Manchester

16.- Asesino en el amor.

John

Estoy a punto de estallar, estoy pensando solo en ella, había sido un estúpido por no haberle dicho de que chica se trataba que me gustaba tanto pero no podía.

Simplemente no podía decirle, por qué, nos conocíamos hace muy poco, por qué era muy probable de que yo no le guste a ella y por qué si.

No hay más explicaciones, prefiero mantener este tema al margen, no quiero pensar en eso ahora.

Decidí bajar a la cocina a buscar algo para comer después de haber finalizado la llamada con Lucy.

Tenía hambre, comí un pequeño sándwich de carne que había dejado mamá ayer  y me dormí.

Me levanté a las 9:10 para terminar de hacer el trabajo de historia que todavía no había terminado y era para el lunes, odio la tarea pero estábamos en el 92' a mitad de año y prefiero tener todo listo para el año siguiente ya que sería el último año de la secundaria y al fin me podría librar, no estudiaba por mi, estudiaba por mis padres, es una forma de agradecimiento a todo lo que hacen por mi.

Me puse a ordenar mi cuarto cuando termine de desayunar y se pasó el tiempo, hoy no tenía nada que hacer, la verdad.

Me gustaría dormir todo el día, ya que no podía salir, el lunes pasado fui muy temprano al colegio ya que habían dicho que habría una reunión 12:45 pero nadie apareció, fui el único idiota que fue, cuando fui a hablar con los directores me habían dicho que no había ninguna reunión programada para el día lunes, mis amigos me habían hecho una puta broma y Les rompí la cara, lo se, fue violento de mi parte pero se lo merecían.

A las 4 de la tarde sonó el timbre y baje a abrir la puerta ya que mama estaba ocupada y papá veía la televisión.

Abrí la puerta y era mi hermano, olía a mierda sinceramente.

Entro a casa sin saludarme y saludo a papá y subió a saludar a mamá.

Papá había quedado solo en el living, es decir...era el momento para hablar con el. Mierda!.

Me acerque a él y me senté a su lado. El fue indiferente, creo que nisiquiera notó mi presencia.

-Papa...quiero hablar contigo.- dije mirándolo

-No irás a ningún tipo de fiesta hoy, recuerda que estás castigado.- dijo sin mirarme.

-Que? No! Quiero hablar contigo papá, enserio. Quiero disculparme por todo.-

El finalmente me miró.

-Lo lamento mucho por todo lo que hice el jueves y no estoy buscando que me dejes ir a alguna fiesta si piensas eso..Perdón por no haber sentido vergüenza, perdón. Realmente lo siento..-

Él me miró e hizo algo que nunca imaginaria que haría es, me abrazó y fue un abrazo sincero y a la vez con decepción de ambas partes, de la mía y la de mi padre...

-Valoro que hayas reconocido que estuviste mal y valoro mucho que hayas hablado con tu madre y que también le pediste disculpas.-

Ya lo sabía?

- Yo te perdono hijo..te amo mucho y quiero el bien para ti y para tu hermano Terry.-

Me miró con preocupación.

-Estas tomando drogas hijo? respóndeme con sinceridad.-

Que...mierda?

Qué se supone que tenga que responder, mentirle otra vez o confiar y permitir que me metan en un centro de rehabilitación y mantenerme como un animal en extinción?.

Trague saliva y respondí tratando de sonar convincente y seguro.

-Papa..por qué piensas eso? No estoy tomando drogas, para nada...-

Lo mire fingiendo tristeza y desilusión.

-Lo lamento hijo... realmente lo lamento por pensar eso, se que tengo la culpa por que yo estuve tomando drogas y drogándome todos estos años y temía generar una influencia en ti.

Lo siento hijo por todos esos años...- me miró con los ojos cristalizados.

Mierda, realmente estaba arrepentido, me dolió en el alma haberlo visto al borde del llanto pero fui fuerte para él.

-Descuida papá...nunca me enojaría por eso. Sabía que el matrimonio tuyo y de mama estaba mal y que ustedes se sentían mal uno con el otro, y tu solo...solo demostraste no ser fuerte con eso, seguro estabas triste y mamá también pero tenía su forma de demostrarlo y yo pensaba que esa era tu forma de demostrarlo..- dije mirando al piso y de a rato mirando a mi padre.

-Gracias por entenderlo, hijo...-

Nos abrazamos y caminé hacia mi cuarto, eran las 7 así que me puse a practicar con mi bajo y al terminar toque la guitarra antes de cenar.

Bajé cuando escuché la voz de mi madre gritando que la cena estaba servida.

La cena fue silenciosa excepto por algunos chistes de papá y temas de mama con papá que yo no entendía. El día terminó aburrido cómo era de esperarse y me dormí rápido.

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