Are Tears | Yoonmin [Segunda Parte]

#16

La rubia estaba viendo como el hombre caminaba de un lado al otro. De pronto una silueta entró por la puerta del palacio, estaba jadeando con fuerza y parecía cansado. Como si hubiera visto un fantasma –Aunque eso era lo que exactamente vio–.

—Señor.— Llamó el hombre al frente de Miyeon y Chanyeol. —El fantasma... A sido liberado.— Chanyeol abrió los ojos como platos. Miyeon se alejó tomando una vasija atrapa fantasmas. Sintió la presión de una mirada pesada tras ella, como era de esperarse, Chanyeol le arrebató la vasija y fue hasta alguna de las alas.

Miyeon suspira pesado y ve al hombre castaño a un lado, luce bastante cansado al igual que ella, pues el plan que ideaba Chanyeol no era de agradarle a todo el mundo.

Jimin era alguien bastante adorable como para pensar que es un vampiro, pero tras ese cabello rubio y rostro angelical se ocultaban unos largos colmillos y un hambre del infierno. Jimin era capaz de ir a las aldeas humanas y dejar cadáveres con el cuello perforado. No conocía las consecuencias, con alguien como Yoongi a su lado, nadie conocía los efectos secundarios. Incluso nadie pensaría que ese peliblanco de mirada fria lo hubiera convertido para salvarlo.

Ahora con Chanyeol todo era diferente. De tanta hambruna que pasaba casi lo cazan. Comía muy poco, decía que las reservas de sangre debían resguardarse. Hasta había pensado en conventirse en un vampiro caníbal.

(Mi mamá no ha hecho almuerzo ;-; i need food, i thinkin to be a vampire and eat my classmate okno deja de parecer gringa Stephania Catalina, y no, no es mi nombre real xd)

El plan de que mataras al rey solamente para quedarte con su esposo era cruel y despiadado. Aunque hacerlo sufrir era aún más cruel, era de un mounstro hacer eso.

Seolhyun atrapó el fantasma de nuevo en el espejo y lo vio encontrando a su padre. Sonrió al ver el asentimiento del peliblanco.

—¿Lo hice bien?— preguntó la chica con un tono ilusionado su padre rió y asintió de nuevo.

—Lo hiciste bien.— Se escuchó unos pasos a lo que Seolhyun ocultó el espejo. Nada ni nadie había entrado a donde estaba ella. Cuando sintió los pasos alejarse sacó de nuevo el espejo. Yoongi tenía una mala mirada, observaba como podía la puerta. Presentía que era Chanyeol quien lo buscaba. Tenía suerte de que no pudiera visualizar los rastros de plasma.

Aunque... ¿Quién podía verlos? No estaba muy seguro de que alguien pudiera ver los rastros que deja un fantasma, decían que era un mito.

—No te vio, es buena señal.— susurró el vampiro aún con su mala cara. Seolhyun miró también la puerta. —Si te descubre... Moriré completamente.— Seol lo miró de insofacto. —Él no conoce la forma de matarme totalmente... Pero su esposa sí.

—¿Esposa?— preguntó confundida.

—Hwasa.— afirmó y Seolhyun se asustó. —¿Te sucede algo?

—Ella... Creo que es mi madre...— suspiró y desvió su mirada a otro lado. Yoongi no podía imaginar eso...

Primero a su esposo y ahora su hija.

Si Hwasa era su madre...

—Entonces tu padre biológico es... Chanyeol...

La expresión de temor de Seolhyun se hizo presente.

Chanyeol caminó sin encontrar rastro del fantasma, suspuso que le había mentido, aún con la vasija en manos siguió su camino  y chocó con algo de metal.

El hechicero...

No estaba seguro de lo que iba a hacer, revisó la vasija para ver si estaba lo que necesitaba. Tomó algunos granos de polvo azul y los soplo frente a la estatua. Por la posición en la que se encontraba, el castaño cayó al piso dando un grito.