De una charla común y corriente pasamos a una más íntima e interesante. Nada más imperfecto que una charla así, en medio de una estación del subterráneo, rodeados de extraños, que van y vienen, con preocupaciones, apuros en hora pico.
- Yo di mi primer beso a los 19 años-dije.
- Yo lo di... emm- hizo un gesto con sus dedos, como si cerrara su boca con llave, y guardara la llave imaginaria en su bolsillo, mientas miraba hacia otro lado.
No quiso hablar del tema. Me quedé con la duda. Ahora no sé si lo dio o no.
- Yo soy de esas personas que piensan que un beso es especial, que no se le da a cualquiera-dije.
- Yo antes pensaba que un beso no se le negaba a nadie. Pero claro, no lo aplicaba. Ahora ya no pienso así.
Tenía ganas de besarte, de averiguar si era la primera en probar tus labios. Robarte un beso, darte el primero de muchos y comenzar así nuestra historia.
Allí, en la estación del subte, debajo de la tierra, debajo de una gran ciudad.
Besarte en ese lugar, a metros por debajo del suelo pero sentirnos muy alto en el cielo.
Lo convertiríamos en un lugar especial.
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Me gustas, ¿cómo te lo digo?
PoetryUn nuevo amor apareció en su vida. Ella no se anima a decirle lo que siente. Pero le escribe poesías casi todos los días.
