Capítulo 5: Resignarse.

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Jelloouuu, al fin después de un tiempo xD
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-¡¿QUÉ?!

Aquel grito hizo que todos voltearan a ver al chico de cabello azul, que se encontraba de pie mirando a su albina compañera sin poder creer lo que le dijo.

-¡Joven Alexy! Comportase ó salga de mi clase. - regañó la profesora.

-Alex... -llamó Rosalya captando su atención.

De pronto el chico se sintió intimidado con la mirada de todos sobre él y para asombro de los demás, Alexy salió del aula azotando la puerta.

-Vaya... Al fin se está revelando. -dijo Castiel en voz alta, provocando la risa de quienes estaban en el salón. Mientras el chico de ojos verdes se quedó pensando en su él, algo no estaba bien ¿Qué le dijo Rosalya para reaccionara así?
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Alexy por su parte se había dado a la fuga en la cafetería, no sabía cómo sentirse. Le decepcionaba demasiado el hecho que su mejor amigo no le hubiese dicho nada y por otro lado le dolía el corazón, dado que uno de sus deseos más egoístas no se cumplió.

El que Kentin no estuviera con nadie más que con él.

-Lo perdí... Sencillamente lo perdí. -murmuró tallandose los ojos, pero también tenía que ser realista con él mismo. -Por favor Alexy... Tú ya lo sabías, a él no le gustan los chicos, mi amor no le hará ver más allá de mi cuerpo.

Acostándose sobre la mesa y con ayuda de sus brazos, cubrió su rostro, en lo que más lágrimas salían de sus ojos. Después de un rato, sintiendo que sus pocas ganas se estudiar desvanecieron, sacó su celular y abrió una aplicación. Lo primero que encontró fue un mensaje de Kentin.

¿Qué pasó Alexy? ¿Estás bien? ¿En dónde estás?

Tuvo una bonita sensación en el pecho al notar la preocupación de Ken, pero ¿De qué le servía alegrarse? Si estaba en una decepción amorosa. No respondió nada y mejor le mando un mensaje a su hermano Armin, pidiendole de favor que trajera sus cosas a la casa.

Se fue del colegio dirigiéndose a su hogar y pasó el resto del día encerrado en su habitación.
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-¡Alex! Abre la puerta -toco nuevamente - ¡Alex!... -Armin siguió golpeando la puerta hasta que -¡Voy por las llaves!.

-No tiene caso que vayas, aquí las tengo -respondió desde el interior.

Iba a seguirle gritando pero mejor respiró hondo, no ganaba nada con gritar.

-Oye Alexy.... ¿Qué te pasa? -cambió repentinamente su tono de voz. -¿Por qué no te quedaste en clase y me dejaste sufriendo a mi solo?.

-No puedo decirte.

-Vamos, soy tu hermano... Aprovecha el bug mientras mi PSP se carga y puedo ponerte atención.

-Gracias, pero no estoy de humor.

Dándose por vencido de no poderle sacar la verdad a su hermano gemelo, Armin se rascó la sien y dejó la mochila encargada en frente de la puerta.

-Bueno... Aquí te dejo tus cosas por si te animas a salir. -sin añadir más, se retiró a su habitación.

Una hora después había llegado Victoria del trabajo, dejó la comida rápida sobre la mesa y subió a llamar a sus hijos. Primero fue a la recámara de Armin a quien casi le tuvo que gritar para que dejara los aparatos y bajara a comer.

-¿Alexy está aquí?

-Sí mamá, hoy no salió... Aunque está raro, llegó de la escuela y se encerró. -respondió mientras guardaba su xbox en la caja por órdenes de su madre, ahora si le había mentido, era para no meter a su hermano en problemas.

El bebé de AlexyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora