La Heroína Es La Villana Lan

Un encuentro en el jardín imperial

El emperador se aclaró la garganta mientras asentía repetidamente y se ponía de pié, "¡Oh mi gran amigo, bienvenido después de tanto tiempo!"

Al escuchar este estúpido saludo, el primer ministro bajó la cabeza y puso los ojos en blanco.

La emperatriz se palmeó la frente mientras observaba a su marido... Por el amor de Dios, se encontraban frente a importantes funcionarios de la corte, ese idiota que tenía por esposo al menos debería ser capaz de disimular.

Pero parecía que todos dentro del salón ya estaban acostumbrados a este tipo de comportamiento, ya que lo único que podían hacer ahora era suspirar y tenerle un poco de lástima al primer ministro y a la emperatriz.

El emperador, quien no era consciente de nada de esto, rápidamente se bajó de su trono y a la velocidad de un rayo se lanzó a los brazos del primer ministro, bajo el claro disgusto de su propia esposa.

"¡Li Song, ahora que por fin estás aquí, ya puedo terminar con mi obra incompleta!"

El rostro de Hai Li Song perdió todo rastro de sangre, si no hubiera nadie observando ahora, seguramente ya estaría moliendo la cabeza de este estúpido hombre que tenía como adorno el título de emperador.

Apretando los dientes, Hai Li Song sonrió con elegancia, "Su Majestad, por favor no se emocione tanto, este humilde acaba de llegar de su viaje y no tuvo tiempo para darse un baño, ensuciaré los ojos de su divina Alteza"

El emperador negó con la cabeza y le acarició el cabello plateado, "¿Cómo puede ser eso cierto? No importa lo sucio que estés, una pintura es una pintura, una obra de arte, si estás desnudo es incluso me- ¡Agh!" Antes de que el emperador terminara de decir su frase, una mano ya le había pellizcado brutalmente la espalda.

Aunque los labios de Hai Li Song se curvaban en una sonrisa encantadora, el brillo asesino en sus ojos era suficiente como para hacerle un agujero a alguien, "Je, je, je, su Majestad tiene un buen sentido del humor, pero como ya dije antes, este humilde está sucio y quiere darse un baño"

El apuesto rostro del emperador palideció al sentir que la mano que lo pellizcaba estaba a punto de arrancarle un pedazo de piel, así rogó misericordia, "Ja, ja, era una broma, sólo una broma, sé que Li Song y la pequeña Lan Lan deben de estar muy cansados ahora"

Escuchando eso, Hai Li Song dejó de pellizcar la espalda del emperador y sonrió con total naturalidad, "El emperador es muy bromista hoy, este humilde se siente honrado por la gracia de su Majestad"

El emperador maldijo en secreto la buena actuación de este cruel amigo suyo, luego pareció percatarse de algo y se giró para ver a la hermosa niña se cabello negro. Los ojos oscuros del emperador se iluminaron, cogió las pequeñas manos de Hai Yue Lan entre las suyas y dijo, "Ya que tú padre no está dispuesto, en ese caso, pequeña y adorable Lan Lan, ¿Serias mi modelo para una de mis pinturas?"

¿Eh?

La boca de Hai Yue Lan se contrajo notablemente.

El emperador parecía estar muy emocionado, ya que continuó, "Si estás de acuerdo te daré todo lo que quieras, no importa lo que me pidas"

Claro que mientras el emperador se encontraba en medio de su negocio, casi todos los funcionarios dentro del lugar ya habían retrocedido un par de metros al ver la cara del primer ministro.

La emperatriz se cubrió el rostro con el abanico mientras fingía ser una sombra.

Por otro lado, Hai Yue Lan ya había caído bajo la tentación del emperador, "Me gustan los libros..."

Una enorme sonrisa se formó en los labios del emperador al escuchar eso, "No hay ningún problema, si aceptas que te haga una pintura, te regalaré la biblioteca de palacio"

Mordiendo el cebo que se le puso en frente, los ojos de Hai Yue Lan se iluminaron, "Esta bien, acepto"

"¡Me opongo!" El rugido del primer ministro sacudió toda la sala.

El emperador sonrió casualmente, "Oh, ¿De qué te preocupas? Tú no quisiste aceptar~..."

Al escuchar esas palabras, Hai Li Song por poco escupió un bocado de sangre. Sus hermosos ojos rojos se posaron en el rostro indefenso de su hija, y por fin tomó una decisión...

"... Deja a mí hija y llévame a mí"

"¡Okey!" El emperador sonrió con descaro al haber logrado su objetivo.

La cara del primer ministro carecía de vida, era como si al pronunciar esas palabras hubiese vendido su propia alma al diablo. Pero por su hija, ¡Estaba dispuesto a soportarlo!

La emperatriz y el rostro de los presentes vieron el acto heroico del primer ministro y se secaron las lágrimas, nadie olvidaría el valor de este hombre sin importar cuántos años pasaran.

"Sistema, ¿Por qué todos están poniendo una cara como esa?" Cierta niña que no entendió la situación se rascó la cabeza y decidió preguntar.

[*Suspiro* ¿No aprendiste nada de estos últimos cuatro años?]

"¿Huh? ¡Claro que sí! ¡Aprendí que la comida en varios países puede variar dependiendo del sabor de los ingredientes, incluso si son los mismos! ¡Tambien hay muchas cosas interesantes en el resto de las culturas extranjeras!"

[¡Por eso digo que no aprendiste nada!]

❇❇❇❇❇❇

De esa manera pasaron dos horas, el emperador premió al primer ministro en frente de muchas personas importantes, la popularidad del primer ministro salió disparada por los aires mientras toda la capital se llenaba de jubiló y dicha.

Actualmente, Hai Yue Lan se encontraba sentada en el jardín imperial en compañía del séptimo príncipe, al cual había visto unas horas antes de entrar al palacio.

En el transcurso de estos cuatro años, Hai Yue Lan había mantenido la comunicación con Murong Yu Sha a través de cartas y pequeñas visitas anuales. El séptimo príncipe había dejado de ser un niño pequeño para ahora convertirse en una atractivo joven noble con una sonrisa demoledora. Su pequeño cuerpo había crecido hasta estar a la par con un adulto, aunque aún seguía teniendo cierta preferencia por el amarillo, casi todas las ropas que vestía ahora eran de un brillante color verde. Hai Yue Lan observó al joven que tenía en frente y no pudo evitar preguntar...

"Xiao Yu, ¿Por qué te cortaste el cabello?"

Murong Yu Sha escuchó su pregunta y sonrió tímidamente mientras bajaba su taza de té, "... Bueno, sabes que la mayoría de las personas me confundía con una niña cada vez que ponía un pie fuera de palacio, así que decidí cortármelo para parecer más varonil... ¿No te gusta?"

Al ver que la actitud del séptimo príncipe casi no había cambiado desde que eran pequeños, Hai Yue Lan levantó la comisura de sus labios en una sonrisa apenas perceptible, "No está mal, aunque aún me gustaba tu cabello largo, el pelo corto también te queda bien"

La cara del séptimo príncipe se puso aún más roja mientras bajaba la cabeza, "... Lan'er también se volvió muy bonita..."

"¿Mm? ¿Dijiste algo?" Hai Yue Lan no pudo escuchar sus últimas palabras.

El cuerpo de Murong Yu Sha se tensó al instante, con la cara aún roja como una cereza trató torpemente de cambiar de tema, "... H-había escuchado que te fue muy bien en tus viajes, ¿es cierto?"

Hai Yue Lan asintió con la cabeza, pero justo cuando se disponía a contestar, una magnética voz masculina detuvo sus palabras.

"¿Estas de vuelta?"

Tanto Murong Yu Sha como Hai Yue Lan giraron la cabeza al origen de esa voz, pero sólo se encontraron con un par de profundos y oscuros ojos negros como la tinta.

El príncipe heredero, Murong Shu Chen, se acercaba lentamente a ellos.