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 — Así que la familia Jeon y la tuya tendrán una excelente relación—Hoseok acariciaba los pétalos de la flor entre sus manos, YoonGi estaba sentado a su lado, se encontraban en el bosque alejados de los demás. El par tenía una amistad algo extraña, YoonGi había descubierto con el tiempo que Jung Hoseok le gustaba y no exactamente como amigo, le gustaba como algo más, a Hobi le parecía encantador algunas veces pero la diferencia es que a él no le gustaban los hombres, aquello podía ser tóxico porque a pesar de haber compartido besos y caricias (más no la cama) Hoseok no se esforzaba por aclarar sus sentimientos respecto al tema, dejaba que Min YoonGi siguiera haciéndose ilusiones, lo doloroso era que frente a los demás actuaban como si nada.

— Espero que JungKook la trate bien—comentó en voz baja.

— Oye, creo que Kannie se defenderá bien, al fin y al cabo, ha dejado en claro que puede hacerlo sola—lo empujó suavemente colocándole la flor en su oreja. Éste lo miró con cara de pocos amigos haciéndole reír, YoonGi sonrió apenas sin muchas ganas— ¿Sabes? He notado que mi padre está algo raro.

— ¿A qué te refieres? —frunció el ceño el pelirrojo.

— No luce muy contento por la elección de JungKook.

— Bueno...—Hoseok buscó alguna solución antes de hablar—Kannie es su única hija, es la menor, es obvio que tenga algo de dudas o temor...

— Él realmente estaba muy tenso el día de la ceremonia—miró al chico—Parecía preocupado por algo, no sé si mi madre lo notó, pero yo sí y créeme cuando te digo que papá no lucía cómodo.

— Estás preocupándote por nada—acarició su mejilla—Hasta que la boda no ocurra todo será un caos.

YoonGi no estaba satisfecho con eso, pero no puso objeciones cuando el pelirrojo besó sus labios para calmarlo...o quizás era para callarlo.

[...]

Min YoonHee esperaba en la cafetería acordada, miraba por la ventana mordiendo su labio mientras su pierna se movía nerviosamente. La verdad es que él estaba inquieto, estaba preocupado por lo que venía. Respiró profundo esforzándose por mantener la calma, él era el hombre de la casa, el hombre de familia, debía calmarse y pensar con la cabeza en frío. Una mujer mayor pero que se conservaba se acercó a su mesa, él supo quién era no por el olor sino por sus recuerdos de infancia.

— Tía Youra—hizo una pequeña reverencia al levantarse.

— Nunca cambias, YoonHee—sonrió dulcemente acomodando su cabello oscuro—Vine en cuanto recibí tu mensaje—tomaron asiento.

— Hace unos años me dijiste que tendríamos una niña—comentó sin perder el tiempo—Lo dijiste cuando me casé con Hea.

— Lo recuerdo—asintió mirándolo—Tiempo después tuvieron al pequeño YoonGi y...

— Luego llegó Kannie.

— ¿Está dándote problemas? —frunció el ceño.

— Tía, usted dijo que en la familia había una maldición—volvió a sonar preocupado y lo estaba—Dijo que mi madre era una loba como ella.

La última vez que el señor Min había visto a su tía fue exactamente el día de su boda. YoonHee se había acostumbrado a hacer las cosas por su cuenta y se había dicho así mismo que si comenzaría su vida de casado sería en una nueva casa y a solas con su esposa.

— ¿Me escribiste para hablar sobre tu familia?

Y sonaba estúpido si lo decía así.

— Jeon JungKook es el hijo de Jeon JungHee—miró sus manos—Ascendió al puesto de alfa por ser su hijo y escogió a mi hija para ser su esposa, Kannie es una loba, es licántropo como YoonGi y como yo, recuerdo perfectamente lo que dijiste sobre las mujeres lobo en la familia—lo miró—Si ella llega a consumar su unión con ese muchacho morirá.

Aquí era donde él se sentía mal por mentirle a su propia esposa. Cuando Kannie nació fingió no saber porque ella era loba, por parte de su familia venía una gran generación de mujeres lobunas, realmente el señor Min no había sido abandonado por sus padres, él vivió con sus tíos porque cuando su madre lo tuvo falleció y el hombre que sería su padre intentó asesinarlo al descubrir que sería un licántropo como su madre. Por eso las mujeres en su familia viven una mentira, Kannie no es la primera loba, hay más como ellas.

Youra negó con la cabeza lentamente.

— Su maldición se activa si llega a consumarse, si ella le da un hijo a ese alfa morirá. Con el tiempo irá sintiéndose enferma y débil, el embarazo es lo que acelera su condena.

YoonHee pasó sus manos por el cabello, rascó su cabeza negándose a perder a su hija.

— Ella es mi hija, ella es lo más importante que tengo en mi vida, tía—susurró recordando cuando la tuvo en brazos por primera vez—Ella no tuvo culpa de haber nacido así.

Su tía Youra nunca se había casado ni había tenido hijos por la misma razón. El matrimonio era una condena y el embarazo era la muerte. Así era la maldición, Youra tenía una lista mental de muchas mujeres que fallecieron por ello, parecía absurdo, pero no lo era porque una vez que se enamoraban era difícil detenerse y no hacer cualquier cosa por esa persona que amaban.

El señor Min tenía miedo porque él recordaba perfectamente cuando una pequeña Kannie de cuatro años llegó de la escuela diciéndole que Jeon JungKook le gustaba y era su esposo. Irónico que años después eso vaya a pasar.

Por eso él era tan rudo con ella y por eso no le gustaba que ningún muchacho esté cerca de su hija.

•••

Esto es sólo una pequeña explicación de lo que podría pasar 😏 Ya saben que soy espontánea a la hora de escribir, no tengo nada planeado, todo viene solo.

• Cry Wolf • [JEON JUNGKOOK] COMPLETADonde viven las historias. Descúbrelo ahora