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P.O.V Tyler

Miro fijamente a la castaña que acaba de salir del baño y siento como si todo me pesará más ahora.

Nos quedamos mirando unos cuantos segundos sin movernos y siento unas ganas tremendas de abrazarla y de tener algo con ella de que me de una oportunidad de que me conozca, cada parte por pequeña que sea de mi, pero es algo completamente difícil ya que para ella nunca supuse nada y eso fue lo que me llevo a intentar dejar de pensar en ella, aún que estuviera levantándome cada mañana imaginándome qué tal vez ese día la vería y no sé, tal vez las cosas cambiarían o algo.

Pero algo tenía claro, no pensaba mendigar por amor jamás caería tan bajo, si me quieren y les quiero perfecto pero si he de mendigar para un mínimo afecto de amor eso no es sano y no haría eso.

—¿Hola?— puedo notar cuán dudosa esta y lo incómodo que puede llegar a ser eso.

—Así que tú eres la culpable de que este aquí— le digo lo más cortante posible aunque por dentro realmente tan solo quiera alejarme ya que no aguanto más estar ahí, no cuando la última conversación que tuvimos es tan reciente para mí.

—Sí, quería hablar de lo que pasó el otro día, de lo que me dijiste— veo como se acerca hacia mí y yo tan solo sigo recto y sin mostrar ni una emoción.

—Mira, no hace falta que me digas que lo sientes pero que no sientes nada especial por mí pero que podríamos ser amigos y toda esa charla.

Veo como hace un gesto raro—con las uñas y es que usa la uña del dedo pulgar y lo introduce en las otras uñas como si lo limpiara— siempre hace eso cuando siente que está demasiado quieta igual que muchas veces inconscientemente se muerde la piel interna de las mejillas inconscientemente, es demasiado tierna aunque no quiera parecerlo.

—¿Quién te ha dicho que te fuera a rechazar?— me mira y sonríe y yo no sé qué hacer o cómo reaccionar, no me esperaba que dijera eso, entre las mil cosas que podría decía nunca imaginé que diría esto.

—Pues lo dejaste claro en la cafetería.

—En ese momento no estaba pensando Tyler, entiéndeme.

Gruño y la miro sin poder creérmela.

—Te entiendo Alice ¡joder si te entiendo! Pero estoy cansado y pasó de que me digas que te gusto y luego sea mentira y solo me hayas dicho eso para que nos perdonemos cosa que al final acabaría peor o aún peor que me lo digas por lástima, no es como quiero que te declares— la miro y veo la lástima en ella y quiero que desaparezca ya de una vez, no soy un cachorro abandonado joder—. Si nunca hubiera dicho nada nunca me hubieras buscado y ambos lo sabemos, puedes dejar de engañarte si es eso lo que estás haciendo porque eso no mejoraría para nada las cosas— al terminar siento como si ácido me recorriera la garganta y simplemente intento ignorarlo.

—Deberías darme la oportunidad de decidir si quiero o no tener algo contigo, no puedes decidir por mí el que me vaya a olvidar de ti y el que no quiera probar a tener nada contigo ¿entiendes? No puedes— me coge de las manos y puedo sentir lo cerca que estamos el uno del otro—. Me gustas, no quería admitirlo pero me gustas, no puedo decir que te quiera y aún menos que esté enamorada de ti pero quiero experimentar esas emociones contigo, hazme sentir como es el que una persona se preocupe por tu vida más que la suya, hazme reír cuando me sienta mal o simplemente acompáñame día tras día y enamórame— veo como sus pupilas se dilatan al mirar mis labios y no puedo evitar dirigir mi mirada hacia los suyos—. ¿Querrás hacerlo?

Sonrío y ella se toma eso como una autorización para poder besarme, el beso es dulces pero a la apasionado y siento cómo separa mis manos de las suyas para poner las suyas en mi cuello acercándome más hacia ella por lo cual yo dirijo mis manos a su cintura pegándola más hacia mí.

—Chicos estáis bi...— la voz de Chad interrumpe y se calla al vernos pero nosotros seguimos igual, como si él no existiera pero vuelve a hablar lo que hace que paremos y que yo le mire bastante muy mal, con ganas de partirle el cuello si soy sincero—. Me alegra que estéis bien y que hayáis empezado lo que sea que hayáis empezado pero eso puede trasladarse a otro sitio que no sea mi habitación ya que no es por ofender pero quiero volver a dormir y no quiero veros las caras hasta mañana así que ¡Largo!

Veo como Alice se ríe y sale de la habitación despidiéndose y sigo sin creerme todo lo que acaba de pasar.

—Lo de largarse también iba para ti Eison— la voz de Chad sigue molestando por lo que decido tirarle el cojín que había en la cama de su compañero y voy directo hacia la puerta—. ¡Que te jodan cabrón!— exclama pero puedo oír su risa después de eso.

A saber cómo termina todo esto.

Pero eso ya es otra historia.

Fin...

25/09/18

Hey hey

Antes que nada deciros que todavía falta el epílogo, y esta vez también haré una sección más dónde básicamente me explique y os agradezca, este final ha sido muy inesperado para mí, no pensé nunca en dejarlo así.

Pero bueno que estoy hablando demasiado, nos vemos pequeñxs pasarla bien y espero que hayáis disfrutado o que al menos os haya gustado.

XOXO

Operación Salvando Al InternadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora