Agradable Rato

159 24 17
                                    

ஜ۩۞۩ஜ

Cuando salió de su habitación hizo todo lo posible para no encontrarse con el peli-rojo, se le hacía imposible poder mirarlo a la cara después de decirle la verdad, pero no se arrepentía de nada.
Tampoco es como si estuviera buscando la aprobación del padre de la peli-mostaza, realmente no le importaba su opinión. A lo único que le temía es que siguiera de terco con quererlo casar con Kaori.

Suspiró aliviado al no verlo en algún rincón de su hogar, eso quería decir que podía pasar la tarde totalmente tranquilo, pues, aunque era algo curioso; no le apetecía hacer nada ese día.

•❅──────✧✦✧──────❅•

Estaba acostado en el suave césped, mirando como las nubes se movían con lentitud, sólo faltaba la agradable presencia de sus amigos.
Cerró los ojos por un momento, podía escuchar a las aves cantar y las risas de los niños. Sonrió inconscientemente al recordar como Rantaro había sido golpeado varias veces por aquella linda niña.

¿Qué te causa gracia?—abrió los ojos de golpe, pero se sintió feliz de ver al azabache.

No es nada—rió un poco mientras negaba con la cabeza.

Se recostó a un lado del rubio, ambos chicos tenían una sonrisa dibujada en el rostro, se sentían bien con la compañía del otro; pues ambos buscaban relajarse aunque sea un poco.
A lo lejos se iba acercando un chico de cabellos castaños, ya había quedado de verse con el peli-negro, pero realmente no contaban con la presencia de el de orbes azules. No les molestaba en absoluto, de hecho, ya extrañaban hablar con él.

¿Ya no necesitas ayuda?—preguntó Hoji mirando a su amigo.

Daigo miró a Wakiya esperando su respuesta, debía saber si no tenía que buscar a Silas y darle un fuerte golpe con un bate.
Wakiya negó con la cabeza, por el momento no la necesitaba, pero sabía que si algo pasaba, ellos serían los primeros en saber.

De hecho, las cosas están yendo bien—dijo mientras se incorporaba de nuevo para poder quedar sentado—Aunque trataron de hacer que empezara a salir con una chica para luego casarme con ella

Los otros dos chicos se quedaron atónitos, preguntándose si se habían perdido de mucho.
Se sintieron orgullosos de su amigo por haber encontrado una manera de impedir que al final se casara con una persona que no ama.
Se quedaron callados al no se saber de que más hablar, pero después el castaño y el rubio parpadearon mil veces al ver que Daigo se había caído. No porque él quisiera, sino que algo, más bien, alguien se le había lanzado encima.

¡Sueltame, Valt!—grito el azabache cuando se dio cuenta de que el peli-azul lo estaba abrazando—Me asfixias

Lo vas a matar—susurró Rantaro acercándose a ambos para separarlos—Ni a mi me abrazas así

El peli-azul se rascó la nuca y rió nerviosamente para después disculparse con Daigo por casi ahogarlo.

Oye, Silas se quedo atrás—musitó Valt dirigiéndose hacia Wakiya—No tarda en venir

Ahora si podre golpearlo con un bate—dijo Daigo con una sonrisa, a lo que todos lo miraron preguntándole el porque—Se lo merece por asustar a Wakiya con la broma que le hizo

¿Cuándo paso eso?—preguntaron los otros con cierta confusión.

¿En serio no lo recuerdan?—negaron con la cabeza después de escuchar aquella pregunta—En el capítulo 22, ¿Qué acaso nadie pone atención?

Decidieron ignorar lo último que dijo Daigo porque empezaron a creer que el chico estaba delirando. Aunque no negaban el hecho de que después checarían si era cierto.

•❅──────✧✦✧──────❅•

¿Por qué a veces te quedas callado cuando te dejan conmigo?—preguntó el peli-verde, quien caminaba sin rumbo fijo con el rubio.

Es que siento que el corazón se me va a salir con tan sólo mirarte—confesó en un susurro.

El contrario sonrió con ternura y se acercó para abrazarlo, ese chico siempre será su mundo entero, sentía que todo dejaba de existir cuando estaba a su lado.
Desde que lo vio supo que él era el indicado, por eso había arriesgado todo. Por estar a su lado.

Siempre me pareció tierno que te sonrojes cuando te miro o te hablo

Yo nunca hago eso—se quejó el oji-azul mientras negaba con la cabeza.

¿No?—pregunto Silas mientras se reía—¿Entonces siempre te da fiebre?

Algún día yo haré que te sonrojes

El peli-verde comenzó a reírse cada vez más, dudaba que el rubio pudiera hacer eso.
Siguieron caminando mientras reían de cualquier cosa, el rubio se detuvo, ya tenía pensado como sonrojarlo; pero sabía que el también lo haría porque nunca le había dicho esas dos palabras de cinco letras y que muchos catalogaban como una mentira.
Trago saliva con un poco de nerviosismo, miró a su novio y tomó su mano.

Te amo, Silas—susurró con el rostro todo rojo como un tomate.

Wakiya—susurró el nombre del contrario con una sonrisa impregnada en su rostro—Yo también me amo

¡Agh! ¡Ya no te lo volveré a decir!—gritó el oji-azul al ver como el peli-verde se reía de su reacción.

Realmente esperaba otra respuesta de parte de Silas, no esperaba que arruinara el momento con tremenda tontería. Comenzaba a pensar que el que pasara tiempo con Rantaro y Valt comenzó a afectarle, pero ya vería como se vengaría de ellos.
Ahora le tocaba encargarse de Silas.

★═══¿Por qué te amo tanto?═══★

Pensé que no lo acabaría qwq.
No tengo nada más que agregar, sólo espero que les haya gustado, nos vemos luego, descansan y se cuidan >:v9.
Bye :3

¿Por Qué Te Amo Tanto? ||Siswaki||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora