De Frío a Caliente

Capitulo 7: Lo prohibido lo hace más excitante

Bakugou se encontraba paralizado, Todoroki estaba arrodillado frente a él con las manos bien puestas en su erección, sus ojos se cruzaron antes de que algo más pasara.

- ¿No quieres que siga? Ponte firme y dime que no quieres y te dejaré -habló el mitad y mitad mientras sostenía en sus manos el pene de Bakugou.

- ¿Te dejaré? ¿Crees que no puedo quitarte yo solo?

- Pues... Hazlo entonces, a menos que quieras.

- No soy un raro, yo...

- No eres el raro, soy yo el que está con la boca a centímetros de tu pene ¿Qué quieres que haga Bakugou? Dime.

- ¿No era acaso que... Yo no mandaba?

No se resistía para nada, y con esa frase acompañada del tacto de la mano del rubio sobre su cabeza todo estaba dicho, lentamente abrió la boca e introdujo la erección del rubio dentro, jamás había hecho aquello y le sorprendía que aquel acto sexual se diera incluso antes que su primer beso, era ridículo y algo gay de su parte, pero poco le importaba. Bakugou tiro su cabeza hacia atrás y cerró los ojos con fuerza, el primer contacto de la boca de Shouto con él había sido muy profundo, una y otra vez adentraba su miembro al interior de su boca ensalivándolo y dejándolo totalmente húmedo, parecía incluso no necesitar respirar cuando lograba hacer que su glande chocara en su garganta, el rubio, que estaba un poco confundido al principio, terminó por nublar su mente con el placer, aquello que el idiota mitad y mitad le hacía le estaba provocando las sensaciones más excitantes que había sentido alguna vez, pequeños espasmos recorriendo su cuerpo, escalofríos que le pegaban justo en el pecho y subían hasta su boca haciendo que soltara leves gemidos, el bicolor fijaba su mirada en este de vez en cuando, tratando de adivinar qué era lo que mas le gustaba, los besos en el glande que provocaban cosquilleos sabrosos, su lengua a lo largo de su pene que lo hacía suspirar con su voz entrecortada, o quizás cuando lograba comerse su miembro completo y podía escuchar un gruñido profundo y masculino salir de sus labios, lo que fuera que le gustara al explosivo él lo haría, y comenzó a acostumbrarse pero algo lo detuvo.

- To..todoroki... Para... -la voz agitada de Bakugou, sus manos tomaron sus cabellos -Para, es ... Muy caliente...

- Lo siento -mencionó el mitad y mitad -no puedo controlar eso -terminó por decir para volver a meter el miembro del rubio en su boca hasta el fondo.

- Basta... Si sigues... Voy a...

Trato de sacarselo de encima pero la intensidad con la que Todoroki estaba chupándolo lo hacía desistir y regaba sus fuerzas a cero, su respiración se volvía mas agitada y los pequeños gemidos se fueron elevando hasta que ya no pudo contenerse más.

- Aaaahhhh -ese glorioso grito de Bakugou no se parecía en nada a los que siempre daba. Todoroki escupió los restos que el rubio había esparcido en su boca y se limpió la cara con el reverso del puño.

- Lo hice bien ¿Verdad? ¿Soy bueno? -preguntó a un Bakugou totalmente exhausto que comenzó a deslizarse por la pared hasta acabar sentado en el suelo -No sabe tan mal -terminó por decir mientras se saboreaba los labios.

- ¿Q-qué hicimos? -preguntó el otro en un tono bastante sensual, mientras tomaba un respiro.

- Lo lamento, juro que no se lo contaré a nadie y no volverá a pasar -hablo de forma calmada aún sentado sobre sus rodillas.

- ¡¿Q-qué acabamos de hacer?! ¡Maldito mal nacido, idiota! ¡Muérete! -gritó el rubio levantándose siquiera del suelo, el otro lo vio confuso y se acercó a él.

- Ammm... Bakugou ¿Dónde estás? ¿Quieres traer al otro Bakugou? -dijo de la forma más cómica que pudo, era obvio que estaba bromeando pero su tono de voz no cambiaba para nada, aquello no se le daba muy bien.