18- Decisions

1.9K 204 3
                                    

-¿Steve Rogers? -Una voz femenina a su espalda lo hizo salir de su ensoñación.
-El mismo -dijo amable- ¿Puedo ayudarla en algo?
La chica era hermosa, cabellera pelirroja, una blusa de color magenta y una saya negra y ajustada le daban un aire de profesional que al capitán le agradaba. Lucia como alguien preparado.
-¿Usted aun es compañero de casa de Tony Stark? –una mueca de desagrado instantánea cruzo las facciones del rubio, si esa mujer deseaba tener algo con Tony eso la convertía instantáneamente en su enemiga
-Sí, pero no tengo permitido presentarle muje…
-No se moleste Capitán, solamente deseo que le entregue algo con urgencia-dijo sacando un sobre de su cartera- Eso que usted imagina ya lo tuve, y no tengo ganas de salir lastimada de nuevo por un ser sin corazón como él. Así que entréguele esto en cuanto lo vea.
-Tony no es….-iba a hablar el de ojos color cielo cuando la mujer le dio la espalda, tras poner el documento en sus manos.
-Usted cree conocerlo capitán, pero no lo hace-dijo mientras se alejaba- tal vez como amigo sea un buen tipo, no lo sé, pero si se que nunca ha tenido una relación que dure un año, ni siquiera nueve meses, y también se que cualquiera que se acerca a él termina llorando. Así que guárdese la defensa.-tras decir esto, la joven entro a un auto y se marcho a máxima velocidad.
Steve, tras salir de unos segundos de estupefacción por las palabras de la pelirroja, se quedo mirando el sobre entre sus manos. Trato de centrar toda su atención en este, no en las dudas que comenzaban a acumularse en su cabeza, no en eso que le decía que ya llevaban seis meses de relación formal, aunque no publica, lo que siguiendo las estadísticas de la pelirroja significaba que Tony podría haberse terminado cansando de él, no quiso siquiera imaginar que él era solo un nombre que pronto el moreno tacharía de su lista. Se negaba a pensar en esto, y por eso leía una y otra vez la dirección escrita en el papel, porque sería una total falta de respeto abrir su correspondencia sin permiso.
Cuando llego el millonario le conto que una joven la había dejado para él, omitiendo el resto de la incómoda conversación y dejando el sobre en las manos ajenas.
Tony iba a ser llevado a un juicio por el gobierno, que deseaba monopolizar la tecnología de las armaduras que había creado, pero Steve no estaba preocupado por eso. El genio estaba totalmente seguro de que saldría victorioso de ese juzgado, además el se mantendría a su lado a cada segundo que durase el proceso, así como contaba con el apoyo de Rodhey, Happy, Pepper y gran parte de la población. Estaría bien, todos estaban seguros de eso.
Durante el juicio, que fue totalmente injusto, ya que omitían partes importantes de la defensa y solo se centraban en aquellas cosas que podrían perjudicar la imagen de Tony, el Capitán América se encontraba más que incomodo. Estar rodeado de tanta hipocresía le hería la moral, sin embargo Tony parecía estar en su ambiente, amaba ese juego, y era el mejor jugando, estar sobre los demás, siempre un paso por delante de todos era su mayor talento, y lo que lo había llevado hasta donde estaba. Personas como su supuesto antiguo rival en la carrera armamentista, Justin Hammer, no eran más que pulgas que Tony parecía aplastar, humillar y sacar del camino a su antojo. Steve trato de advertirle en un descanso que no serviría de nada humillarlos a todos, que se centrara en su defensa y nada más, pero el millonario lo ignoro completamente, eso era demasiado divertido como para dejarlo solo porque a Steve le sentara mal ver a otros humillados.
Tal vez, solo tal vez, el capitán tenía razón, tal vez debería haberse detenido, tal vez no debería haber provocado ansias de venganza en personas con las que no deseaba pelear, tal vez debería haber sembrado amor en vez de odio, tal vez, pero solo el tiempo diría quien había tenido la razón.
Cuando salió de allí, victorioso y con una sonrisa en el rostro, Tony se apresuro a llegar a casa, junto a su pareja arribaron a la mansión casi al anochecer, pero su expresión feliz había cambiado hacia una media hora.
-Tony-hablo el rubio en cuanto entraron- estaba pensando que tal vez podríamos…no lo sé…hacer algo juntos. Hace mucho no vemos una película los dos… ¿Por qué no…
-Lo siento Steve pero tengo que ir a mi laboratorio urgente-dijo fingiendo una sonrisa, pretendiendo que no sentía un dolor punzante en el pecho, tratando de fingir que el núcleo de paladio no se había terminado quemando, una vez más, haciendo inestable el reactor, y por tanto, la metralla. Salió de allí casi corriendo, sin darse tiempo a sí mismo de ver la expresión herida del rostro de ese hombre que tanto amaba. En cuanto estuvo a salvo de su mirada saco una pequeña caja donde guardaba una serie de repuestos, cada vez el núcleo se quemaba a mayor velocidad, por lo que ya no podía salir de casa sin ellos.
Tras el intercambio, se hizo un análisis de sangre que demostró que el 24% de su sangre se había contaminado-no llegare a navidad ¿verdad? -dijo mas para sí mismo que para J.A.R.V.I.S., el único que conocía su situación.
La inteligencia artificial había demostrado más preocupación por su situación que el propio Tony, ya que tras días y días de búsqueda no autorizada había encontrado una mezcla de ingredientes que, bebido en grandes cantidades cada día, podría si bien no reducir, si controlar el avance y ralentizarlo lo suficiente para seguir buscando esa cura que los dos sabían imposible. Así que, un par de días después, Tony había comenzado a darse a sí mismo por muerto. 
-Debería comenzar a pensar en mi herencia ¿No crees? –hablo Tony.
-Me temo que debo recordarle que por decreto de su padre todas sus propiedades son compartidas con el Señor Roger lo cual sig…
-Si si, ya entendí. No me molesta en lo absoluto que todo se quede con él, estoy seguro de que lo cuidara. Pero hay otras cosas…la armadura…la dirección de la empresa…no todo caerá sobre sus hombros. No podría hacerle eso, el ya tiene suficiente con todo lo que tiene debe resistir.
Por más que pensaba, por más que buscaba posibles sucesores, solamente existía una persona en la que confiaba lo suficiente como para entregarle sin reparos el control de toda Stark Industries, la única que sabía que no lanzaría sus años de esfuerzo por la borda, su mejor amiga y más sabia consejera. Si, estaba decidido, la nueva directora general de Stark Industries seria Virginia Pepper Potts. Y así, tan rápido como tomo la decisión, se encargo de hacérselo saber a la pelirroja.
😄😄😄😄😄😄😄😄😄😄😄😄
Heeey, dejo esta nota para avisar que en un par de días debo regresar a la escuela, as que actualizaré un poco mas lento. También me gustaría que dejaran en los comentarios que les esta pareciendo la historia hasta ahora. Besos para todos😘😘😘 y mucho yaoi.

By your side || StonyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora