Un hogar acogedor

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Esa mañana, una hermosa joven de cabello oscuro caminaba casualmente por los extensos corredores del palacio de hielo. En sus manos blancas como el jade, se encontraba una cesta llena de alimentos, desde largas zanahorias hasta coloridos tomates. Las mangas de su tunica fueron enrolladas hacia arriba, revelando el par de delicados brazos que a simple vista parecían bastante frágiles. El cabello que antes fluía graciosamente por su espalda, había sido recogido en un moño sin imagen, una especie de peinado que causaría el terror de cualquier mujer.

El sistema, que estaba viendo todo esto desde un lugar apartado, puso los ojos en blanco y sintió una inexplicable sensación de crisis.

[Oye, niña...]

"¿Huh? ¿Qué sucede?"

[¿No te arrepientes de haber gastado casi todos tus puntos en estos alimentos?]

"..."

Hai Yue Lan detuvo sus pasos, giró la cabeza de izquierdo a derecha como si buscara algo, "Oye sistema, ¿Me dices en dónde estás?"

[¿Por qué quieres saber?]

"Para golpearte por supuesto."

[...]

Al notar que la otra parte no decía nada, Hai Yue Lan levantó el mentón y sonrió con orgullo. Sin embargo, luego recordó el alto precio de la comida en la tienda del sistema operativo y no pudo evitar llorar dolorosamente.

¡¿Desde cuándo una zanahoria cuesta más que un auto deportivo?!

Hai Yue Lan sintió que era injusto, pero viendo que Mo Bingxin no tenía más que hielo en su cocina, cierta persona solo pudo apretar los dientes y soportar la dolorosa sensación de gastar dinero. Con un poco de pesar, Hai Yue Lan bajó la cabeza y observó inexpresivamente las verduras en su canasta, de alguna manera sintió que llevaba una mina de oro en lugar de vegetales. Después de eso, alzó la mirada hacia la pantalla brillante frente a ella y las lagrimas volvieron a derramarse.

.... 30 puntos.

De solo verlo sintió dolor en el corazón.

Luego de detenerse por varios minutos, Hai Yue Lan reanudó su camino hacia la cocina, ignorando la voz mecanica del sistema que hacia eco en su cabeza.

Esta vez, sin embargo, cuando Hai Yue Lan abrió la puerta, se encontró con una escena que la dejó estupefacta.

Allí, sentado frente a la mesa, un hombre alto y de hermosas facciones sostenía un gran trozo de hielo sólido, las dos pupulas brillantes como el oro observaron atentamente el trozo de hielo antes de meterlo directamente en su boca.

Al siguiente segundo, el sonido de 'crack' 'crack' resonó en toda la cocina.

La boca de Hai Yue Lan se contrajo notoriamente. Estuvo a punto de dar un paso al frente, cuando notó que Mo Bingxin movía un poco los dedos y otro trozo de hielo apareció mágicamente en su mano. Viendo que el hombre realmente estaba dispuesto a comer hielo para sobrevivir, Hai Yue Lan sintió ganas de palmearse la cara.

"¡Mo Bingxin!"

Mo Bingxin, que estaba punto de meter el cubo de hielo en su boca, se congeló momentáneamente, después de unos segundos se dio la vuelta y sonrió.

"Bienvenida..."

Tal vez pensó que sus palabras no eran suficientes, vaciló un momento antes de extender el cubo de hielo y preguntar, "¿Quieres?"

Hai Yue Lan: "..."

El hombre vestido de blanco vio que la niña no respondía a su buena voluntad y se enojó un poco. No obstante, luego vio la cesta llena de verduras y la sorpresa parpadeó en su mirada.

"¿Eso es?"

Hai Yue Lan lo miró extrañamente, sacó una zanahoria de la canasta y le preguntó, "¿Sabes que es esto?"

Mo Bingxin sacudió la cabeza.

Una sonrisa malvada floreció lentamente en los labios de Hai Yue Lan, miró al hombre guapo y dijo, "Es un alimento mágico que mejorará rápidamente tú vista."

"¿De verdad?" Las pupilas doradas de Mo Bingxin se encogieron ante este nuevo descubrimiento, miró la zanahoria en manos de Hai Yue Lan con una expresión confusa.

Hai Yue Lan vio esta reaccion y tuvo ganas de molestarlo un poco mas. Esta vez sacó un tomate rojo de la canasta y se lo entregó a Mo Bingxin. "Esta fruta se llama 'El hijo perdido del emperador' si te la comes te volveras un hombre grande y fuerte como tu padre."

Mo Bingxin levantó la cabeza, su hermoso rostro fue inexpresivo como de costumbre, "No recuerdo a mi padre."

"Tos tos... no importa, solo tienes que ser bueno y comerlo, ¿Está bien?" Hai Yue Lan, que estaba imitando las mismas palabras que le dijo su madre hace algún tiempo, se dio cuenta de que la situacion no era la correcta y no pudo evitar atragantarse.

"¿No puedo comer hielo?" Mo Bingxin ayudó a Hai Yue Lan a poner la cesta sobre la mesa miestras hacía esa pregunta.

Hai Yue Lan, por su parte, ni siquiera dudo dos segundos antes de respi3nder, "¡No, por supuesto que no! ¡Desde hoy en adelante tienes prohibido comer hielo!"

"... Entiendo."

✳✳✳

Después de lo sucedido, Mo Bingxin se sentó en una de las sillas y no dijo nada más. Sus ojos frios como el hielo observaron casualmente a la joven moverse con habilidad en la cocina, desde cortar los alimentos hasta derretir el cielo y usarlo como fuente de agua, parecía muy acostumbrada a esta clase de cosas. Mo Bingxin cerró los ojos y sintió que una parte de su corazón se volvía cálido de repente. Por primera vez tuvo ganas de llamar a este frío palacio un hogar acogedor.

Hai Yue Lan,  que estaba ocupada pelando papas en el fregadero, de pronto se sorprendió al descubrir que la barra de afecto sobre en la cabeza de Mo Bingxin avanzaba una vez más.

23%.

Giró la cabeza y observo al hermoso hombre de traje de blanco que parecía haberse dormido.

"Ah, pobre emperador del invierno. Probar comida por primera vez lo conmovio hasta este punto, que inesperado."

[.... No tengo palabras.]

"¿Ah?"

[...]

La Heroína Es La Villana LanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora