-Yo... y tu Viktor... ¿podemos ser amigos?
Quiero ayudarte en lo que pueda, solo quiero que seas feliz. Haré lo que sea para verte sonreír. Quiero ayudarte a vivir.
-¿Amigo? -Era una palabra tan sencilla, pero no podía entenderlo por él.
Viktor vi...
- De nada, Yuri Plisetsky – Yuri se volvió a mirarlo.
- ¿Quién eres tú? ¿Cómo sabes mi nombre?
- Pues...
- ¡Yuri! – Alexei estaba acercándose con Viktor que lo seguía
- Alexei Nikiforov...cuanto tiempo – saludo ese tipo. - ¿Viktor? – la sorpresa era real- haz crecido mucho, es idéntico a ti Alex.
- Alexei para ti...Vitya ve a dentro con Yuri. – Viktor no obedeció, ya que miraba a ese hombre que lo conocía - ¡VIKTOR! ¡vayan adentro, ahora! – Viktor se sobresaltó, su padre jamás le había subido la voz – vete de aquí Misha, no tienes nada que hacer. – El mayor tomó del brazo al niño, mientras Yulia venía caminando, al llegar vieron como le dio un golpe a mano abierta a ese hombre.
- ¿Qué diablos haces aquí? – mientras evita llorar.
- Yulia, sé que es tarde para pedir perdón pero puedo arreglarlo con mi hijo
Ambos niños se quedaron quietos, la verdad se comenzó a deslumbrar, Yuri sentía que iba acercándose sin parar a un precipicio su respiración se agito se aferró a Viktor en un intento por no caer pero sabía que no serviría de nada.
El hombre lo miró directo a los ojos – Yuri, soy Misha Plisetsky...soy tu padre. – y ese fue el momento que el piso bajo sus pies se terminó y lo recibió la dolorosa caída. Viktor noto como comenzó a temblar, quiso sostenerlo pero Yuri se soltó de su agarre para huir al refugio que buscaba dentro de la casa. Ignorando el grito de su madre y primo.
Viktor corrió tras él - ¡Uri! –Grito apenas entro, miro para lados y comenzó a subir las escaleras, entro a su cuarto y ahí lo vio como un gatito asustado en un rincón de cuarto -¿Uri? – se acercó pero este lo alejo.
- Déjame solo Viktor. – lo intento alejar pero este se acercó y así comenzó un forcejeo hasta que Viktor lo atrapó por la espalda y se sentó en la cama con el niño en sus piernas, así se mantuvo mientras pataleaba y lloraba hasta que se calmó.
- Todo estada bien – Yuri solo lo abrazaba. Viktor noto como entraba su tía Yulia mientras sus padres miraban desde la puerta.
- Hijo, Yuri... Mírame ¿quieres hablar? – Su madre intentó tomarlo pero Yuri tiro golpes para lograr alejar a su madre.
- ¡Quiero quedarme con Viktor! – se volvió a abrazar a él, al final se acostaron los tres en la cama, Makkachin le daba pequeños golpecitos en la cara para calmarlo y Viktor jugaba con el cabello de su primo hasta que se durmió.
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Viktor despertó con la luz del sol, se levantó debía ir a clases, noto la cama vacía, se dirigió a la puerta del baño y tocó – ¿Gatito? – como no recibió respuesta entro el lugar estaba vacío, se arregló y bajo, ahí lo esperaban sus padres y tía - ¿Y Yuri?
