(ENGATOZADA Parte 5)
¡Victory Krentz no quería matarlos a todos!... ¡es broma! si quería. ¿Como es posible pasar de ser la mejor Abogada de Londres, para después convertirse en una demente asesina serial? Simple, tras el frío asesinato de su pro...
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—Listo, se fueron...— dijo separándose repentinamente de ella y se paró como si nada hubiera pasado, Victory aun intentaba controlar su respiración. ¿Solo lo había hecho para despistar a los policías?— ¿Qué haces ahí sentada todavía? Pensé que querías ir por comida. — pero al verlo hablar tan tranquilo sin sentirse tan turbado como ella... simplemente sintió un ligero dolor en su corazón. Estaba decidido, no iba a flaquear con él, ¿quería ser frío? Pues ella podría serlo también.
—No, no tengo hambre, tengo sueño; iré a la casa de mi mellizo por dinero y rentaré un departamento... eso si es importante. —respondió seria sacudiendo su vestido y caminó sin verlo, abrió un portal y cuando iba a entrar Ciro la detuvo de brazo.
—No, iremos a mi casa y ahí te quedarás. — ordenó también serio.
—Quiero mi espacio Ciro, ya hice lo que querías, no maté a nadie y no me alteré, quiero tiempo para bañarme y...— pero Ciro rápidamente creó otro portal directo a una linda casa en los suburbios y aun sosteniendo el brazo de Victory la arrastró dentro. — ¡Maldita sea suéltame! —totalmente enfadada se convirtió en gata, algunas veces le pasaba cuando perdía el control de su energía justo como ahora, dio dos pasos atrás mirando a Ciro y él al querer acercarse hizo que Victory le bufara y le rasguñara la mano, Ciro maldijo al aire dándose la vuelta mientras su herida sangraba.
—Niña tonta intento ayudarte ¿cuál es tu problema?— gruñó enfadado.
—Mi problema eres tú, te dejaré claro algo; ¡No me toques! ¡No intentes nada! No soy una maldita gata dócil ¿oíste? Si vuelves a querer besarme sacaré toda mi furia contra ti pajarraco.
— ¿es por eso? ¿Por el beso?...— le preguntó en su mismo tono pero de repente notó que el pequeño cuerpo de Victory comenzó a tambalearse como si no pudiera sostenerse.
—Todo da vueltas... —logró decir Victory y luego se dejó caer para no marearse más, Ciro se acercó a ella lo más rápido que pudo.
— ¿Dulzura? ¿Qué tienes?— le preguntó al mismo tiempo que la cargaba, pero Victory ya ni siquiera podía responder, estaba tan débil y mareada que derramaba saliva sin poder reaccionar, así que Ciro tomó su teléfono y llamó a Dorian, era con el que mejor se llevaba por el momento.
Esta vez Ciro metió a Victory a su casa y la acostó en una enorme cama, la pequeña gata aun no despertaba, minutos después Dorian llegó por un portal.
— ¿Qué le ocurrió?— preguntó preocupado y caminó directamente hacía ella.
—Pues se transformó en gata y comenzó a marearse, después no pudo ni hablar y no ha despertado.
—Está muy débil, —dijo acariciando la cabeza de su hermana. —sé que quieres que sea una persona mejor Ciro, pero debes tenerle paciencia, después de expulsar a los cuatro de su mente quedó muy resentida, su energía se desgasta más rápido, tardó un mes en despertar; aquella vez fue un sueño inducido pero tengo miedo, espero que no sea un coma o algo parecido, llamaré al médico de la familia; necesitaré llevarla a StormVille, ¿vienes? —Preguntó levantando el cuerpo de Victory y Ciro asintió, con una mano la sujetó y con la otra abrió un portal hasta la mansión Read.
