Soledad es una palabra compuesta. Sol-Edad ¿Qué clase de sentimiento se puede equiparar con la edad del Sol? Sin duda uno inconmensurable, absolutamente infinito para los parámetros temporales humanos. Ese sentimiento albergaba el corazón de Taehyung. Fue como una semilla que creció desde la niñez y se hizo inmensa en su corazón, y lo mismo que el sol que a veces parece no estar ahí, su soledad creció a veces invisible, otras no.
La vida de Taehyung era semejante a la fábula del pájaro encerrado en una jaula de oro. Rodeado de todo aquello que un ser humano pudiese desear, su vida era carente de justamente aquello que los humanos más necesitamos para ser felices. Compañía y afecto.
Al principio no lo percibió. Era pequeño y estaba a su alrededor el personal de servicio de la casa paterna dispuesto a ayudarle y servirle. No eran compañía. Estaban obligados a pulular a su alrededor, tampoco le dieron afecto. Su servicio fue frío aunque comprometido.
Los seres humanos o nos adaptamos al medio o estamos condenados a perecer. Taehyung se adaptó, al menos por un tiempo. Pero, más tarde vino el conocimiento acompañado de sus tutores. Tal vez fue ahí la primera vez que descubrió lo errático de su concepto de normalidad. Y con el conocimiento vino el dolor.
Eso le recordó un día en que asistió a la misa dominical. El sermón de aquel día se centró en el Génesis. Particularmente en la tentación "... Serán abiertos vuestros ojos seréis como Dios, conocedores del bien y del mal" Aquel día preguntó curioso a su chofér Jun Min Lee qué significaba esa frase en cuestión, pues la explicación del sacerdote no le había parecido del todo coherente. El chofer algo sorprendido meditó un poco antes de responder. Observó con atención al pequeño Taehyung con su impecable aura angelical. Estaba seguro que el pequeño tarde o temprano comería del fruto, igual que lo hicieron los primeros padres, y por ello ciertamente caería "Lo descubrirás por ti mismo joven señor".
Taehyung entrecerró sus ojos y salió de sus pensamientos por unos segundos. Volvió a abrirlos y respiró aún más profundamente el aire marino. Divisó a lo lejos la cola de la Osa Mayor. Volvió a cerrar los ojos.
Tuvo un tutor en la adolescencia. Él fue la primera experiencia realmente afectiva en la vida de Taehyung. Era un hombre ya en sus cincuenta años, con una apariencia demasiado clásica para sus ideas progresistas. Hasta que le conoció el mundo de Taehyung se resumía en órdenes y aceptación. Otros ordenaban, él obedecía. Claramente en su vida faltaba la reflexión y la crítica, justo aquello que completaba la esfera del pensamiento.
Luego, fue evidente por qué nunca quisieron sus otros tutores, ni sus progenitores completar esa esfera. Pero, fue gracias al querido Min Hyung See que su mente empezó a vagar por lugares jamás imaginados. Fue con él con quien descubrió el concepto de secreto. Ese algo que compartimos tú y yo y en el que nadie más tiene cabida. La reflexión, la crítica y la discusión sobre incontables aspectos, fueron su mejor y más preciado secreto.
Para un chico de dieciséis años, descubrir un mundo de posibilidades todas más allá de su imaginación, fue como comer el fruto prohibido. Aquel día sus ojos se abrieron, aquel día supo del bien y del mal.
La máscara con que cubrió su rostro en ese momento le acompañaría el resto de su vida y le sirvió para sobrevivir. Nadie tenía por qué imaginar que tras el chico taciturno y retraído se escondía un joven sumamente despierto, inteligente y preclaro.
¿En qué momento los monstruos habitaron en él? ¿O tal vez nacieron como un incubo fruto de su propio dolor? No quería pensar en ello, pero a veces su mente caía en un torbellino que no podía controlar y buscaba la raíz de toda su tragedia. ¿Fueron acaso los golpes? ¿Los encierros? ¿El abandono? Taehyung se sentía cansado de divagar en su mente buscando respuestas, pero no obstante siempre las buscaba. Debía encontrar algo a que asirse para no caer en la hoguera de la verdad.
Dije que sería denso? Dije que me lo estoy tomando como un ejercicio de escritura?
El tono de la historia empieza así, pero es importante para el desarrollo. Si tienes miedo de que sea un tostón, tranquilidad, que será mucho más suave y fluido cuando aparezcan los "monstruitos" y Jungkook.
Como siempre, puedes dejar tus sugerencias, comentarios y /o estrellita. Gracias por leer.
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Inside me
FanfictionKim TaeHyung sufre de TID (Trastorno de Identidad Disociativo, también llamado Personalidades Múltiples). A raíz de esto se aísla en una zona costera, pensando que de esa manera seguirá manteniendo a raya a aquellos a los que él llama sus monstruos...