22- Blurred eyes

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Cuando vio salir al millonario por la pequeña puerta del baño una sensación sobrecogedora lo envolvió. La ira fue sustituida por un miedo que lo estaba destruyendo por dentro. Tenía que encontrarlo… tenía que abrazarlo, tenía que pedirle que se quedara a su lado, tenía que acunar su rostro y besarlo con suavidad mientras le decía que todo estaría bien…que saldrían adelante. Steve aun no lo comprendía del todo. Que era lo que sucedía o por que lo hacía…pero esas marcas en el cuerpo de Tony solo significaban una cosa, fuese lo que fuese, al millonario no lo quedaba mucho tiempo para combatirlo. El rubio podría haberse quedado días en ese baño tratando de organizar su cabeza sin lograrlo ni por un segundo…pero esa posibilidad era un lujo que no poseía. Tenía que encontrar al millonario antes de que hiciera una locura, así que salió casi corriendo del baño en dirección a la única persona con la capacidad de poner un poco de juicio en su cabeza: Virginia Pepper Potts.

Al entrar al salón de la fiesta más de una persona se le quedo mirando, no los culpaba, probablemente debía lucir terrible. Pálido y con los ojos enrojecidos no era como le gustaba que lo viesen, pero eso no le importaba en ese instante.

-Señorita Potts, Señorita Rushman. ¿Han visto a Tony entrar de nuevo a la sala?

-No Capitán -respondió Natalie- de hecho pensé que estaba con usted.

-Lo estaba -bajó la cabeza algo avergonzado el rubio.

-Bueno, al menos no será un problema encontrarlo -dijo con un suspiro Pepper mientras señalaba a la pantalla que mostraba la competición a punto de comenzar- ¿Alguien sabe que hace Tony a punto de entrar a un auto de carreras?

-No estaba enterada de nada de esto señorita Potts -respondió la otra pelirroja, quien en realidad solo miraba el rostro preocupado de Steve, quien parecía a punto de sufrir un paro cardiaco en cualquier minuto- Tranquilícese capitán. Si bien no negare que es peligroso, los registros de accidentes en ese tipo de carreras son bastante bajos. El señor Stark debería de estar bien.

-Eso espero- dijo bastante preocupado, evitando mirar el rostro del millonario aun en una pantalla- Necesito… hablar con el de un tema muy serio -Miró a Pepper- podría pedirle a Happy que me escolte hacia allá cuando termine la carrera. La verdad es que no puedo esperar mucho.

-Por supuesto Capitán - la pelirroja miro a la pantalla, tratando de ignorar la curiosidad, pero no lo conseguía, así que finalmente pregunto- ¿Acaso tuvieron alguna disputa?- aun cuando quizo disimularlo, el tono venenoso de la pregunta se le escapo de entre los dientes.

-Se podría decir que sí, pero vamos a arreglarlo… tenemos que arreglarlo.

Steve no dijo nada mas, negándose a revelar información que podría afectar al genio. Se quedo allí, viendo la carrera como todos en el amplio salón. Era algo sorprendente, los vehículos iban tan rápido que era casi imposible seguirles el ritmo a todos. Sin embargo el no lo hacía, su vista solo se centraba en aquel con el logo de Stark Industries, el cual estaba entre los primeros, movimientos temerarios y riesgosos y una velocidad de locos caracterizaba su forma de competir. El rubio estaba completamente nervioso, pero al mismo tiempo asombrado, definitivamente cuando todo esto pasara deseaba ver más carreras de ese tipo.
Todo iba de maravilla, pero entonces pudo ver a un hombre salir con una especie de látigo eléctrico. Su cabello largo y ligeramente cano, un mondadientes entre sus labios y una sonrisa de seguridad casi malévola fueron todos los atributos que el capitán lograba distinguir. De un movimiento destrozo completamente uno de los autos. Miro a ambas pelirrojas totalmente preocupado, y sobre todo indignado. ¿Cómo era posible que ambas estuviesen tan tranquilas cuando parte de los obstáculos era una persona con toda la imagen de asesino psicótico?

-¿Que significa esto?, dijeron que no era tan peligroso, ese hombre puede matar a alguien con eso que lleva. ¿Qué clase de juego es este? Están locos.

By your side || StonyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora