Don't fall in love to the Demon (YoonSeok)

Capítulo 12

-¡Tenemos que movernos! ¡Ya! Jungkook llevate a Taehyung, Jimin, Hobi, vayan con ellos -ordenó el pelinegro a la vez que sacaba el arma de su cinturón y apuntaba afuera-.

Todo pasó rápido, el sónido de las balas cada vez más cercas, Jungkook tomó en brazos al Caído y se dirigió a la salida lo más pronto que podía. Sintió su mano ser tomada y ser conducido fuera de ahí dejando al pelinegro sólo ahí.

-No, no, no, no, Jimin sueltame, tengo que ayudarlo, tengo... -chillo con dolor sintiendo un ardor en su hombro para que después comenzara a correr por todo su brazo, una bala había rozado cerca de su omoplato izquierdo-.

Si le habían disparado quería decir que YoonGi estaba en peligro, quería decir que tuvieron que pasar a YoonGi para poder atacarlos a ellos. Tal vez YoonGi estaba herido, o tal vez muerto. El sólo pensar en eso hizo que la temperatura de su cuerpo bajara y el sudor frío en su espalda se hizo presente.

Otra bala rebotó en la pared que estaba justo a su lado, varias más en la pared de enfrente justo después de doblar en la esquina, para su mala suerte no había más por donde correr o esconderse, simplemente fue el pasillo sin salida.

Giro su cabeza y se puso delante de los chicos esperando, viendo los proyectiles dañar la pared, sólo esperando.

Un Demonio alto, de complexión musculosa con grandes cuernos sobre su cabeza y cola larga apareció y sonrió al verlos, alzó su arma y los apunto.

HoSeok sólo cerro los ojos cuando escuchó el disparo.

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Una vez que salió a dar batalla y tratar de proteger a los otros YoonGi nunca se imagino ver a las familias Min y Jeon ahí apuntando justo en su cabeza.

Su padre dió un paso al frente y lo abofeteo volteando su rostro haciendo su mejilla rojiza por el golpe recibido. Angustia y coraje inundó cada centímetro de su cuerpo.

-Creías que nunca me enteraría -bramó- Eres una vergüenza, deshonras el apellido Min y todo el trabajo que por milenios hemos hecho.

Escuchó atentamente cada palabra que salía de la boca de su padre, vió el rostro rojo y encolerizado cada que hablaba, cada que escupía palabras hacía él. Más sin embargo no tuvo miedo, si bien su padre provocaba que hasta los más grandes Demonios se orinaran en sus pantalones, a él no lo removió ni un poco. Él era igual de temido que su padre y si tenía que enfrentarlo para poder poner a salvo al Ángel de cabellos rojos lo haría.

Alzó su arma, la coloco justo en la frente de su padre y quito el seguro.

-No tienes ni idea de mi vida, así que no hables, si crees que te tengo miedo estas muy equivocado, así cómo sé que tu eres capaz de matar a tu hijo y mejor guerrero yo también soy capaz de matar a mi padre y pelear por lo que me importa.

El silencio reinó por unos instantes y después el sónido de los proyectiles comenzaron de nuevo.

Sin pensarlo dos veces apretó el gatillo y él cuerpo del Demonio jefe de los Min cayó a sus pies, momentos después cayó justo a lado el cuerpo de Min YoonGi.