Cuando escuchó esas palabras, el alma de Wang Hua abandonó su cuerpo, literalmente se sintió petrificada.
Viendo la cara pálida de su pequeña hermanita, Wang Bai sonrió dulcemente. Luego, caminó hacia la arena y abandonó el campo de batalla como si fuera la cosa más fácil y natural del mundo.
La audiencia aún seguía en estado de shock por lo sucedido, incluso Wang Yan no sabía cómo reaccionar.
Wang Bai hizo caso omiso a las miradas curiosas, se sentó en una de las sillas junto a su gemelo mayor y volvió a su típica cara de poker.
El animador se recuperó después de algún tiempo y aunque no lograba entender la situación, anunció a Wang Hua como la ganadora.
Muy pronto, todos se olvidaron de lo sucedido, la batalla en el campo continuó con normalidad, en todo el estadio se escuchaban los gritos y los aplausos de la gente.
El príncipe heredero hizo un gran trabajo, derrotó de manera limpia y rápida a su oponente. A diferencia de otros competidores arrogantes, Nangong Yilan se inclinó en muestra de respeto hacia su rival y le tendió la mano para ayudarlo a pararse. En todo el transcurso, la media sonrisa en su rostro no había desaparecido.
El segundo príncipe, Nangong Yu Lan, mejor conocido como el príncipe de hielo, tampoco se quedó atrás. Aunque su rostro continuaba siendo frío como la escarcha, se aseguró de mantener una batalla justa y terminar su combate sin dar ni recibir muchos daños.
Después de unas cuantas horas, el animador anunció el comienzo de la tercera y última ronda, en la que todos los finalistas tendrían que enfrentarse en una última batalla para anunciar al campeón definitivo. Para esto, el consejo administrativo del estadio, les dió a todos los participantes una píldora de recuperación, ya que después de tantas peleas, los jóvenes deberían estar muy cansados. Como su nombre lo indicaba, la píldora de recuperación servía únicamente para restaurar la energía perdida en algún enfrentamiento, algo realmente útil en esta clase de situación.
Después de que las píldoras hayan hecho efecto, el animador dió inició a la tercera ronda.
Wang Hua, quien estaba sentada junto a los demás participantes, tenía el ceño fruncido mientras observaba a los siguientes competidores que comenzarían con la primera batalla.
El segundo príncipe, Nangong Yu Lan, se enfrentaría a su primer hermano, Wang Yan...
¿A quién se supone que deba apoyar ella?
Mientras Wang Hua pensaba en eso, en el campo de batalla, los dos jóvenes ya se habían dado la mano y comenzado con los ataques.
El estilo de pelea del segundo príncipe fue elegante y sincronizado, cada uno de sus movimientos eran hermosos como los pasos de alguna danza. Aunque su especialidad era el manejo del elemento hielo, sabía perfectamente que un mago como él estaba en desventaja contra un guerrero como Wang Bai, así que no le quedó de otra más que ir a la ofensiva y usar su cuerpo como arma y escudo, ya que al ser un príncipe de la familia real, su talento en las artes marciales era muy sobresaliente.
Por otro lado, el estilo de batalla de Wang Yan, sólo podía describirse con una palabra: Salvaje. Si, salvaje, porque todos sus movimientos eran feroces como los de una bestia fuera de control, la mayoría de sus ataques eran inesperados y siempre venían a modo de sorpresa. Al ser el nieto del general Wang, sus artes marciales estaban a un sólo centímetro de alcanzar la cúspide, pero lo más sorprendente era que por más que lanzara una ola de golpes tras otra, su cuerpo no parecía cansarse en lo absoluto, todo lo contrario, sus ataques eran cada vez más agresivos.
Ambos estuvieron chocando golpes por más de quince minutos, ninguno quería retroceder y dejarse ganar por su contrincante. Finalmente, cuando faltaban sólo unos segundos para que el tiempo del encuentro terminara, ambos, el príncipe de hielo y el primer nieto del general, cayeron al suelo al mismo tiempo, el esfuerzo les había costado casi toda sus fuerzas, así que al final, los dos perdieron el conocimiento. Ninguno de los dos logró ganar, ya que según las reglas, al menos uno debía haber permanecido de pie para lograr la victoria.
Luego, fue el turno de los demás participantes.
En el caso de Wang Hua, ella venció a su rival en un abrir y cerrar de ojos, hizo una reverencia y bajó del campo.
El resto de los jóvenes también lo hicieron bien, aunque esta vez derrotar al oponente resultó ser un poco más difícil que la última vez, aún lograron arreglárselas para ganar.
De esa manera, las batallas continuaron en la tercera ronda, hasta que por fin, sólo quedaron un par de competidores, de los cuales sólo uno podía ser el vencedor de toda la competición.
La audiencia observó con los ojos brillantes a los dos jóvenes parados el uno frente al otro en medio del campo de batalla. Aunque la estatura de ambos era muy dispareja, el aura noble y fuerte a su alrededor era igual de imponente.
El largo traje blanco de Wang Hua se movía al compás del viento mientras su frío par de ojos azules observaban sin ninguna expresión al príncipe heredero.
Nangong Yilan también la estaba observando, sus ojos verdes como el jade contenían el brillo de un sentimiento complejo e indescriptible.
Ambos se miraron mutuamente, estuvieron en silencio hasta que la campana sonó, y al instante sus dos figuras chocaron.
El fuerte golpe hizo temblar el estadio, sacudiendo el corazón de todas las personas.
Debido a la fuerza del choque, tanto Wang Hua como Nangong Yilan retrocedieron un par de pasos, las manos que usaron para atacar fueron lastimadas, dejando que un fino hilo de sangre bajara por sus muñecas. Pero lejos de sentirse preocupados, una sonrisa feroz se formó en los labios de ambos, sus fuerzas eran iguales.
Wang Hua fue la siguiente en comenzar con un ataque, usando sus piernas dió un fuerte impulso y en una fracción de segundos ya se encontraba frente a Nangong Yilan. Los ojos de Nangong Yilan se abrieron un poco, pero luego sonrió mientras usaba ambas manos para bloquear la mortal patada dirigida a su cara. Una vez más, ambos retrocedieron por la fuerza de sus propios golpes.
Pero justo cuando la audiencia empezaba a ponerse ansiosa, ante sus ojos vieron como ambos jóvenes volvían a intercambiar golpes a una velocidad casi invisible a simple vista. El viento soplaba con cada patada y cada golpe de palma hacia temblar la tierra, ambos competidores utilizaron únicamente su habilidad de lucha, no había magia, sólo una pelea cuerpo a cuerpo.
Los sentidos de Wang Hua estaban a un 100% por ciento, no podía bajar la guardia ni por un segundo, porque de lo contrario, Nangong Yilan podría encontrar alguna rajadura en su formación y romper su defensa. Pero la situación de Nangong Yilan tampoco era muy estable, sus movimientos estaban empezando a flaquear.
Las personas estaban cada vez más extasiadas con esta última batalla, ambos jóvenes eran fuertes y prometedores, estaban seguros de que lograrían grandes cosas en el futuro. Todos sabían sobre la fuerza del príncipe heredero, pero ver las habilidades del hermoso niño de blanco fue una sorpresa realmente inesperada.
Finalmente, la campana que anunció el final del encuentro sonó, dando por terminada la batalla.
Pero, no se sabía quién era el ganador...
... Ambos jóvenes aún estaban de pie.
El animador caminó hacia el centro del campo, levantó las manos hacia el público y declaró.
"¡Tenemos dos ganadores!"
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Belleza inmortal: Rey De Los Asesinos
RomanceEn el siglo XXI en la moderna china, hay una belleza capaz de volcar la ciudad completa, ni siquiera las sexis modelos de las revistas se comparan con la "belleza" inmortal, los hombres pierden el aliento cada vez que la ven. "Hola hermosa señorita...