Capitulo 54:

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- Procura ponerte un sostén un poco más grande cariño...- dijo Molly, la hermana de Ethan.

Ambos eran pelirrojos y extremadamente pálidos.

Algo asi como pequeños fósforos.

Salí del baño solo con jeans y el sostén 4 tallas más grande que habiamos comprado el día anterior.

Vio con cierta incomodidad las cicatrices en mi estómago y en el costado de mi cuerpo por unos segundos.

Pero no dijo nada.

Y aprecie que no lo hiciera.

Tomo algunas de las pequeñas bolsitas y comenzo a meterlas dentro.

- Crees que funcionara?..- pregunte algo confundida.

- Haremos que parezcan naturales cariño, tú solo dejame a mi.- continuó haciendo su tarea mientras yo pensaba en por qué rayos se me había ocurrido aquello.

Y si los policias notaban que eran pechos falsos?

Si alguna pequeña bolsa se caia justo en el cacheo?

Suspire y trate de relajarme.

- Y... Cómo de supone que James mete la droga?..- pregunte para cambiar de tema.

- Es genial escondiéndola, aunque es difícil sacarla a la hora de venderla...- recorde un par de documentales sobre narcotraficantes que habia visto en National Geographic y no pude evitar hacer cierta cara de sorpresa.

- Oh no! No se la mete en el culo si es lo que estas pensando! Me referia a que la esconde en los cinturones, debajo de los zapatos, incluso en las costuras de su linda chaqueta negra...- vi cierto brillo en los ojos de Molly.

Me resultaba familiar.

Al parecer ella sentía algo por James.

Habia llegado el momento.

Sentia cierta presión en el pecho.

Era una mezcla de nervios, exitacion y también el hecho de que Molly habia apretado mucho la cinta adhesiva.

Suspire como pude y me acerque a James y Ethan, ya que ellos habian decidido formarse para entrar mucho antes.

- Hola...- dije cuando ya estuve junto a ellos.

La mandibula de Ethan de desencajo en cuanto vio el frente de mi camiseta.
- Mierda, pero si parecen reales! - grito mientras sostenia el brazo de James.

- Te vez sexy. Solo dire eso.- reí mientras golpeaba su brazo.

Molly habia decido ponerme una camiseta de Oasis, un par de Jeans ajustados, mis viejas botas y un pañuelo en el cuello.

"Solo cubrete un poco el rostro, asi no sabran quien les vende." Habia dicho al momento de ajustarlo.

Y agradecía tenerlo, ya que ocultaba lo rojas que se me habian puesto las mejillas al escuchar los estúpidos cumplidos.

Mis nervios aumentaban proporcionalmente conforme la fila disminuia.

Y entonces sucedió.

- Señorita, abra su mochila, apoyese contra la valla y separe un poco las piernas.- dijo el uniformado.

- Bien... Yo...- sudaba excesivamente mientras obedecia, James gesticulo "relajate" y de veras trate de hacerlo, pero en cuanto lo sentí tocar mi torso no pude evitar contener la respiración.

- Buenas tetas...- susurro para que solo yo pudiera oirlo.

Sonreí internamente.

Se lo habia creido.

Under the Skin (Matt Healy)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora