CAPÍTULO 09.

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                                                    LANA. 

Cuando Devon detiene el auto miro de inmediato hacia la ventana, trago con dificultad, es un gran edificio, parpadeo algunas veces, observó como Devon baja del auto, imitó su acción y abro la puerta, pero Devon corre y me ayuda a bajar, elevó mi ceja, al menos tiene modales. 

-Puedo ser un caballero cuando quiero muñeca- Murmura elevando sus labios de medio lado en una sonrisa arrogante, aprieto mis labios. 

El cierra la puerta y me sorprendo cuando me empuja contra ella, abro mis ojos y elevó mi rostro buscando su mirada, el coloca sus manos en mi cintura, su rostro baja a la altura de mi rostro, mi cuerpo se tensa y aparto mi mirada, este tipo no sabe lo que es el espacio personal. 

Los latidos en mi pecho se comienzan a acelerar, Devon toma con su mano mi barbilla y me hace mirarlo, el eleva su ceja mientras mira mis labios, trato con dificultad. 

-Es una lastima que no quieras tener sexo conmigo- Susurra, contengo mi respiración ante sus palabras, el acerca más su rostro al mio, cierro mis ojos al sentir su respiración en mi mejilla - Puedo ser un cabellero Lana, disfrutarás mucho conmigo- Gruñe en voz baja, cierro mis ojos unos segundos y los abro. 

-Señor Kozlov, no voy a cambiar de opinión- Murmuro con voz temblorosa, me estremeció cuando su cuerpo se junta más con el mio. 

-Eso lo veremos muñequita- Susurra enviando escalofríos a mi cuerpo -No me llames señor Kozlov nunca más, dime Devon, es una orden- Agrega con más seriedad, aprieto mis labios y asiento. 

-No quiero verte hablando con otras personas allá adentro- Murmura con voz ronca, frunzo levemente y ceño y lo miro  confundida -Solo eres mi acompañante, nada más, si te veo hablando con alguien me voy a enfadar, y no te gustara ver eso muñequita- Dice con advertencia -¿Entendiste?- Gruñe ejerciendo más fuerza en su agarre en mi barbilla, hago un gesto y asiento, el sonríe de medio lado y me suelta. 

Llevo mi mano a mi barbilla, duele un poco, aprieto mis labios molesta por su forma de tratarme, el se aleja unos cuantos pasos y me acrecentar su brazo para entrar juntos, lo miro con seriedad, su ceja se eleva al notar que no quiero aceptar su brazo, suspiro y me acerco, el entrelaza mi brazo con el suyo y caminamos al interior del edificio. 

.... 

Una vez que llegamos al piso indicado, unas puertas dobles amplias se abren dándonos pasos, ingresamos al gran salón, hay varias personas pero no muchas como esperaba, volteo mi mirada y abro mis ojos al ver como dos hombre son los que cierran nuevamente las puertas, pero lo que realmente llama mi atención son las grandes armas que cargar. 

Trago con dificultad confundida, mi cuerpo se tensa y eso parece llamar la atención de Devon, este detiene sus pasos y me mira. 

-Ya sabés, nada de hablar con nadie, ni preguntarle nada a nadie, no sabes lo que podría hacerte si llegas a desobe-

-Lo sé, entiendo las reglas- Murmuró interrumpiendolo, observó como suspira, su mandíbula se tensa, él suelta nuestros brazos entrelazados y envuelve mi cintura, atrayendome a su cuerpo y mirándome con expresión fría. 

-Odio que me interrumpan cuando estoy hablando, muñequita- Dice entre dientes lo último, mi respiración se acelera cuando él inclina su rostro y con la punta de su nariz rosa mi cuello, siento su respiración, cierro mis ojos tensa. 

-Mi buen socio Devon Kozlov- La voz gruesa de un hombre hace que Devon se separe de mi, suspiro con alivio, pero el miedo me invade al ver el hombre frente a nosotros. 

Este es un hombre mayor, con una cicatriz que atraviesa su ojo, trago con dificultad y me acerco mas a Devon como por instinto, Devon se encuentra tenso mirando al hombre. 

-¿Socio?- Pregunta con arrogancia, el hombre sonríe de medio lado y asiente, Devon pasa una mano por su cabello -Pensé que nuestros negocios había terminado cuando enviaste a esos hombres a asesinarme- Murmura con tranquilidad, pero noto el enojo en su voz. 

Abro mis ojos sin poder evitarlo, este hombre fue el que envió a asesinar a Devon, por él fue que casi muere, o fue en otro momento, que clase de negocios son estos para que puedan enviar a asesinar a alguien. 

-Pero que mal educado soy- Dice el hombre mayor fingiendo estar avergonzado, su mirada se posa en mi y de inmediato las alarmas dentro de mi se disparan -¿Esta gatita es tu nueva adquisición?- Le pregunta a Devon. 

Parpadeo y frunzo levemente mi ceño por la forma en la que se refirió a mi, Devon toma mi cintura sin apartar la mirada del hombre. 

-¿No me piensas dejarme jugar con tu gatita nueva?- Le pregunta a Devon, su mirada ya no es de diversión, ahora es fría, Devon se tensa, el miedo me invade cuando no responde, elevó mi mirada buscando su mirada. 

-Señor, éste hombre quizo pasarse de listo llamando a los federales- Avisa un chico  llegando hasta el hombre mayor, abro mis ojos aturdida, observó como dos hombres más sostiene a uno golpeado. 

Parpadeo varias veces y asustada retroceso un par de pasos pero el agarre de Devon en mi cintura no me deja, lo miro asustada, pero el mantiene su mirada fría sobre el hombre. 

-Haber muchachos, están llamando la atención de los invitados- Murmura el hombre mayor de forma tranquila -Ya saben que hacer, largo- Añade, los hombres se retiran llevandise al hombre golpeado. 

El hombre mayor mira a Devon, sonríe de medio lado y se retira, el miedo me invade, que es todo esto, en donde estoy metida. 

-¿Porque golpearon a ese hombre por querer llamar a los federales?- Pregunto con voz temblorosa, Devon tensa su mandíbula, me mira, sus ojos marrones llenos de frialdad. 

-Mientras menos sepas, será mejor para ti muñeca- Murmura con voz ronca, frunzo levemente mi ceño mirándola -No querrás terminar peor que ese hombre, sería una lástima para este lindo rostro- Susurra acariciando mi mejilla, mis ojos se abren con asombro.

Mi mirada recorre el salón, una idea comienza a formarse, trago con dificultad, mi mirada se dirijo a los que se encuentran en las puertas, bajo a sus grandes armas, mi respiración comienza a agitarse. 

-No, no me siento bien- Susurro, Devon eleva su ceja, una sonrisa burlista cruza su rostro. 

-Tranquila muñequita, mientras estés conmigo, nada te sucederá- Dice suavemente, miro su rostro, su mirada siniestra forma un nudo en mi vientre -Así que será mejor, que seas una buena chica- Añade con una sonrisa de medio lado. 

Entre abro mis labios, el se inclina y deja un besa suave y rápido en mis labios, su mano acaricia mi cintura, me estremezco ante esta situación, estoy en manos de alguien peligroso, de eso estoy segura. 


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Nuevo capitulo ♥️

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SUGAR BABY (MAFIA 1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora