16 de Septiembre del 2018.
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3:18 p.m.
Mi cabeza no paraba de dar vueltas al texto que había entre mis manos; escrito por encima del sobre de una carta sin abrir.
Ayer había encontrado la carta de "Vodafone" de remitente; mi madre. En un principio no le quise dar importancia, no era algo que me importase, puesto a que era ya de hace unos años atrás; pero ver que el sobre estaba sin abrir me hizo curiosidad y quise verla con detalles.
Y allí estaba; ese texto que hoy no para de rondar por mi cabeza. ¿Mi madre sabía escribir sin abreviar nada? Increíble.
Empecé a leer en voz baja para mi:
"Con el tiempo aprendí, que hay que creer en hechos; no en palabras. Que grandes amigos pueden volverse grandes desconocidos. Aprendí que estar enamorado es la más bella de las locuras, que cuando las palabras fallan; la música habla. Que no importa que tan fuertes seamos, todos necesitamos un abrazo. Que la palabra escrita, escrita se queda. Que quién te quiere te busca, piensa en ti; lo demuestra. Que no hay arma más poderosa que las palabras. Aprendí que los amigos pueden contarse con los dedos de las manos. Que una sonrisa tiene el poder de cambiar el mundo. Que si quieres algo, tienes que levantarte e ir tras ello. Pero sobre todo, he aprendido que en la vida, no se trata de ser perfecto; se trata de ser feliz."
Ahora mismo....
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4:59 p.m.
-Can You Hold Me?-
Sonaba desde mi reproductor de música.
¿Qué estaba pasando conmigo?
No podía responder a ciertas cosas. Me sentía mal. Raro. Extraña.
No sabía como sentirme. ¿Realmente era bueno sentirme así?
No sabía que era.
¿Una mujer?
¿Un hombre?
¿Transexual?
¿Estaba dudos@?
No sé que pasaba conmigo.
¿Acaso había algo mal en mi? ¿En mi cuerpo?
Mis ojos dejaban atrás su brilloso y cantoso color canela para que se volvieran del marrón oscuro, que, resultó que me acompañó toda la vida. O al menos desde que tenía más o menos razón de uso. Siguiendo el ritmo, mis ojos se cerraron. Sentía impotencia, dolor; escosor.
Mis labios empezaron a temblar en un mínimo de poco tiempo.
¿Qué era lo que estaba mal conmigo?
¿Porqué me pasaba esto a mi?
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Un Diario Más
RandomUn Diario Más. Hay horas. Hay horas para él dolor. Hay horas para sentir. Hay horas para reír. Hay horas para llorar. Hay horas para todo. Sobre todo, hay horas para amar; horas para él amor.