In Love With A Football Star~.

Cap. 14 Paraíso.

- No me habías dicho que pensabas perforarte las orejas -dije cuando íbamos en el taxi.

- Fue algo de un momento a otro ¿no te gustan?

- Sí, te quedan muy bien -tome su mano entre las mías y asentí hacía él. A Marco todo le quedaba bien y sí él quería perforarse las orejas eso estaba bien conmigo.

Unos minutos después llegamos a un restaurante hermoso y exclusivo, me comento que solo dejaban entrar a personas famosas o de mucho dinero y que me preparara porque las cámaras iban a estar sobre nosotros todo el tiempo.

Y así mismo fue, no bajamos muy bien del auto cuando un montón de cámaras ya estaban sobre nosotros. Intente sonreír mientras Marco me llevaba de la mano al interior del lugar dónde nos esperaba un mesero con refinado acento italiano que nos indicó nuestra mesa.

- ¿Qué te parece el lugar? -estábamos en una mesa para dos un poco apartados de las pocas personas que estaban dentro del restaurante.

- Es hermoso, como todo lo que he visto hoy. -Y hablaba en serio. Las mesas tenían manteles blancos y una botella de champagne estaba dentro de un cubo en el centro de estas. El lugar tenía una luz suave y el techo estaba adornado con pequeñas lamparitas que brillaban tenuemente. -No sé de qué manera agradecerte por todo lo que has hecho por mí.

- El solo aceptar venir lo vale Destiny -estiro su mano y tomó la mía en el centro de la mesa que nos separaba.

Trajeron la comida que habíamos pedido al llegar y degustamos el delicioso platillo entre anécdotas y miradas robadas el uno al otro de vez en cuando.

- ¿Quieres ir a dar un paseo antes de regresar al hotel? -me pregunto saliendo del restaurante.

- Me parece una buena idea.

Tomados de la mano fuimos por las pequeñas y pintorescas calles de Capri. Me llene de la hermosa cultura de la isla y notaba como las personas se quedaban mirando a mi atractivo acompañante a medida que caminábamos por el centro del lugar. A la final llegamos a un bazar lleno de personas y donde vendían cualquier clase de cosas que te puedas imaginar. Me le quede mirando a un collar pequeño y con un dije en forma de corazón, era hermoso y muy delicado. Sentí unas manos que me rodearon por la espalda antes de susurrarme al oído.

- ¿Te gusta ese? -lo miré desde mi posición y moví mi cabeza afirmativamente.

- Pero no quiero que sigas gastando más nada en mí. Yo me lo puedo comprar -hice ademán de tomar mi bolso pero él me detuvo con sus frías manos.

- Ni lo pienses Destiny O'Connel. Hoy es tu cumpleaños y sí te gusto el collar, el collar te voy a regalar.

Fruncí mi ceño y aunque lo intenté no había nada que lo hiciera cambiar de opinión. Termino comprándome el collar junto con una rosa roja que olía realmente fantástico. Más adelante conseguí algunas cosas para Raven y mis padres, esta vez pude pagarlas yo ya que él estaba ocupado viendo algo más. Terminamos el recorrido y Marco me jaló hacía el haciendo que estuviéramos muy cerca.

- Creo que es hora de regresar al hotel -asentí como pude y suspire pensando en lo que sus palabras significaban.

Tomamos un taxi y nos dirigimos al otro extremo de la isla que era donde se encontraba el hotel. Como yo entendía muy poco el idioma Marco se comunicaba en su sensual manera de hablar italiano haciéndome soltar más de un suspiro.

El elevador parecía que nunca iba a llegar al piso y mi paciencia se estaba empezando a agotar cuando la tarjeta no abrió la puerta en el primer intento. Cuando la puerta por fin se abrió frente a Marco pasamos al interior donde las luces estaban apagadas. Me senté en la cama y me quite las sandalias dejándolas a un lado. En la oscura habitación solo iluminada por el reflejo de la luna pude ver a Marco quitándose el chaleco que traía sobre la camisa y dejándolo sobre el sillón. Vi su sonrisa de blancos dientes y no pude evitar sonreír igual. Se acercó a mí a paso lento prolongando mi castigo por no tenerlo ya sobre mí.