Inside me

26.- Una conversación necesaria

Jungkook se preparó para lo que vendría. Solo contaba con una herramienta, la única a la que podía asirse en momentos como este. La verdad.

— Hola Kook — La sonrisa de V era indescifrable — Huelo a sexo. Parece que alguien tuvo suerte esta noche —

Jungkook caminó hasta donde se encontraba su ropa, sopesando lo que haría. Necesitaba hacerlo de forma natural. Ese chico que estaba en su cama, era exactamente el mismo chico que había dejado en ella al salir — Tu y yo hemos tenido suerte — dijo mientras dejaba caer el albornoz y empezaba a vestirse. Sintió la mirada de V recorrer su cuerpo — No lo creo — Afirmó V, agregando — No creo que yo tuviese esa suerte — Un suspiro salió fuerte de la boca de Jungkook, y terminando de ponerse el sweater le encaró — No vayas por ese camino. Tú y yo hemos pasado una noche encantadora... Voy a preparar el desayuno. Date prisa — Y con una gran sonrisa en los labios salió de la habitación rumbo al salón, dejando a V tal vez un poco asombrado.

Jungkook tenía trabajo que hacer, el habitual y estaba decidido a no seguir el juego. Ellos son un todo se repitió una y otra vez en su mente. Taehyung podría haber fragmentado su personalidad, pero él no lo haría. Empezó a pensar si debería buscar un nombre que les definiese a todas las personalidades y que no hiciese sentirse mal a ninguna. Pensó en Taetae y lo mucho que le gustaba que le llamase bebé, pero tal vez eso sería demasiado para V, incluso para Taehyung. ¿Cariño, vida, amor? Suspiró nuevamente. No era fácil. Se sintió como esos tipos que llaman a sus hombres cariño solo porque no pueden recordar sus nombres. Claramente no era lo mismo, pero casi. Su cabeza reventaría a este paso.

Por su parte V apenas hizo una mueca al verlo salir. En cambio, su rostro vagó nuevamente hacia la ventana, hacia el día gris, hacia un dolor creciente que sintió en su pecho. Tragó saliva. Todo indicaba que Jungkook prefería a Taehyung. Una vez más era tirado al borde. Despreciado de alguna manera. No le gustó la sensación de dolor que se acomodó en su pecho. Él no necesitaba a nadie, nunca lo había hecho y no lo haría ahora, pero no podía negar el hecho de que le doliese el que Taehyung hubiese avanzado con Jungkook a un punto en el que él no se había acercado. ¿Traición, celos? "Tú y yo hemos pasado una noche encantadora" Una mierda para él. Si hubiese sido realmente él, habría sido una noche ardiente, una noche inolvidable, una noche apasionada... pero "encantadora" ¿Qué mierda era eso?

Después de encender la chimenea y preparar el desayuno, Jungkook empezó a ponerse nervioso. Taehyung, V, debería haber salido ya de la habitación hacía rato. Suspiró profundo una vez más, dirigiéndose por el pasillo a su habitación.

Entró con la pregunta en sus labios — ¿No vienes a desayunar? — Vio entonces que seguía metido en la cama. Enrollado entre las tapas, hecho un ovillo. Su corazón se estremeció. Se acercó rápidamente, se subió a la cama y se ovilló a su lado acariciando el cabello rubio desordenado, mientras veía su mirada ida — Ehh ¿Qué pasa? — El rubio apenas parpadeó. Entonces Jungkook se pegó más a él y dejó suaves besos por su cabello — No soy él — Dijo V de pronto

Kookie sonrió en su oreja — ¿No? Pues te pareces mucho — No juegues — Ladró el rubio

— ¿Estás enfadado? — Preguntó Jungkook mientras dejaba suaves besos en su oreja y en la curva de su cuello. V intentó alejarse, pero Jungkook se agarró más fuerte a él — No te alejes. Hablemos — Jungkook sonrió algo complacido al ver en el rostro de V un puchero que le recordó increíblemente al dulce Taetae — No era yo Kook — Jungkook acomodó su rostro en la curva del cuello de V — No me lo hagas más difícil. Eras tú y lo sabes. Desde que te conozco siempre eres tú — Le vio apretar los ojos con fuerza y tensar su cuerpo — Yo no... ¿Cómo puedo ser yo, si no recuerdo nada? Todo desaparece y es como una profunda oscuridad — Jungkook apretó sus manos sosteniendo las de V en su pecho — Trabajemos en ello. Hagamos que todo sea luminoso para ti —