Belleza inmortal: Rey De Los Asesinos

El regreso de la familia y el comienzo de rivalidades

Los días que siguieron en la capital continuaron muy tranquilos. Todas las personas vivían sus vidas con armonía mientras trataban de disfrutar la simpatía y el compañerismo que se compartían entre todos.

Pero en la gran mansión del general Wang, como ya es costumbre, cosas extrañas estaban sucediendo....

"¡El maestro y los dos jóvenes maestros ya regresaron!"

"¡Que alivio!"

"¡De prisa, tenemos que recibirlos!"

"Alguien avise a la joven señorita"

"Si, en seguida"

*CRACK*

Mientras todos los sirvientes se preparaban con ansias para recibir a sus señores, la puerta del gran salón se abrió de golpe.

"¡Hua'er~! ¡Ya estoy de vuelta~! ¡El hermano mayor quiere abrazarte!" La enérgica voz de Wang Yan resonó en todo el salón.

"Yan, cállate... molestas a mi Hua'er" detrás de él se encontraba Wang Bai, con su típica cara de póquer.

"¡Sean bienvenidos jóvenes maestros!"

"¡Los estábamos esperando a ambos!"

"¡Kyaaaa! ¡Los dos jóvenes maestros siguen tan guapos como siempre!"

Los ojos de todos los sirvientes se iluminaron como estrellas mientras rodeaban al par de gemelos.

"Ejem.... ¿Y yo estoy pintado en la pared?"

Todos los sirvientes voltearon la cabeza al origen de esa ronca voz, solo para encontrarse con la intimidante y oscurecida cara del general Wang. Solo Dios sabe cuánto tiempo ha estado ahí parado sin que nadie se dé cuenta...

¡Dios mío! ¡Todos se olvidaron del gran general Wang!

"L-Lo sentimos mucho maestro... Usted también sea bienvenido" Dijo uno de los sirvientes mientras se apresuraba a bajar la cabeza.

"¡Hump! ¡Todos ustedes se acuerdan de estos dos mocosos y se olvidan por completo del maestro de la mansión!" Rugió enfurecido el general, aunque honestamente estaba muy cansado en este momento, solo quería regresar a casa y ser atendido correctamente para luego tomar un largo descanzo... ¡Pero estos insensibles sirvientes ignoraron por completo a su maestro! ¿Acaso él es un viejo sin importancia?

Al oír esas palabras, el cuerpo de todos los pobres sirvientes comenzó a temblar sin control... ¡Waaaa! ¡El maestro está furioso!

Desde otro lado, los gemelos observaron significativamente el comportamiento de su abuelo y en lo único que pudieron pensar fue: "Tan grande y todavía pide atención" "Abuelo, eso es muy infantil"... Claro que ninguno de ellos tenía agallas suficientes como para decirlo en voz alta, ya que se estarían condenando a sí mismos a seis horas de un sermón consecutivo...

Pero fue justo en ese momento cuando la puerta del salón volvió a abrirse.

"¡Hermanos mayores!"

Una hermosa niña de cabello negro se asomó silenciosamente por la abertura de la puerta.

Si, no era otra que Wang Hua quien había venido a recibir a sus hermanos.

"¡Hua'er~~! ¡Estoy en casa!"

El primer en abalanzarse fue Wang Yan. Él había extrañado mucho a esta simpática hermana pequeña suya, ya estaba harto de soportar a su estúpido hermano gemelo. Pero justo cuando estaba apunto de llegar a lado de Wang Hua, una esbelta mano de jade lo cogió del hombro.