Un Diario Más

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04 de Agosto del 2018.

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Crea tus propios pensamientos,
que nadie te diga lo que debes hacer.
Eres tan libre cuando nadie te dice nada,
pero la libertad siempre se acaba.
Y todo lo que algún día fue.

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Estaba tan metida en mis pensamientos...

Cada día era un día nuevo. Un día nuevo y repetitivo. Repetitivo en todos los sentidos. No odiaba eso, pero tampoco me gustaba.

Nunca me gusta repetir las cosas.

Pero hoy, pareciera que tendría que llorar.

Llorar por todo.

Malamente dejé de sentirme especial y de sentirme bien, como siempre cada vez que despierto. Me basta con sonreír para que luego me oculten las cosas tal que así, sin dejar que me vea feliz, que me vea bien.

Para empezar, porque todo empieza por algo, debería contaros como empezó todo. Y por todo, me refiero a todo. Pero no es que sea tan necesario.

Llegué a casa de mi madre el día 1 de agosto, puesto que el mes de Julio me tocó con mi padre.

No quería que llegara Agosto por eso mismo, estar nuevamente con mi madre. No es que no quiera a mi madre, ni mucho menos. La adoro, pero... Ya son 15 años viviendo con ella. Desde mi partida de nacimiento hasta ahora. Y no es que haya sido muy agradable el pasar de los años.

Mis ojos se cierran en un mar de lágrimas, nunca entenderé por que esta situación me hace daño.