13 de julio del 2012
Marco.
Estiré mis piernas mientras uno de los chicos pateaba el balón en medio de la cancha y los demás iban tras él. Fui a buscar un filtro con gatorade y me lo tomé todo de una sola vez. Estaba haciendo un calor de mierda y estaba sediento como el infierno.
El entrenador me grito alguna cosa para que volviera al juego pero decidí ignorarlo un momento y quedarme justo donde estaba ya que el sol no llegaba a mí.
- Mierda Reus ¡necesito tu trasero en esa cancha! – El técnico y padre de la chica que me traía loco decidió dejar su frustración en mí. A regañadientes hice caso.
Que su papá me prestara atención hoy solo me hizo pensar en ella y en el último día que nos habíamos realmente visto. Podía recordar exactamente la manera en que sus vaqueros se amoldaban a sus piernas y su camiseta la hacía verse realmente bien. Y sus labios, mierda, eran una cosa adictiva y deliciosa. Estuve soñando con besarlos desde el lunes. Estaba deseando verla pero había decidido no aparecerse por aquí dejándome realmente ansioso.
- Necesito tu mente en esto Reus – O'Connel volvió a gritarme y decidí poner toda mi maldita concentración en el resto del entrenamiento por el bien de ambos.
***
- ¿Qué pasa contigo hombre? – Mario se acercó a mí mientras nos dirigíamos a las duchas. Me le quede mirando negándome a contestarle.
- Pasa que está enamorado – Sebastian pasó a nuestro lado soltando una carcajada ante mi rostro. – No pasa nada hombre, tu secreto está a salvo conmigo.
- Sí, claro – Murmuro entrando en una de las duchas y dejándolos hablando solos.
Deje que el agua lavara mi mal humor y en ese momento supe de dónde podía sacar el número de teléfono de Des. Me di una palmadita mental.
- ¿Recuerdas a esa chica con que estabas en la fiesta de inicio de temporada? – Mario me miró un momento antes de sentarse a atar los cordones de sus zapatos.
- Sí, claro que la recuerdo ¿Qué pasa con ella? – Sus ojos van directo a mí pensando lo peor.
- Sé que esa chica es tuya amigo, esto no va a sonar muy bien pero... necesito su número de teléfono.
- ¿Para...?
- Que me dé el número de Destiny – Al nombrarla Mario dejo sus cordones y frunció el seño notablemente pero no dijo nada. – Vamos Mario, soy un estúpido por no tener su número, pero necesito eso.
Muy a su pesar Mario me dio el número de la amiga de Destiny y el sol salió de entre las nubes una vez más. Fui por una hamburguesa luego del entrenamiento y decidí esperar un poco para calmarme y así poder salirme con la mía. Estaba en mi departamento, en mi cama, cuando decidí llamar al número de Raven.
- ¿Hola, quien es? – Una voz femenina me atendió al otro lado de la línea.
- Oh, si ¿Raven?
- Qué bien, sabes mi nombre... ¿Quién mierda habla allí? Voy a colgar.
- ¡No lo hagas! – Casi le suplique – Soy Maco, Marco Reus.
- ¡Vaya! ¿El mismo Marco Reus del que mi amiga no para de hablar? – No pude evitar la sonrisa que siguió después de su comentario.
- Bueno, supongo que soy yo... - Raven dejo escapar una carcajada por lo gracioso de la situación. – Necesito que me hagas un favor Raven.
- Está bien, habla.
- Necesito el número de Destiny ¿puedes hacer eso por mí? – El otro lado de la línea quedó en silencio mientras Raven sopesaba sus opciones.
- Bien pues... ¿tienes dónde anotar? – Le di una respuesta afirmativa mientras sentía una gran alegría, podría saber de mi chica de una vez por todas. Nada podía superar eso.
Cuando estaba a punto de marcar el número de Destiny escuché que el timbre de mi departamento sonó. No sé quien podría ser, ni menos a esta hora. Abrí la puerta con sólo los pantalones ya que el timbre sonaba insistentemente sin darme tiempo de ponerme una camiseta.
- ¿Qué haces aquí? – Delante de mí estaba la chica que hacía una semana había roto mi corazón.
- Yo... te quería ver – Sus ojos azules se veían cansados y no llevaba una gota de maquillaje, cosa que me sorprendió. El único momento del día en que la veía sin maquillaje era cuando acababa de levantarse.
- Podrías haber seguido haciéndolo pero tú decidiste nuestro destino. – Elena bajó los ojos dándose cuenta de lo cierto de mi oración y puso su rubio cabello detrás de su oreja.
- ¿Puedo pasar? – Miró sobre mi hombro al interior del departamento, aunque mi respuesta debió haber sido negativa, asentí dejándola pasar.
- Así que... – Me senté frente a ella en el sofá esperando a que hablara.
- Creo que fue una mala idea terminar lo nuestro – La vi y noté las cosas que me habían gustado de ella. Como su largo y rubio cabello y sus lindos pero fríos ojos azules. Era modelo de ropa interior por lo que tenía un cuerpo hermoso y la piel bronceada y tersa. Era una mujer hermosa pero me había demostrado que no le importo ni un poco nuestra relación al momento de romperla, ni mis sentimientos.
- Deberías haber pensado eso antes de sólo terminar conmigo, sin darme una explicación coherente, además de porque no congeniábamos más, cuando los dos sabemos que eso era una maldita mentira – No levante la voz nunca y le dije las palabras de manera calmada pero sin apartar mis ojos de los suyos que se fueron agrandando a medida que hablaba.
- Dios Marc, esto... yo... ¡te amo! Y necesité estos días para darme cuenta de cómo me sentía respecto a lo nuestro – Sus manos de manicura perfecta fueron a su cabello enterrándose en el – Te necesito – Lo dijo en un murmuro haciéndome sentir el peor hombre del mundo por como la hacía sentir.
- Elena – Dije con cuidado para que pusiera su atención en mí – Yo te quise mucho, y aún te quiero. Pero como para ti sirvió este tiempo para aclarar tus sentimientos respecto a mí, yo hice lo mismo. Ya lo nuestro no puede seguir más, esto – Nos señalé a ambos mientras ella sacudía la cabeza con lágrimas en los ojos – Se acabo, desgasto, no funciona.
Sus tormentosos ojos azules buscaron los míos en una súplica silenciosa, pero no estábamos ya en lo mismo. No quería decirle la verdadera razón por la cual estaba dejando que las cosas siguieran su curso para no hacerla sentir peor. Yo muy bien sabía que si Destiny no hubiera aparecido en mi vida le habría dado otra oportunidad a lo nuestro, pero las cosas eran diferentes ahora.
- Tienes trabajo durante todo el verano Elena, no tendrás tiempo de extrañarme – Me levante y me senté junto a ella dejando que descansara su cabeza en mi hombro – Ya verás como con el tiempo te das cuenta de que esto es lo mejor para ambos.
Elena envolvió sus brazos a mí alrededor y yo deje un beso en su cabello que olía a durazno tal como lo recordaba. Había sido un año increíble con esta chica, pero era hora de empezar algo que sabía iba a ser mejor junto a esa pequeña pelirroja.
Buenooooo hoooooola. Estoy subiendo mucho antes, soy lo mejors, lo sé, punto para mi.
Bueeeeeeeeh. Volvemos a los capitulos narrados por Marco, puedo asegurar que los extrañaron tanto como a mí jaja.
I'm really really happy, gracias por los votos y los leídos, son realmente las mejores lectores of the world, creanme.
Para que me hagan más feliz solo tienen que comentar más, pueden dejarme en los comentarios que tal estuvo el cap, cualquier cosa, tambien estoy abierta a sugerencias, TODO es valido (((((:
Les dejo otra de las candidatas para Des a ver que les parece *-*
@Disaster_heart aquí tienes el cap que pedias y espero lo disfrutes.
Besos para todas las loveo y gracias por leer (: Saludos desde Venezuela cx
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In Love With A Football Star~.
Lãng mạnSer la hija del director técnico del Borussia Dortmund núnca fue facil para Destiny O'Connel. Sobre todo cuando su papá la obligaba a mantenerse alejada de todo ese montón de chicos que por tanto deliraba. Marco Reus lo tenía todo en su vida, su...