Me gustas, ¿cómo te lo digo?

Parálisis del sueño

Miedo, pánico, temor, o cómo quieras llamarle.
Miles de pensamientos.
Sonidos, voces, ruidos.
Alucinaciones, luces, soñar despierto.
Miedo a la muerte.
Alguien te observa y se acerca, lentamente, a tu cama. Te sostiene, fuertemente, no te deja escapar. Quiere hacerte daño.
Tu respiración se acelera, la vista se te nubla y tu corazón va a mil.
Sientes presión en el pecho, escuchas cosas horribles y las que ves son aún peor.
Quieres moverte y no puedes; como mucho mueves un dedo o dos.
Tratas de liberarte, moverte, despertarte.
Puedes ver tu cuarto y, aunque lo reconoces, todo te da miedo.
Quieres gritar, parece que puedes, pero ni un sonido sale de tu boca.
Te desesperas, quieres escapar.
Hasta que por fin puedes moverte. Por suerte logras despertar.
Pero tienes miedo de volver a dormir.
Sientes que la muerte te acecha.
Y el temor es tan grande que no duermes hasta sentirte seguro.