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YuGyeom despertó encontrándose en una habitación llena de polvo, afuera había anochecido, además, no estaba solo, frente a él estaba Min YoonGi y cerca de la puerta estaba YuQi. El pelinegro fue despertando también descubriendo que tenía sus tobillos y manos atadas, ambos chicos intercambiaron una mirada.

— ¿Dónde está Kannie?

— ¿Qué haces aquí? —quiso saber—Debías estar con YoungJae y...

— No recuerdo muy bien, de repente nos atacaron en un segundo y.... ¿Qué se supone que haces aquí? —YoonGi miró a YuQi quien estaba atada como ellos— ¿Qué hace ella aquí?

— Esa chica nos ha ayudado un poco—contestó—Y lo último que recuerdo fue haber bebido un té que me dejó inconsciente.

YoonGi volvió a mirar al chico frente a él.

— ¿Kannie está bien?

— Eso creo—movió sus manos consiguiendo aquellas sogas muy apretadas— ¿Alguien más vino contigo?

Aquella corta conversación se vio interrumpida por una mujer de rasgos maduros. Podría tener unos treinta y algo, no iba sola, estaba con un hombre muy conocido para YuGyeom y poco familiar para YoonGi.

— ¿Papá?

— Qué bueno que hayas despertado, hijo—entró a la habitación—Que ambos hayan despertado.

— ¿Señor Kim? ¿Usted...?

— Tu hermana está en el sótano con los demás, no creo que quieras verla después de lo que hizo—miró a su hijo—YuGyeom, necesitaré de tu ayuda.

— ¿Qué? —miró a la mujer desatarlo— ¿Qué está pasando? ¿Cómo que Kannie está abajo? ¿Los demás...?

— Toda la manada está esperando—sonrió un poco—Bueno, serían los catorce chicos, pero considerando que JungKook asesinó a Hoseok, son trece.

— ¿Qué dijo? —YoonGi lo miró perplejo y YuGyeom guardó silencio. Él ya sabía eso, pero... ¿Cómo su padre sabía todo eso? ¿Qué estaba pasando?

— Verás, Min YoonGi—se cruzó de brazos—Tu hermana sabía la identidad del asesino, ella sabía que era Jeon JungKook quien apuñaló a tu chico—YuGyeom notó que el chico estaba en completo shock—Jung Hoseok no murió por las brujas, fue él quien lo asesinó.

— YoonGi...

— Necesito ver a mi hermana—dijo con voz muy grave.

— Con gusto te llevarán allí.

— Pero...

— Necesito hablar contigo mientras—advirtió a su hijo.

[...]

— ¿Estás bien? —preguntó Kannie. JungKook miró la cadena aferrada a su tobillo, era de plata y le quemaba al moverse, todos la tenían.

— Sobreviviré.

— Así que estamos aquí por tu culpa como siempre—escuchó decir a Jackson.

— El padre de YuGyeom es el verdadero culpable—corrigió Mark.

— Entonces... ¿Significa que uno de nosotros cometió traición después de todo? —NamJoon parecía confuso.

— No me sorprendería si el padre de Hoseok hubiera sido el culpable...—comenzó a decir SeokJin.

— Lo importante aquí es sacarlos, si siguen hablando tonterías los dejaré aquí.

— Kannie—JungKook reprochó con dulzura. De su pierna seguía saliendo sangre y en su cuerpo había algunas heridas de golpes, además la cadena lo debilitaba el doble—Ellos son tu manada también.

— Lo sé—suspiró. Todos guardaron silencio cuando YoonGi fue quien apareció solo, Kannie se levantó del suelo corriendo hacia su hermano para abrazarlo, pero éste gruñó.

—No me toques.

— YoonGi...

— No puedo creer que...—bufó rodando los ojos—Dime algo, ¿Alguna vez me has mentido? —Kannie no sabía a qué venía esa pregunta, pero su consciencia se lo hizo saber. Retrocedió lentamente con todos los lobos mirando la escena, incluyendo a JungKook-Te hice una pregunta.

— ¿Qué te sucede, YoonGi? —TaeHyung intentó llamar su atención, pero no funcionó.

— Oppa...

— ¡Tú lo sabías! Joder, Kannie, lo sabías y me mentiste—acusó acercándose aún. Su hermana se quedó quieta al notar un color verdoso en su mirada, conocía ese color, era el mismo que ShuShua y YuQi solían tener.

Sabía que el padre de YuGyeom le había contado la verdad.

— Estabas muy mal en ese momento...

— Ellos no lo saben—dijo y no era una pregunta. Los miró a cada uno deteniéndose en JungKook finalmente—Todos aquí deben saber que Jeon JungKook, nuestro gran alfa fue quien apuñaló a Jung Hoseok—los rostros sorprendidos se dejaron ver—Él lo asesinó y Min Kannie, mi linda hermana...lo encubrió.

— ¡Eso no fue así!

— ¡No te atrevas a mentirme de nuevo! —la tomó del cuello alertando a los demás. YoonGi jamás lastimaría a su hermana, pero su actitud dejaba demostrar lo contrario, Kannie fue consciente de que sus ojos se volvían más verdes aún—Lo sabías.

— YoonGi, suéltala.

— No hagas esto.

— No eres así.

Los chicos comenzaron a hablarle intentando calmarle, pero sólo una voz causó el silencio allí.

— Fui yo quien lo hizo, Kannie no es culpable de nada, si guardó silencio fue porque yo se lo pedí—JungKook estaba sentado en el suelo con su espalda recostada de la pared, YoonGi soltó a Kannie y ésta tosió recuperando el aire—Una loba me hipnotizó, hizo que lo lastimara, Hoseok iba a asesinarme porque su padre se lo ordenó.

— Hoseok no era capaz de lastimar a nadie.

JungKook notó el color de su mirada al igual que el resto. ¿Acaso Min YoonGi tenía magia corriendo por sus venas? ¿Existían los brujos? Si fuera así sería el primer caso, no, realmente sería el segundo lobo brujo porque el primero fue aquel que creó la maldición de las mujeres.

— Él te golpeaba, YoonGi—intentó hacerle entender mientras Kannie se recuperaba—Hoseok no te quería de la forma que tú lo hacías, lo sabes, no sigas negando la verdad, tú también te has mentido a ti mismo.

— Tú lo asesinaste—apuntó. JungKook comenzó a toser sintiendo que su corazón se detenía, Kannie preocupada lo miró.

— YoonGi detente.

— ¿Qué está haciendo? —uno de los chicos habló preocupado.

— ¡Oppa detente! —pidió golpeando su pecho. JungKook estaba rojo por la falta de oxígeno, por suerte, se escucharon pasos ir al sótano y la escena se vio interrumpida. YuGyeom estaba allí con su padre y el señor Kim sonreía orgulloso, sabía que después de esa confesión Min YoonGi aceptaría acabar con la vida de JungKook.

Eso quería el padre de YuGyeom, no ensuciar sus manos ni las de su hijo y dejar que alguien más lo haga. Su plan estaba saliendo a la perfección hasta el momento.

•••

¡Capítulos finales!

• Cry Wolf • [JEON JUNGKOOK] COMPLETADonde viven las historias. Descúbrelo ahora