Trabajando Para Belial [ TERMINADA]

Capítulo 24

Como todos los días... Empezando la mañana con mi entrenamiento, antes de comenzar a cuidar el trasero de McCoy. Ya llevo más tiempo con él y aún así no deja de molestarme el hecho de cuidarlo.

No he visto ya a Dylan, últimamente toma muchas misiones fuera del país en los que se ha aumentado más de seis meses. No me llama, no responde a mis mensajes... Nada.

-Ya terminaste de recordarlo?- McCoy hizo que saltara un poco, no de miedo, sino de sorpresa ya que me sacó de mis pensamientos.

-De qué hablas?- Trataba de actuar lo más natural que podía al mirarlo. Sostenía una taza de café, por primera vez no es alcohol, eso si es de sorprenderse por completo.

Vestía un pantalón de vestir color gris, un suéter delgado de algodón de manga larga color negro y zapatos de vestir del mismo color que el suéter.

No les negaré que luce perfecto. Me dedico una media sonrisa.

Mierda! A veces olvido que lee mis pensamientos.

-No te preocupes, lo tomaré como un cumplido, sumándole que también es un aviso muy importante para mi de que no te resistes a mi; esperemos que muy pronto pueda cumplir todas tus fantasías y aún más las sexuales- Río a carcajadas al darme la espalda y entrar de nuevo a casa.

Me giré a ver por unos segundos el enorme bosque que está a metros del jardín de la casa para después apretar todo mi cuerpo, mandíbula y ojos.

-Mierda! Ya eres tú de nuevo! Creo que te prefiero más cuando estabas hechizado por esa maldita bruja!- Espero que haya escuchado cada letra y palabra de lo que dije.

Después de arreglarme, salimos de casa y fuimos rumbo a la empresa donde somos socios para cerrar unos cuantos tratos y perdientes con Christian.

-Por fin! Hasta que deciden aparecer- Vaya manera de recibirnos Christian. -Lo lamento mucho querido amigo, he tenido mucho trabajo y unos inconvenientes en los otros negocios- Alex "educado" le respondió a Christian después de saludarlo con un gran apretón de mano y abrazo.

En serio este par actúa como si se conocieran de toda la vida, claro que, Alex es el diablo y Christian un simple humano así que eso es imposible.

-Vamos, por lo menos estoy tranquilo al saber que cuidas de Amber como ella de ti- Christian finalizó en cuanto entramos a la sala de juntas. -Creeme que no dejaría que algo malo le sucediera- Agregó Alex sin importarle que los demás escucharan.

Después de casi dos horas alegando con todos en la sala de juntas, ahora íbamos de camino a otro club del que no había escuchado.

-Sólo hablaré con unos socios y de ahí puedes irte a casa a descansar- Alex dijo sin despegar los ojos del celular.

-Bien- Aprovecharé el tiempo libre para investigar el significado de lo que dijo Sebastian anoche.

-Estás bien?- Preguntó Alex antes de bajar del auto. -Necesito que hablemos y no me iré hasta que me des respuestas- Lo miré decidida a cumplir lo que dije.

-Ok; vamos, todavía falta unos minutos para reunirme con mi socio- No sé por qué, pero creo que sabe lo que preguntaré.

Entramos y no era un club tal cual, era más un bar antiguo y digo antiguo por la madera vieja y el ahora del mismo.

Estaba vacío, bueno, sólo el mesero y una rocola vieja que sonaba canciones viejas.

-En serio este lugar es tuyo?- Dije al seguir mirando todos los alrededores. -Así es, cuál es la sorpresa?- Frunció un poco el seño.

-Pues no es tan... El estilo de Alex McCoy y sus millones- Reí un poco. -Gracias- Le dio un trago a su bebida.

-Bien, al grano. Me puedes explicar qué mierda sucede?- Me puse en frente de él a pocos centímetros.