé mencionarlo, la familia del general Wang es condenadamente rica.

Y así Wang Hua se divirtió derrochando dinero hasta que llegó el momento de volver a casa.

El tiempo pasó con rapidez, el sol se ocultó detrás del horizonte y la oscuridad de la noche cubrió todos los cielos... Junto a una lúgubre luna teñida por el color de la sangre.

..........

Esa noche era terriblemente fría y tan silenciosa como un panteón, el viento movía las hojas secas que caían de los árboles, e incluso la luna, que debería ser tan hermosa como fuera posible, esta noche parecía tan aterradora bañada en un peculiar color rojo.

En un pequeño claro dentro del bosque de los espejos, se podían escuchar los desgarradores llantos de los niños que eran azotados una y otra vez por personas, que al parecer, eran traficantes de esclavos.

Todos los niños, ya fueran hombres o mujeres parecían tener aproximadamente de 4 a 7 años de edad, vestían harapos y en su cuerpo tenían marcas de haber sido golpeados cruelmente por un látigo.

De pronto, un hombre alto y robusto con una horrible cicatriz en la cara, arrastraba a un pequeño niño.... Con una apariencia un tanto especial.

"¡Miren lo que encontré! Nos darán mucho por un mocoso como este" Dijo el hombre de la cicatriz mientras lanzaba al pequeño al piso.