Atrapada

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Al llegar a casa solo necesite 5 minutos para estacionar y salir del auto, prácticamente corriendo, necesitaba ducharme estaba sudada, agotada y ni siquiera bailé, pero él... me hizo sentir como si corriera un maratón y solo estuvo cerca de mi rostro, no olvido cómo se acercó a paso acelerado solo para decirme que él es el mejor.

Quién demonios se creía para decirme: Eso lo veremos nena. 

Ya estoy delirando.

 Al entrar a casa, todo seguía oscuro, lo que significaba que mamá aún no llegaba, deje la camisa en la cesta de ropa sucia y me lancé en el sofá a revisar mis redes sociales para distraerme, pero al entrar en Instagram toda mi distracción se vino abajo, Tailer había subido una foto hace 10 minutos donde aparecía con Andrew y una chica abrazándolo. De repente sentí unas ganas de volver a la fiesta y quitarla de su lado.

Pero bueno te volviste loca, hace unos minutos estabas insultándolo y ahora lo quieres alejar de ella.

¡CIERRA LA BOCA!

Somos la misma persona, inteligente.

No estoy de humor para tu sarcasmo.

Lancé el teléfono al lado y subí a mi habitación dando un portazo —Creo que me va a venir el periodo he tenido muchos cambio de humor en menos de 20 minutos— Me despoje de mis jeans ajustados que me estaban asfixiando y el resto de la ropa, quedando en ropa interior cuando empezó a sonar mi teléfono, gruñí. 

— ¿ES EN SERIO? —grité a la nada y baje a la sala, ni siquiera me dispuse a ver el contacto solo conteste.— ¿Aló? ¿Hola? —nadie respondía solo se escuchaba música de fondo, cuando iba a colgar, respondieron.

— ¿Hija? soy tu madre ¿Estás ahí? —ya me empezaba a irritar.

— Sí mamá, ¿Dime?

— Cariño, ¿Cómo estás? Era para decirte que regreso mañana al mediodía, me quedaré con Pablo, te he llamado de su número porque me quede sin batería, cualquier cosa llamas aquí.

— Estoy bien, cuídate te quiero, usa protección. Buenas noches.

— ¡Brenda! —chilló a lo que reí—. Te quiero hija nos vemos mañana. —y colgó.

Sin ninguna otra interrupción subí a mi habitación, para entrar al baño. 

Deje el teléfono en la cama, me quite el resto de la ropa y entré en la ducha esperando que saliera el agua caliente, al entrar en contacto con ella me relaje bastante, me limpie y salí para mi habitación —Lo genial de mi casa es que cada habitación tenía baño propio— Busque mi pijama de flores, mis pantaletas, me vestí y me acosté en la cama.

Al cabo de unos minutos me dormí, imaginando unos ojos verdes encantadores que me observaban a través de la oscuridad.

▶◀

A la mañana siguiente me desperté por el hambre, no haber comido anoche me pasaba factura. Vi la hora en mi celular y eran las 11:42 de la mañana. No quería levantarme pero el hambre me superaba. 

Me puse mis pantuflas, fui al baño cepille mis dientes y baje al comedor luego me daría una ducha, prepare unos sandwiches con jugo de fresa mi favorito, estaba comiendo muy relajada cuando recordé que tenía que lavarle la camisa al ogro de Andrew, casi me ahogo solo de recordarlo.

Al terminar de comer, lave los platos y busque la camisa que por mi culpa ahora tenía que lavar, aproveché y metí toda mi ropa sucia junto con ella y me fui a duchar, afortunadamente todos los artefactos eran automáticos. Cuando termine de vestirme se escuchó la puerta de entrada cerrarse. 

— ¡YA LLEGUEEE! —gritó mamá, a veces se comportaba como una adolescente y tenía 36 años, pero se conservaba.

— Bendición —dije dándole un beso en la mejilla.

— Estas muy juiciosa —señaló el cuarto de lavado en el cual sonó el pitico del soflan.    

—Eh... si... yo decidí lavar un poco —dije volteando la mirada.— Debo ir a ver.

— Tranquila, yo me voy a mi cuarto debo darme una ducha —sonreí con picardía y ella se sonrojo.

Y así pasé el resto del sábado bromeando con mamá, lavando y contándonos lo del día anterior, omitiendo algunos detalles claro.

▶◀

La tarde del domingo no tenía ánimos de nada pero a mamá se le ocurrió la idea de pasar una tarde de chicas, en la cual nos pusimos mascarillas, nos pintamos las uñas y arreglamos el cabello, en la noche estábamos viendo películas de comedia cuando me llegó un mensaje de Tyler.

Tyler: ¿Pasó por ti mañana para ir al instituto?

Brenda: Claro ;)

Tyler: Paso a las 7:30, recuerda que me debes una explicación ♥. 

Deje de reír al leer lo último, había olvidado por completo esa parte y también un pequeño detalle Andrew y Tyler eran mejores amigos desde siempre.

Carajo.

¿Qué vas a hacer?

Contarle la verdad a Ty es mi mejor amigo el lo entenderá.

Si tu lo dices.

Deje de pensar y le respondí.

Brenda: Ok, Besos.

Al pasar una hora le dije a mamá que iría a acostarme que Tyler vendría por mi mañana. Ella como buena madre dijo.

— Creo que deberías conseguirte un novio tu mejor amigo no puede venir por ti todo el tiempo. —enrojecí y grite. 

— ¿MAMÁ PERO QUÉ DICES? Mejor sigue comiendo palomitas, buenas noches. —se rió y gritó.

— Buenas noches hija.

Después de eso puse mi alarma y una nota diciendo que tenía que llevarle la camisa a Andrew alias "Ogro".

No se porque al pensar en las palabras de mamá pensé en Andrew ignore ese pensamiento y me dormir, Imaginando los mismos ojos verdes, los cuales tenían dos noches atormentándome.