21 de julio del 2012.
Destiny.
Esta semana había sido una de las más largas para mí. Estaba sumamente ansiosa por irme de viaje con Marco, serían dos días realmente fantásticos y podría tenerlo enterito para mí sola ¿Qué mejor que eso? Marco no había querido decirme a donde nos dirigíamos, por lo que él reservo el hotel y compro los pasajes de avión, sin dejarme pagar por nada. Me sentía como una niñita al que su papá le pagaba todo.
El vuelo salía en unas horas por lo que estaba terminando de acomodar las cosas para el viaje. Vi mi maleta sobre la cama, no llevaba demasiadas cosas y había salido ayer a comprar un traje de baño, al no saber nuestro destino debía estar preparada para cualquier cosa. Estire mis pálidos brazos frente a mí y rogué porque Marco decidiera un destino cálido y soleado por el bien de mis pálidas extremidades.
- ¡Hey chica cumpleañera! -Raven acababa de llegar con una bolsa de papel en sus manos - ¿Cómo te preparas para tu viaje con el sensual alemán?
- ¡Estoy demasiado ansiosa! -exclamé dejándome caer en el sillón y suspirando.
- Déjame decirte, querida amiga, que voy a necesitar todos los detalles de su noche caliente -Raven levanto sus cejas hacía mí y sentí mis mejillas arder.
- ¡Calla Raven! -tapé mi cara con mi manos.
- ¡Pareces toda una adolescente Destiny! -Quitó mis manos de mi cara -Yo que tu estuviera súper emocionada, Marco Reus te quiere en su cama ¡eso no pasa todo el tiempo!
- Me pones nerviosa Raven -la empuje haciendo que se carcajeara.
- Eres muy tierna cuando te enojas -pellizco mis mejillas haciéndome rodar los ojos. -Casi lo olvidaba, esto es para ti -me tendió la bolsa de papel - ¡Feliz cumpleaños calabacita!
- ¡Gracias perrita! -me acerqué y la envolví en un abrazo.
- Basta de tanto agradecimiento, vamos, ábrelo -hice caso de su demanda y abrí la bolsa, de dentro saqué un biquini rojo de dos piezas sumamente pequeño y sexy como el infierno, jadee ante el pequeño objeto.
- ¿Esto es para mí? -no podía apartar la mirada del biquini y pensé en la cara que tendría Marco cuando me lo pusiera, me moje los labios queriendo parecer sexy para mi chico.
- ¡Claro idiota! Le hice una pequeña llamada a tu querido Marquito y me adelantó que irían a un lugar cálido con playas y ¡guala! Conseguí esa sexy arma letal. Creo que ni yo me resistiría a ti si me llegaras con algo como eso.
- No sé si podría ponérmelo -murmure volviendo mi atención a las prendas rojas entre mis manos -creo que no me quedaría tan bien como a alguien más.
- ¡Deja de parlotear idioteces Destiny O'Connel! Donde me entere que no te pusiste el biquini te mato.
- ¡Me lo pondré! Ya basta de amenazas para matarme Raven.
Raven se carcajeó y se acercó para abrazarme una vez más. Pasamos la siguiente media hora viendo la ropa que llevaría al viaje. Raven sacó algunas prendas que pensó eran muy sosas e introdujo algunas que para mi opinión revelarían demasiado, pero al pensar en que saldría con ese pequeño biquini rojo, todo lo demás se sentía como demasiada tela.
Así como así llegaron las 11:00 am, hora en que Marco había quedado para buscarme. Raven se despidió de mí diciéndome que la pasara de lo mejor y que follara mucho ¡qué mejor amiga me gastaba! Puse la maleta y el bolso en la entrada y fui por mi abrigo, Dortmund estaba empezando a ser la ciudad fría en la que había pasado los últimos años. El timbre sonó y mi corazón dio un vuelco, me miré una última vez en el espejo, había decidido ponerme unos pantalones que me quedaban algo holgados pero se me veían bien, con una blusa color salmón una pequeña chaqueta de jean y una bufanda blanca alrededor de mi cuello, todo esto con unos zapatos de tacón y un maquillaje ligero. Sabía muy bien que no podía tomarme esto de vestirme a la ligera, los medios iban a estar sobre nosotros todo el tiempo y necesitaba verme un poco como lo hacían las novias o esposas de los futbolistas.
- ¡Wow! Hola cumpleañera. Luces hermosa -Marco llego con un pastelito en su mano y una velita sobre este. Se acerco para unir nuestros labios dándome el tiempo de perderme en su aroma y saborear sus dulces labios.
- Gracias, tú también luces fantástico. -me había dado cuenta, en el tiempo que tenía conociendo al chico frente a mí, que le gustaba vestirse bien. Llevaba puesta una camiseta de algodón blanca cuello en v, unos vaqueros, una chaqueta de cuero marrón y unas Niké, usaba una gorra del BVB y había puesto en sus orejas unos pequeños diamantes. Tenía el rostro brillante y una sonrisa traviesa adornaba sus labios.
- Esto es para ti -extendió el pastelito de chocolate en mi dirección y yo me regodeé queriendo probarlo. -Espera -sacó un encendedor y encendió la vela que adornaba la punta del pastelito, sonreí ante la imagen -Pide un deseo pequeña.
- No tengo porque, todo lo que quiero lo tengo justo aquí, frente a mí -vi como su sonrisa crecía y me acerque a apagar la vela. - ¿Ya me puedo comer el pastelito? Porque luce delicioso.
- Claro pequeña, es tuyo -lo puso en mi mano y dejo que me lo comiera sin interrupciones. Estaba tan delicioso como pensé estaría, gemí de satisfacción cuando el primer trozo de delicioso chocolate entro en mi boca.
- Esto está delicioso ¿Dónde lo compraste? -pregunté terminando con el último trocito y deseando que hubiera más.
- Mamá lo hizo para ti -su respuesta me dejo estupefacta un momento.
- ¿Tú mamá? ¡Wow!
- Sip. Mamá ama cocinar y se emociono mucho cuando le dije que necesitaba un pastelito para ti.
- ¿Sabe de mí? -mis ojos se agrandaron, eso sí que era grande.
- Sí, sabe lo básico. Como que eres la chica que me trae loco. -Se acercó a dejar un beso en mi frente - ¿Y qué tal si tenemos esta conversación en el aeropuerto? Si no nos vamos ahora nos deja el vuelo.
Asentí en su dirección y bajamos las maletas. El camino al aeropuerto fue alegre entre comentarios de Marco acerca de lo linda que estaba hoy y yo queriendo saber nuestro destino. Él se negaba a decirme y quería prologar la sorpresa lo más que pudiera.
Chequeamos el equipaje y fuimos al interior del aeropuerto para esperar que llamaran nuestro vuelo. Marco se puso lentes oscuros y se acomodo la gorra para pasar desapercibido, cosa que no duro mucho tiempo. Sentí algunos flashes por aquí y por allá, Marco apretó mi mano y seguimos caminando como si no notáramos que nos estaban fotografiando.
- ¿Estás bien? -me preguntó a penas nos sentamos en los sillones.
- Sí bien. Sabía que esto iba a pasar. No te preocupes.
- Odio ponerte en esas situaciones -paso sus brazos por mis hombros y dejo un beso en mi cabello. Estar entre sus brazos se sentía como lo mejor del mundo, sentirme protegida y querida. Nada podía superar eso.
Marco tenía un extraño color de ojos, aunque eso no le quitaba lo perfecto. Eran grises, pero un poco verdosos. Había notada que lo días en que estaba feliz su mirada se tornaba más verde, y los demás días solo eran grises y difíciles de descifrar. Pase mi mano por su mejilla recién rasurada y dejé un beso cerca de la comisura de sus labios, hoy sus ojos eran de un verde brillante. En ese momento supe que me estaba enamorando del chico sentado a mi lado. Me daba un poco de miedo pensar en estar enamorada, pero como él había dicho, valía la pena correr riesgos.
El vuelo había salido unos quince minutos después de eso. Ya dentro del avión la azafata había nombrado Nápoles y entonces supe que estaríamos viajando a Italia. Italia era uno de los países más hermosos de toda Europa, por no irnos más allá.
- ¿Así que Nápoles es nuestro destino? -levante mis cejas hacía Marco haciendo que soltara una carcajada.
- Casi tienes todo el misterio resuelto pequeña.
- ¿Casi todo? Es obvio que vamos a Nápoles. Italia es hermoso, gracias por llevarme allí.
- Todo sea por ver esa hermosa sonrisa en tus labios Destiny, ni todo el oro del mundo vale tanto.
- ¡No seas tonto! -empuje su hombro riéndome ligeramente para no molestar a los demás pasajeros de primera clase.
*****
Bueno holi nenas ;D me pase por aquí para dejarles un cap más, el anterior tuvo bastante votos así que graaaaacias beshas :**
¿Qué piensan que pasara entre Marco y Destiny en este viaje?
Sigan votando como lo están haciendo estaré actualizando tal vez mañana o pasado ;;)
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In Love With A Football Star~.
RomanceSer la hija del director técnico del Borussia Dortmund núnca fue facil para Destiny O'Connel. Sobre todo cuando su papá la obligaba a mantenerse alejada de todo ese montón de chicos que por tanto deliraba. Marco Reus lo tenía todo en su vida, su...