Quill apuntó hacia la tienda de música.-Eso es lo más avanzado en música.
-Eso son cassettes, Peter. No es lo más avanzado.-Alex se rió.-Quizá en cuantos años atrás lo fue, pero ahora no.
-¿Entonces?
Alex sonrió.-Sólo llevas la música a tu celular. Puede bajar una aplicación o lo haces como los pobres y las descargas ilegalmente.
-¿Eso no sería un delito?
-Sólo si te atrapan.
Peter se rió.-¿Me están enseñando a cometer delitos?-Tomó la mano de su novio.-¿Qué clase de novio eres tú?
-Delito menor comparado a lo que haces tú en la galaxia.
-Te la metió.
Quill miró a Harley a su lado.-Dime ¿Por qué te trajimos?
-Porque tu novio me ama y soy adorable.
-Adorable mis...
-Shh.-Alex le dio un codazo.-Está Harley.
El menor sonrió.-Te lo dije, Alex. Quill sólo quiere que mis oídos y mi poca cordura que me queda ya no exista. Me quiere regalar condones para mi cumpleaños.
-No es...
-Tengo un video que lo prueba.-Harley sonrió.-Te lo puedo mostrar.
-Hijo de...
Alex suspiró mirándolo.-Peter, dijimos que nada de hacer esas cosas. Harley es un menor de edad y...-
-Es un demonio. Sólo está fingiendo, Alex.-Quill apuntó al menor que sólo sonrió.-Cuando menos lo esperes va a tratar de chantajearte, decirte que lo acompañes a las cárceles y si no lo haces te amenazará con un arma.
-Peter, ¿No estás exagerando? Sólo míralo.-Alex apuntó a Harley.-Es un niño adorable.
Cuando Alex dejó de mirarlo, Harley se giró a Quill y le enseñó el dedo medio.-Idiota.-Dijo moviendo sólo los labios.
-Me dijo idiota.
-No escuché nada.
Harley se rió. Era tan divertido salir con estos dos.
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Ross miró su cuarto.-¿Es necesario que debas tener eso aquí?-Apuntó una imagen de un esqueleto humano.-¿O eso?-Apuntó otra imagen de un cráneo.-Dime que no tienes un esqueleto escondida en ese clóset o un cadáver.
-No podría hacer eso, Everett. Si tuviera un cadáver habría un olor nauseabundo.
-Te odio.
-Me amas, cariño.-Strange sonrió.-Entonces, ¿Qué dices del color?
-No está mal.-Dijo mirando el color gris de la habitación.-Me gusta este lugar. ¿Siempre haz vivido solo?
Stephen asintió.-Ajá. No soy de parejas, la última pareja que tuve fue Christine.
-Um.-Asintió. Si recordaba que alguna vez le habló de ella.
-¿Qué hay de ti, Everett?
Miró a su novio.-Mi última pareja fue T'Challa y no, sólo viví con una persona, ahora me odia.
-¿Por qué?
Everett sonrió mirando la habitación.-Creo que algunas personas odian que les digas sus verdades a la cara. Sólo eso. Así que me odia, pero no es me importe.
-¿Sabes algo? A veces tu sinceridad puede ser como un puñetazo en la cara.
-Lo sé.-Se dirigió hacia el clóset.
-No, no abras eso.-Everett abrió el cajón encontrando una cajita.-Menos eso.
Ross tomó la caja y se giró a ver a su novio.-¿Qué es esto, Stephen?
-Una caja.-Dijo su novio con nerviosismo.
-¿Stephen?
El pelinegro sonrió.-¿Qué tan raro es que tenga un anillo comprado desde el día que te conocí?
-¿Qué?
-Pues, eso.
Everett se paró y caminó hasta donde estaba su novio sentado desviando la mirada, su rostro estaba algo avergonzado.-Stephen, ¿Puedes mirarme?-Éste sólo negó con su cabeza.-Amor.-El pelinegro levantó la vista.-Son unos lindos anillos.-Sonrió viéndolos.-Me gustan.-En verdad eran anillos bastantes lindos.
-¿No estás enojado por eso?
-¿Por qué estaría enojado?
-Everett, sabes para que son esos anillos, no te hagas.
Asintió.-Lo sé. Quizá en un futuro, ambos podamos usarlo, Stephen.-Tomó la mano de su novio y sonrió levemente viendo la emoción en los ojos del pelinegro.
-¿En serio?
-Ajá.-Besó la mano de su novio.-Tú me amas y yo te amo. ¿Por qué no?
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Thor entró a la habitación y se encontró con Loki durmiendo con Frigga sobre su pecho. Sonrió, sus dos amores juntos.
-Sonríes como idiota mirando a mi padre.-Saltó al oír la voz de Hela detrás de él.-Y te asustas demasiado rápido. ¿Por qué temerme a mí?
-¿Puedes quitar la daga de mi cuello?
Hela suspiró y bajó su mano.-Bien. ¿Ya estás mejor?
-Si. ¿Qué haces aquí?
-Paseando. Ser la Diosa de la Muerte es increíble, pero me aburro estando sola con Fenrir, así que vine a ver mi padre, pero al parecer las bestias lo dejan cansado. ¿Alguna vez dejan de tener sexo? ¿Quieres tan luego otro hijo?
El castaño suspiró.-No tenemos tanto sexo.
-Desde Frigga. ¿Ya no hay juegos?
-Hela.
-¿Si? No te avergüences, no me molesta hablar de como mi padre abre sus piernas para ti, no soy Fenrir, yo no te morderé. Quizá te quite el otro ojo, nada más que eso.
-¿Pueden callarse?
Hela bufó.-¿Despertó de mal humor la princesa?
-Hela, soy tu padre.
-Y yo tu hija. Gracias por recordar algo que todos sabemos.
Thor negó.-Es igual a ti.-Miró al pelinegro.
-No se parece a mí.-Loki bufó.-En nada.
Ella se rió.-¿Estás de mal humor por no tener sexo?
-Te voy a maldecir, niña.
-El verde se ve mejor en mí.
Loki la miró ofendido.-No eres mi hija favorita.
-Si, todos sabemos que prefieres al pulgoso.
Thor se rió.-De verdad que somos la familia más rara.
-Tú eres quien se incluyó en nuestra familia.-Hela se encogió de hombros.-Nosotros teníamos a un papá luchón.
Loki suspiró y acarició el cabello de su hija menor.-Espero que tú seas normal.
-Es hija de dos dioses, padre.
-Espero que no quieras matar gentes, jugar con rayos, quitar ojos, mascar a la gente, que tengas 8 patas, seas una serpiente....
-Mentir.
-Apuñalar.
El pelinegro los miró a ambos.-¿Cómo es que dicen amarme?
-Sólo decimos la verdad.-Thor miró a Hela.
Ella sonrió-Lo que tú no haces.
