QUÉ ESTÁS HACIENDO BROWN?!
-Vámonos de aquí.- tomó mi mano y nos levantamos de los asientos, haciendo que todos nos miraran.
No me parecia bien irme, pero queria hacerlo y tenía unas inmensas ganas de hacer cosas que jamás había hecho antes... no se si eso es bueno.
Llegamos corriendo hasta fuera de la escuela, este sería el día en donde no iria a la escuela?, finn y yo teniamos nuestras respiraciones agitadas y apostaba un millón de dólares a que mi cabello estaba despeinado.
Me recoste en el suelo y mi cabello cubria mi rostro del sol, finn hizo lo mismo y después de silenciosos minutos se giró a verme.
-Mills, te puedo decir algo?.- hizo que me girara también.
-Si, claro
-Pero quiero que sepas que nada cambiará, digo, no quiero terminar la amistad que tenemos me entiendes? Aun si recien comenzamos a ser amigos.
Me esta poniendo nerviosa, que hago? Decirle que si? No decir nada? Irme? Llorar? Que hago?!
-Bueno, se que es muy repentino, demasiado pronto o como sea pero...
Esta diciendo lo que creo que esta diciendo?
-Y bueno, creo que me gustas.
No podía creerlo, sigo sin creerlo, no pensé que dijera eso, quiero decir es muy poco tiempo el que llevamos hablando, demasiado poco! No puede ser, como le digo que él también me gusta?
-O sea, me gustas mentalmente, me gusta como piensas y como actuas, y creo que eres la persona con la que tengo más cosas en común.
-Oh, pero no físicamente, verdad?.- una parte de mí esperaba que dijera que no, y la otra estaba muerta por que dijera que sí.
-Sí, quiero decir, eres muy bonita y no sé porque no te conocí antes.
Me quedé callada, que se suponía que debía responder?
"Oh, también me gustas, te estuve acosando como loca con mi amigo Noah desde que tengo memoria y siempre pensaba en ti". Ni loca le decía eso!
-Y? Que piensas?- me preguntó mirándome.
-Que no entiendo por qué yo, cómo es que te puedo gustar? No me gusta no siquiera mi propio reflejo.
-No te desanimes así, eres hermosa, y me encanta tu mentalidad. Eso te hace ser perfecto, no?
Sonreí y me volví a recostar en el suelo como estaba, tomé mi celular y miré la hora, era temprano aún y esto me hacia perder las ganas de entrar a clases pero debía hacerlo.
-La próxima clase nos toca separados- dije mirando la hoja de horarios.
-Entonces no iré a la mía- dijo estando otra vez en la misma posición que yo.
-Me toca álgebra, odias álgebra, no es así?- puse mi celular en mi pecho.
-Si, pero no me importaría si es necesario para estar hoy contigo.
No entiendo nada, primero soy invisible para él, después molestada por sus amigos y ahora no quiere alejarse de mí ni una sola clase? Esto esta muy raro.
