Manchester

18.- René

John

No estuvo bien besarla, pero fue lo mejor que me había pasado, nunca había sentido algo así por una chica, tenía relaciones de una noche con otras chicas y nisiquiera estabamos concientes por qué estaba hasta las cejas de cocaína pero al otro día no sé acordarían de mi ni yo de ellas, era solo unas horas de placer, sexo sin sentido y nada más.

Pero Lucy es diferente, realmente me gusta y me encantaría poder decircelo, pero la cagué con ese beso, no estuvo bien, la confundí.

No sé cómo voy a mirarla de vuelta sin pensar en ese beso, en sus labios rosados, su aroma y el calor de estos. No podría, tengo que dejar de pensar en esto.

Me puse a tocar mi bajo y le pedí a mi madre que me preparé un rebanado.

Lucy...

Desearía haber seguido el beso pero fue en un segundo, fue tan rápido que no supe cómo reaccionar, estaba tan sorprendida por su acción que moría de vergüenza, me sentía una niña pequeña dando su primer beso.

Era imposible no olvidar sus ojos que hoy estaban azules, su pelo rubio largo sin peinar, con pequeñas rastas y su ropa tan alternativa, cualquiera diría que era un drogadicto de la calle, y lo era, pero desearía que sea solo mío, pero no podría ser así, seguramente el no gustaba, solo me veía como alguien para solo una noche.

No podia confiar en alguien que apenas conozco, a lo mejor soy desconfianda pero, tenía razón, lo pondría a prueba, no hablaría con el por un largo tiempo, y, si realmente pienso que solo soy alguien para una noche me olvidaría de el tan rápido como ese maldito beso.

Bajé cuando termine de tocar la guitarra, eran las 10 en punto y le tocaba a mi hermano hacer la cena, me esperaba un puto desastre en la cocina, pero, finalmente comimos y ordené todo, cuando terminé fui hacia el living a mirar televisión y me quedé dormida.

-Hey...Lucy, despierta! Hay alguien en la puerta, pregunta por ti!-

Mire mi reloj y marcaban las 2:58 AM quien demonios tocaría la puerta a esta hora? Agarre un palo de amasar y caminé a la puerta y la abrí lentamente...

-Lucy...Lo siento, necesito hablar contigo...-

Qué mierda? René estaba acá? Realmente era ella?.

-René..?- pregunté con el ceño fruncido.

-Lo siento si te desperté..Necesito hablar contigo.- asentí con el ceño fruncido y la invite a pasar.

Seguramente era grave para venir a mi casa a despertarme a la mitad de la noche, debería, nadie me despertaba y si lo hacían recibian un puto golpe.

-Quieres...algo para tomar?- le pregunté sonando hospitalaria.

-Agua.- dijo mirándome.

Me dirigí a la cocina, saque agua de la heladera y la servi en un vaso y me dirigí al living.

Mi hermano estaba parado en las escaleras y le indique que subiera. Me hizo caso.

-Por que estás aquí tan tarde y por qué desapareciste tanto tiempo?- pregunté.

Ella me explico todo lo que le había pasado.

Ella y sus padres se mudaron a Escocia por qué su padre abogado se habia metido con la mafia y los estaban persiguiendo por haber ganado una causa, ellos huyeron sin avisarle a nadie, eso explicaba todas las llamadas que le dejé y causo mi enojo ya que ella, Alex y yo éramos mejores amigos, cuando ella se fue tuve que entenderlo, tuvimos, Alex y yo.

Hace unos meses René y su familia volvieron a Manchester gracias a que el padre había vencido la mafia y pensaron que finalmente podrían ser feliz y vivir en paz aquí en Manchester. René estaba aquí por qué tenía que explicarmelo todo.

Lo que no entendía era por qué a esta hora.

-René lo siento mucho por haberme enojado.- le dije realmente arrepentida.

-No, yo lo lamento.-

-Pero..hay algo que no entiendo, por qué viniste a esta hora?- dije con mirada confusa.

-Es otra larga historia. Me peleé con mis padres, al parecer me quieren cambiar de colegio, déjame quedarme aquí esta noche y mañana me voy. Por favor Lucy.- me dijo René.

Era obvio que le iba a brindar un espacio donde se pueda quedar.

-Claro que si René, no es problema eso.- le dije abrazándola.

-Ven, vamos a preparar las camas a mi cuarto.- ella me siguió y subimos a mi cuarto.

Le prepare un colchón al lado de mi cama y le preste un pillama.

-Realmente te lo agradezco, Lucy.- dijo René.

-No es nada René, haría lo que fuera por ti...- lo se.

Sonó super lesbiano pero la quería muchísimo.

-Te extrañe idiota.- le dije pegándole fuerte.

-Oye!- dijo quejándose del dolor.

-Yo también te extrañe.- Dijo René.

Nos quedamos hasta las 6 de la mañana hablando como si fuéramos amiga por primera vez, hablamos de chicos, en especial John y lo que había pasado, ella me dió consejos y nos dormimos bastante rápido.

Me levanté a las 11:50 AM.

Es decir, era tardísimo, me levanté de golpe, me fuiva vestir y baje a preparar el desayuno, René no sé levanto pero le dejé una nota.

Ella no iría al colegio hasta el mes siguiente.

Cuando termine de desayunar ordené todo y el reloj marcaba las 12:55 pm salí rápido de mi casa con mi mochila y me dirigí a la parada del autobús.

Me subí y me puse mis auriculares y mi cassette de Rage against the machine, me fascina esa banda.

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Cuando llegue baje rápido y entre. Llegue tarde como siempre pero me senté al lado de Alex.

Ví a John disimuladamente y estaba sentado con una chica, estaban hablando y riendo, pareciera que se divertía, me miró y nisiquiera me saludo.

Bien John, tan rápido me remplazaste? Rei ligeramente.

-Oye, no te pongas celosa!- dijo Alex, sabía a lo que se refería.

-Celosa? De John? Pff...No, no me interesa.- dije abriendo mi carpeta.

-De John? Yo no dije de quién.- dijo riendo.

-Vete a la mierda, Alex.-

Alex río exageradamente y las horas pasaron, John seguía igual, me miraba pero no me hablaba, en el primer descanso estuvo con esa chica, en el segundo también, que más podía hacer, eso me confirmaba que solo quería un beso y nada más.

Adiós John.

Salimos del colegio y me dirigí a la parada del autobús, me iría con Alex.

De pronto sentí que alguien grito mi nombre.

-Lucy...lucy espera!- Grito John.

Por qué ahora? No tenía ganas de hablarle ahora pero tampoco quería ignorarlo.

-Que?- dije indiferente sin mirarlo.

-estas enojada?-

-No John. Mira ahí viene mi autobús, hablamos luego está bien? Adiós.- lo saludé rápido y me fui.

Qué estúpida soy.

No estaba mintiendo venía mi autobús así que me subí con Alex y fuí a mi casa.

Cuando llegamos le expliqué que René estaba en mi casa y el se puso como loco, no paraba de hacerme preguntas que ni yo podía responder pero le dije que se tranquilizara, que ella estaba bien, entramos y Alex abrazó fuertemente a René y empezamos a hablar.

Mi hermano estaba en su habitación.

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