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El primer día de clases en el instituto Ouran de la joven llegó, se sentía emocionada y nerviosa al mismo tiempo, dejo a tras a sus viejos compañeros para conocer nuevos y le fascinaba la idea, conocer personas interesantes, presentarse y hacer amigos... Pero no fue como ella esperaba.

— Mi nombre es Yukiko, espero que nos llevemos bien — La joven portaba su uniforme femenino de color amarillo, zapatos limpios, su cabello adornado por una diadema de color celeste, sus ojos miel se veían grandes debido a las gafas pero eso solo hacia que se vea más tierna, y su pálida piel parecía de porcelana, la belleza de la joven logró atraer la atención de los chicos del salón y la envidia de sus compañeras.

— Ella no es de nuestra clase — Escucho como susurro detrás de ella una vez que tomo asiento.

Aquello le importo poco, estaba convencida que abría personas que la quisieran por lo que era y no por lo que tenía.

En el segundo día en clase de deportes la primera decepción se hizo presente.

— ¿De dónde sacaste tus tenis, de la basura? — Pregunto una chica con desagrado, el calzado estaba limpio y se veía bien, pero... No era de marca como el de sus compañeros.

Comentario que ignoro y prosiguió con sus actividades.

Ese día, los resultados del examen diagnóstico se hizo presente, Yukiko había quedado en segundo lugar y no podía esperar para mostrarle los resultados a su padre, esperando que se sintiera orgulloso de ella.

Sin embargo, solo recibió una rápida mirada, "Me alegra que te tomes en serio tus responsabilidades", Fue el único comentario que recibió.

Las personas en esa aula de clases, comenzaron a ver a la joven como a una chica de la cual sacar provecho.

"Hana, ¿Podrías pedirle al profesor que alargue el plazo de entrega?".

"Yukiko, necesitamos alguien que se encargue de la decoración del aula, ¿Lo harías por nosotros?".

"Tenemos un trabajo en equipo pero temo decir que estaré ocupada, ¿Está bien si te lo dejo?".

"No sé absolutamente nada, ¿Me pasarías las respuestas del examen".

Poco a poco los "pequeños" favores se volvieron órdenes.

"Aquí está mi tarea, es para mañana".

"¿Terminaste nuestro ensayo?"

No fue mucho lo que duró esa situación, si bien al principio pensó que hacerlo le ayudaría a mejorar su relación con sus compañeros, al instante se dió cuenta de que solo le utilizaban y después de negarse a hacer los deberes de sus compañeros, la situación cambio.

"Enserio crees que te puedes negar ¿Cómo alguien de clase baja puede revelarse así?".

"No te lo estoy pidiendo, te estoy diciendo que lo hagas"

"La basura no habla"

"¿Porque no solo haces lo que te digo" no tienes derecho de negarte"

Cada vez peor..

"UPS, No te Vi ¿Estás bien?".

"Parece que a la pelota le gusta estamparse contra tu cara".

"Lastima que se te callo la billetera en la fuente, o bueno quizás no, dudo que tengas dinero"

Claro que había un límite.

Cuando una joven de su aula quiso golpearle por "arruinar" su cabello, solo porque pasó cerca, se puso a la defensiva, tomo a la joven de la muñeca y de un solo jalón le tiró al suelo.

— No me vas a tocar ni un solo cabello — Dijo con enfado sobre la chica — Y va para todos, ya estoy harta.

Fue una pequeña escena que dejó impactados a varios, le tenían "miedo" y solo así le dejaron de fastidiar.

Le quedó claro, ella no pertenecía ahí, solo estorbada ,ser fría, cortante y algo agresiva eran las actitudes que necesitaba para no ser rebajada.

Pero un día eso no sirvió.

— Fíjate por dónde vas — Dijo enfadada a una joven que en cafetería le derramó la charola en cima.

— Cállate cuatro ojos, imposible que ni con esos lentes de botella me hayas visto — Respondió la chica.

Yukiko le tomo del cuello, la levantó y dió un golpee en la frente con solo sus dedos, dejando una marca roja en aquella chica.

La joven se inco en el suelo y se quejó por el golpee.

— Eres una problemática — Le Murmuró enojada.

— Si, lo que digas — La pelinegra dejo a la chica quejándose en el suelo y salió de la cafetería.

Eso llegó a oídos de su padre.

Daiki le tomo por los hombros y le sacudió con enfado — ¿¡Como se te ocurre comparte así en el Ouran!?.

— ¿Querías que me dejara humillar frente a todos?.

Recibió una leve cachetada por parte de su padre. — Aprende a comportarte en público, no vuelvas a tocar a esa joven, gracias a su padre tu puedes comer y asistir a ese colegio.

"Se supone que tengo que decir, ¿Gracias?" Se pregunto.

Pero la joven de la cafetería no dejo que las cosas murieran ahí.

—Te ves mejor así Hanakawa— La chica de la cafetería le tomo del brazo hasta salir del Insti para tirarle en el suelo, Despeinó su cabello, rompió su uniforme y quitó sus zapatos — Así deben de verse las personas con poca clase como tú.—Tomo el mentón de la joven obligándola a levantar el rostro y mirarle directamente a los ojos — Disfrutare tenerte de juguete.

Se dio la vuelta y se marchó, ese fue el primer día de su pesadilla.

Se dio la vuelta y se marchó, ese fue el primer día de su pesadilla

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Verdad | Ouran Highschool |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora