Es Ilegal [Markbum]

32. ¿De vacaciones?

Faltaba tan sólo dos semanas para que el inicio de vacaciones llegara, sería un mes sin escuela, y por supuesto mis planes para ellas era; pasar encerrado en mi habitación día y noche. A menos que bambam tuviese alguna idea loca y yo decidiera participar.

—Bien, Mark, estoy haciendo un itinerario para estás vacaciones, así que será mejor que te prepares, desgraciado porque no dormirás para nada.

Sí, bambam está loco.

—De hecho, bam, estaba planeando dormir todas estas vacaciones.

—en serio?

—Sip.-movi mi cabeza en afirmación.

—Pues...yo,...-hizo una breve pausa. —No te dejaré dormir porqué adivina ¿qué? ¡Llevo toda la noche de ayer haciendo esto! ¡Y no! ¡Maldito mal agradecido, no te dejaré solo! -respiraba de una forma violenta, mientras señalaba el libro en sus manos.,—Lo siento. carraspeó.—Iremos, y no aceptaré un No por repuesta.

—Lo sé, estoy de broma. -palmeó su hombro.

—Sí, ya sabía.

[...]

Después del toqué  de salida, decidimos esperar a Yugyeom ya que este tenía cosas que hacer con Bambam, y al no haber nadie en casa, no tenia otra cosa mejor que hacer más que acompañar a mi amigo.

—¿Qué harán, chicos?.-pregunte de la manera mas vana posible, no era que no me interesará en sus cosas, pero simplemente no tenia otra cosa de qué hablar.

—Cosas de adultos.

—Son un año menor que yo. No me provoques. -apunte mi dedo acusador hacia Yugyeom.

Cuando salimos del instituto, me lleve la sorpresa de encontrar a Jaebum al pie de la  vereda junto a su auto. Mire a mis amigos y éstos ya estaban viéndome de manera interrogante. Ni siquiera yo podía explicarme qué hacía allí.

—Nos vemos  Mark.

Asentí para apresurarme y llegar hasta él.

—¿Qué haces aquí? -no me desagradaba que estuviera aquí pero tampoco tenia una explicación lógica y esperaba que él me la dijera.

—Vine para llevarte a casa. Como amigos. -bastante obvio. Era mi lado soñador que me hacia creer falsas cosas.—Sube.

No iba a decir que no me gustaba la idea de pasar un rato con él, pero tampoco podía fingir que después de todos estos días la cosas por fin estaban bien, porque no era así. Antes de que pudiese darme cuenta nos encontrábamos teniendo una platica amena, hablaba sobre como había ido su dia durante la mañana y sólo se resumió en; desperté, tomé un baño, desayune, vi televisión y esperé tu hora de salida. Y eso hubiese sido muy lindo en otras circunstancias

—¿Y qué tal tu día, amigo?

—Bastante aburrido.

—Tus vacaciones serán pronto, ¿no?...Recuerdo que me lo dijiste.-¿nervios? eso era lo que oía en su voz.

—Sí, en dos semanas, yo esperó que el tiempo vuele.

No hubo otra palabra sino después de unos segundo, parecía como si estuviese preparándose para decir algo.

—¿Sabes? Mark, hace unos días estaba pensando, si,...¿te gustaría ir conmigo a mi ciudad natal? es decir, como amigos. Me gustaría que conociera del lugar de donde vengo y...no lo sé, podría enseñarte el lugar. Pero sólo si tú aceptas, digo...no es que yo...

—Acepto.

Dije de repente para callarlo o sino moriría de un infarto.

—¿De verdad? -giró su rostro y me vio con una sonrisa.