De Frío a Caliente

Capitulo 21: Ying Yang: Cuando lo malo lleva algo bueno.

"Resulta feo que tu amigo bese a la chica que te gusta." ¿Qué era lo que había dicho? Con esa frase dio el pie para llegar a la escena de ese momento, los dos encaminándose hombro a hombro a la habitación del rubio, este de seguro lo mataría en cuanto viera a Momo parada en su puerta, se enfurecería de más en cuanto los viera juntos y supiera que habían hablado, cuando hacía al menos cinco minutos le había prohibido hacerlo, ardería en cólera en cuanto se enterara del por qué de aquella visita, pero... ¿Qué más podía hacer? Momo se sentía angustiada, se le notaba en el rostro y sus expresiones, su mirada fija en los pasos que iban dando, su silencio, quizás estaba avergonzada o dolida por todo aquello, Todoroki había tratado de ser dócil con ella para no herirla tanto, pero aquel resentimiento de lo que le había causado su "pequeño error" con Bakugou había sido suficiente como para molestarlo y no pensarlo lo suficiente.
Se mantuvieron de pie frente a la puerta unos minutos, ninguno se atrevía a tocar, enfrentarse al rubio era bastante aterrador, sobre todo cuando sabías que iba a estar enojado... Bueno, prácticamente siempre, Shouto suspiró, entonces alzó su mano para tocar la puerta rogando que al rubio no se le ocurriera justo en ese momento activar algún modo meloso que les ajustara la cuerda que traían al cuello, los pasos acercándose del otro lado lo pusieron más nervioso pero sabía disimular, la perilla se giró y la puerta se abrió, esos ojos carmesi preciosos, cada vez que lo veía sentía que se enamoraba de nuevo de él, sacudió su cabeza, no era el momento, "¿Qué diablos te olvidaste?" dijo el explosivo, y luego se percató de la presencia de la chica a un lado del bicolor.

- ¡¿Qué demonios hace ella aquí?! -gritó furioso y amagó para cerrar la puerta con fuerza, pero Todoroki lo evitó colocando hábilmente un cepo de hielo en medio, lo que sorprendió totalmente a Momo, de esa forma Todoroki logró irrumpir en la habitación del rubio - ¡Largate de mi vista, idiota mitad y mitad! ¡Y no vuelvas a poner tu maldito hielo en mi maldita habitación,...!

- Katsuki calmate... -intentó tomarlo de los hombros para estabilizar sus emociones pero el otro se safó brusco de su agarre.

- ¡¡No me digas así!!

- Bakugou calmate, por favor -Yaoyorozu se encontraba fuera, oyendo algo impactada esa reacción reacia que el chico explosión había tenido de solo verla, realmente sintió que había metido la pata hasta el fondo.

- ¡Te dije que no quería verla y la traes a la puerta de mi cuarto! -comenzó a caminar en el interior de la habitación totalmente fuera de sí - ¡¿Eres estúpido o te haces?!

- Baja la voz Katsuki...

- ¡¡Que no me llames así!! -se acercó a él desafiante pero el otro se paró de la misma forma.

- ¡Maldición! ¡Perdona! -gritó el bicolor por inercia, esta relación que tenía con Bakugou era un poco desastroza, nunca había elevado su tono de voz tanto como lo hacía desde que estaba con él, la forma que tenía el rubio de gritarle por cualquier cosa y no dejarle explicar nada a veces lo sacaba de quicio, se ponía a gritar él también y todo terminaba mal, así que intentaba ser lo mas paciente posible. Bajo la mirada furiosa del rubio, quien se callaba enseguida cuando él elevaba la voz, se relajó e intentó tomarlo todo con calma -Perdona, no lo volveré a hacer, pero ella...

- No, no, no quiero escuchar nada. Largate -fue hasta la puerta del cuarto y la abrió de par en par, Momo se apareció frente a él.

- Hola Bakugou, yo...

- ¡Largate, no quiero hablarte!

- Bakugou ella lo sabe todo -terminó de decir Shouto para que este se volteara a verlo increiblemente sorprendido, un calor excesivo se plantó en sus mejillas, su mirada fue desde los ojos de la chica hasta los de Shouto y viceversa, no sabía bien qué hacer, el bicolor se acercó a él -Es por eso que la traje, quiere explicarte todo.