Una vida esperando la aceptación de la persona que más te debería querer en el mundo, esperar que de su boca salgan unas simples palabras...
Que fueron escuchadas solo cuando se las dedico a otra persona.
Después de vivir toda su vida bajo una menti...
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El silencio fue sepulcral al entrar, no fue hasta que tomaron asiento que eso se acabó, se escuchaba la voz de su madre y las otras personas que les acompañaban.
Ver a su madre no era constante, aquello ocurría solo un par de veces al mes, en donde ella aprovechaba para comer con sus hijos, ella disfrutaba de verlos con sus conjuntos mientras concluía sus negocios.
Para ellos era aburrido, pero incluso así no se quejaban de pasar aquel momento con su madre.
El restaurante no era demasiado caro pero si era elegante, observando el lugar el gemelo menor fue interrumpido, un melodioso sonido llamo su atención, en una esquina del lugar se hallaba una chica de largo cabello negro, sus manos deslizándose con delicadeza sobre las teclas de aquel piano, llamo su atención.
La vista de la joven jamás se despego de aquel instrumento, una canción tras otra y cuando finalizo hizo una reverencia para después salir de ahí, 5 segundos, solo 5 segundos logro verla completamente, vestía un vestido blanco sencillo pero elegante y sus zapatos tenían un poco de tacón, en su rostro, sus ojos de un color azul tan oscuro como la noche y brillaban como si de estrellas se tratase, su cabello negro era largo y se veía suave, todo su rostro era perfecto y delicado...
Aquella melodía no se le borraría de la cabeza
Esto era lo que la gente llamaba ¿Amor a primera vista?, Se preguntó Kaoru solo un par de segundos.
— Hey, hey, te estoy hablando — Pidió su atención Hikaru agitando las manos frenéticamente frente a él. — ¿Ocurre algo?.
— No, no ocurre nada — Contesto.
— Entonces vámonos — Hikaru salió detrás de su madre y detrás de Kaoru quien dio una mirada atrás por última vez esperando ver a aquella chica... Cosa que no sucedió.
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