• Cry Wolf • [JEON JUNGKOOK] COMPLETA

•[007]•

 — Lo siento, disculpe profesor—el joven Jeon hizo una reverencia teniendo sus manos unidas detrás de su espalda—En dirección necesitan a Min Kannie.

Todos miraron a la chica con cierto interés y ésta se sorprendió. ¿La buscaban en dirección? ¿Ahora que había hecho? ¿Qué mentira le habían dicho a ese hombre? YuGyeom que estaba junto a ella la miró levantarse y salir en compañía de JungKook. Kannie caminó detrás de éste manteniendo distancia, miró sus Converse negras mientras avanzaba sin poner atención al camino, por eso el chico tomó ventaja de que los pasillos estaban vacíos y la llevó a un cuarto pequeño donde se encontraban los productos de limpieza, la luz estaba apagada, era muy estrecho el lugar.

— ¿Qué demon...? —Kannie giró sobre sus talones escuchando como el chico colocaba seguro a la puerta— ¿Estás loco?

— Hablemos un momento—exigió serio cruzándose de brazos. La chaqueta de cuero que llevaba marcaba sus brazos aún más.

— ¿Qué? No, debo ir a clase...

— No saldrás de aquí—levantó una de sus cejas.

— Ash, tú enserio eres idiota, quítate-advirtió.

— ¿Por qué siempre huyes cuando estoy contigo? No haces eso con tu amigo.

Kannie no necesitaba saber que JungKook se refería a YuGyeom, lo empujó a la pared sin problema, la espalda ancha del chico se golpeó con ésta, intentó quitar el seguro, pero JungKook la acorraló contra la pared presionándola con su cuerpo y Kannie fue astuta golpeando su punto débil con su rodilla, lo escuchó maldecir entre dientes cayendo de rodillas frente a ella. Sonrió divertida mirándolo.

— Lo siento, no soy como las perras que te siguen.

Aunque estaba muriendo de dolor con sus manos allí protegiéndose un poco tarde, gruñó hartándose, jaló la pierna de la chica haciéndole caer al suelo, ésta se golpeó el trasero con el suelo y cuando iba a golpearlo tomó fuertemente sus manos mirándola fijamente. Sus ojos oscuros le advertían que se calmara, pero Kannie era de llevar siempre la contraria, siguió intentando abrir la puerta, aunque sea gateando, pero Kook no quería ser rudo con ella, en medio de esos forcejeos rompieron el pomo de la puerta.

— Ay, no—intentó abrir— ¡Ayuda! ¡Oigan! —golpeó con fuerza.

— Pierdes tu tiempo, estas puertas son a prueba de lobos—bufó.

— Es tu culpa—golpeó su brazo.

— No, ¡Es tu culpa! Yo sólo vine a hablar contigo—acusó—Cada vez que lo intento huyes como una maldita cobarde o como si me tuvieras miedo, ¡Soy yo quien siempre está mirándote!

Kannie apretó sus puños con fuerza, su respiración se volvió agitada y JungKook temía que ella pudiera cambiar de forma allí en ese cuarto pequeño, algunas veces la ira era el detonante, Kannie era más probable que cambiara con sus estados de ánimos. Miró alrededor pensando que hacer, ella no podía cambiar allí y no tuvo otra mejor idea que acercarla a él besando sus labios como si fuera lo último que haría en ese mundo, sus manos lo golpearon en el pecho y él la detuvo ejerciendo presión haciendo notar sus venas, los labios de ambos se movían en una desesperada danza, sus corazones latían rápidamente, Kannie jadeó forcejeando con Kook pero por alguna razón ya no era tan fuerte, él tomó el atrevimiento de introducir su lengua en su boca escuchando un gemido de su parte que lo volvió loco, jaló de sus brazos sentándola a horcajadas sobre sus piernas, sonrió gustoso cuando Kannie aferró sus manos a su chaqueta por minutos porque luego subía y bajaba sus manos por su pecho o abdomen, mordió su labio escuchando un gruñido de ella, ambos se dejaban llevar por su lado salvaje...y lo disfrutaban.

JungKook subió su blusa apreciando el brasier azul que tenía puesto, la piel de Kannie era más suave de lo que pensaba y pálida, quería llenarla de besos y morderla hasta dejar marcas por su cuerpo. Estaba más que excitado teniéndola así, sus respiraciones agitadas se mezclaron, ella besó su cuello subiendo su mano por su abdomen, sonrió maliciosamente deteniendo su mano al llegar a su cuello y lo tomó con fuerza mirándolo retadoramente.

— Vuelves a besarme y esas perras con las que estás no pensarán dos veces en dejarte si te castro—amenazó hablando muy enserio.

— ¿Sabes que es excitante verte así? —sonrió burlonamente hablando con voz ronca, cosa que a ella le hizo temblar.

Porque a pesar de golpearse o hacerse caer mutuamente...seguían gustándose.

— Déjame en paz, Jeon JungKook—lo soltó levantándose recuperando su blusa. Sabía que por la noche no dormiría pensando en ese beso.

— Lo siento, pero no pienso hacerlo, jamás.

— ¿Te has enamorado de mí, bebé? —se burló—Lástima, no salgo con alfas.

— Sé que saldrías conmigo, te haces la dura—se levantó sintiendo una incomodidad entre sus piernas, ella lo notó gustosa.

— ¿Necesitas ayuda con tu amigo? —levantó una de sus cejas.

Pero antes de responder la puerta se abrió dejando ver a un confuso hombre, era uno de los que limpiaba, Kannie salió con prisa, mientras se alejaba por el pasillo, JungKook la miró repitiendo el momento en su cabeza, pero de inmediato se dirigió a uno de los baños a solucionar su "problema"

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Esta será una relación muy complicada 😂