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Vanesa andaba hacia ella pasando por el lado del escritorio sonriendo aún.

V: Es que yo soy muy, pero muy, muy, muy afortunada...

M: ¿Y eso por qué? (decía levantando una ceja ya teniéndola en frente)

V: Porque a pesar de no tener grandes lujos, no ser tan guapa aunque si simpática y con ángel, TENGO TU AMOR (le volvía a sonreír al máximo)

Malú levantaba ambas cejas tratando de contener la sonrisa que quería salir.

V: Y que te pongas celosilla de... esa cabeza de cordero jeje me da no sé, un gustito... (decía dejando la muleta a un lado y sentándose a horcadas en Malú) ¿mmm...?

M: (Malú ya con tenerla así dejaba aquel semblante duro y su rostro cambiaba al instante suspirando) Ayyyynnnss (decía pasando sus manos por sus caderas) ¿Por qué tuviste que ser tan amable?

V: Malú... (le sonreía) Dame un beso anda antes de irme, que mañana no podré tocarte ni un pelo.

M: Dime que no la encontraste guapa.

V: No puedo mentir, es guapa.

M: ¡Vanesa!

V: Pero tú lo eres más amor. Y yo tengo tu amor, y tus celos, y soy feliz.

Decía haciendo otro movimiento chulesco tentando a Malú que sin pensar tomaba su nuca y la acercaba hacia ella besándola intensamente.

Caricias, movimientos lentos, respiraciones y gemidos suaves, lenguas danzando para finalmente el beso terminar y Vanesa se alejaba.

V: Mmmmm vaya que sí tengo tu amor jejeje

M: Claro que lo tienes cariño (decía acomodándose en su pecho) Te amo.

V: Y yo (se quedaba pensando unos momentos mirando hacia el techo y finalmente decía) Pero Malú... ¿qué somos?

Malú se separaba mirándola a los ojos y frunciendo el ceño.

M: ¿Cómo?

V: Sí, ¿qué somos?

M: Pues... (miraba hacia un lado y luego a Vanesa) amantes... (Vanesa fruncía el ceño) a veces amigas... (Vanesa lo fruncía más) compañeras... (ya Vanesa soltaba aire por su nariz mirándola y Malú sonreía. Mirándola ya más seria, suspiraba y le decía) Somos pareja cariño, creo que sin duda somos novias. Claro que de momento a escondidas, pero para mí tú eres mi novia. ¿O no?

Vanesa sonreía al máximo y se volvían a besar.

En ese mismo instante tocaban la puerta y entraba alguien de improviso a aquella habitación. Vanesa tratando de levantarse rápido pero finalmente quedando a medio camino de hacerlo mientras Malú aún tenía marcado el lápiz labial de Vanesa en su boca.

Ana cerraba la puerta más que rápido mientras las miraba negando.

A: Por Dios deberíais tener más cuidado, podría haber sido cualquiera.

M: Ufff Ana, todo el mundo llama y no entra como un huracán en mi despacho.

A: ¿Y ahora soy yo la del problema? jmmm. Vanesa tu madre ha llamado diciendo que Lucía está en casa y pregunta por ti.

V: Mi niña... Ana gracias por avisarme. Malú me tengo que ir.

M: Bien (decía levantándose y tomándola por la cintura)

A: Malú por Dios...

M: ¿Pero qué pasa...? (le daba a Vanesa un pico rápido) Que llegues bien a casa, nos vemos pasado mañana.

V: Vale, tú también cuídate y no trabajes hasta tan tarde. Bueno adiós Ana, nos vemos en la entrevista.

A: Pero si yo no estaré...

V: Aaammm ¿no te dijo Malú? (Ana miraba a Malú sorprendida quien ante la expresión de la mujer simplemente echó a reír)

A: Aaaayy sois unas liantas, las dos. Ya vete, vete, que me la maleas.

V: ¿Yo? Vaya... pensé era al revés jejeje ¡Nos vemos! Por cierto Malú...

M: ¿Ajá? (decía ya sentándose)

V: Que... te amo.

Y se iba de allí rápidamente dejando a Malú con una sonrisa tonta en la cara y a Ana mirándola para luego esbozar también una sonrisa y negar.


Dos días después ya estaban listos casi todos los preparativos para la entrevista.

Los técnicos estaban probando sonido, luces y cámaras mientras Malú era maquillada. Aquello ya lo habían realizado con Hugo y Vanesa.

Una Vanesa más que nerviosa caminaba de lado a lado en el salón que habían dispuesto para la espera de ella y Hugo. Se cogía nerviosamente las manos y se arreglaba el cabello vestida con su perfecto traje de escolta ceñido al cuerpo. Llevaba un perfume afrutado y toques suaves de maquillaje. Las manos le sudaban y cada dos por tres las pasaba en sus pantalones.

Un Hugo igual de elegante sentado en un sofá la miraba y mucho más tranquilo que ella suspiraba.

H: Vanesa tranquilízate, que me terminaras poniendo nerviosos a mí.

V: Es que... es que nunca me han entrevistado, menos con cámaras...

H: Pues no es gran cosa...

V: Claro, como a él le encanta sonreír a las cámaras y decir "ahora no, gracias"

H: Es que se me han acercado cuando estoy de guardia. Pero estoy tranquilo. Además tan sólo estará la presentadora esta de las noticias y nosotros.

V: ¿Y las cámaras? ¿y las luces que hacen que uno sude? ¿Y las miles de personas que nos estarán viendo desde sus casas?

H: Vanesa basta ya ¿no?

V: Jo... me quiero fumar un cigarro.

H: Pues va a ser que no, que quedarás hedionda y darás mala impresión.

V: Joder...

H: Realmente me sorprendes, te creía con más personalidad.

V: Si la tengo, pero es que... es que me dan miedo las preguntas.

H: Pero si las vimos hace dos días y estuviste de acuerdo.

V: Aynnss ¡qué sé yo! Estoy nerviosa y punto

H: Bueno, en realidad así como te veo, creo es mejor te vayas a fumar un cigarrillo

V: Voy al jardín, luego me como un chicle.

Y así lo hacía con sus nervios disparados.

Allí estaba, dele que dele, una calada tras otra, hasta que Hugo aparecía sonriendo.

H: Vanesa apágalo, ya es la hora.

V: Joder...

H: Jajajaja

V: No te rías, mal nacido.

H: Jajajaja anda vamos.

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Continuará... :)

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